Híbrido, enchufable, diésel y con tracción quattro
El segundo modelo híbrido enchufable de Audi está listo para llegar al mercado durante la primavera de 2016. Tras la completa videoprueba del nuevo Audi A3 Sportback e-tron que realizó Joan Dalmau hace algunos meses, ahora es el turno de ponerse al volante de este mastodonte con tecnología híbrida plug-in combinada con un motor diésel TDI y tracción a las cuatro ruedas quattro.
Presentado en el pasado Salón del Automóvil de Ginebra, ha llegado el momento de probar y descubrir todas las novedades de este SUV alemán. Para ello me he desplazado hasta el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) de Madrid, lugar donde tuvo lugar la presentación internacional del modelo.
También nos subimos al Audi A7 Sportback h-tron, un prototipo híbrido enchufable de pila de combustible de hidrógeno, del que os hablaré en los próximos días.
El Q7 más ahorrador
Equipado con un motor diésel V6 3.0 TDI de 258 CV y 600 Nm de par máximo, se combina con un motor eléctrico con forma de disco integrado en el cambio tiptronic de ocho velocidades que rinde 94 kW (unos 126 CV hecha la conversión) y 350 Nm de par.
La combinación de ambos propulsores se traduce en 373 CV de potencia y unos meritorios 700 Nm de par motor que le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 6 segundos y alcanzar los 225 km/h de velocidad punta. Todo ello con un consumo medio de homologado en el ciclo NEDC, según la normativa vigente para vehículos híbridos enchufables, de sólo 1,7 l/100 km con unas emisiones de CO2 de apenas 50 g/km.
La batería de iones de litio tiene una capacidad de 17,3 kWh, lo que se traduce en una autonomía en modo eléctrico de alrededor de los 55 km, una cifra razonable que en la mayoría de los casos podría permitir ir al trabajo sin gastar combustible si las condiciones de la vía son favorables y si se practiva una conducción eficiente. Además, la marca de los cuatro aros le otorga una autonomía total, contando con el motor TDI, de 1.410 km antes de tener que repostar de nuevo.
Según datos proporcionados por Audi, la tecnología de carga de dos fases permite utilizar potencias de hasta 7,2 kW para la recarga de la batería. En una toma de corriente de tipo industrial –dependiendo del tipo de instalación y del cable utilizado- la carga total de la batería se realizaría en torno a las dos horas y media, mientras que en un enchufe convencional deberemos esperar 8 horas para completar la carga.
Pequeños cambios
El potente diseño del Q7 se mantiene prácticamente inalterado en la versión híbrida enchufable e-tron. Con sus 5,05 metros de longitud en el apartado visual el Q7 sigue imponiendo respeto entre el tráfico común. Pero si nos fijamos entre una versión estándar y esta e-tron pueden observarse algunas diferencias de diseño creadas, básicamente, para mejorar la aerodinámica del modelo y conseguir un meritorio coeficiente aerodinámico de sólo 0,34.
La característica parrilla Singleframe presenta más lamas horizontales que las del Q7 normal, las entradas de aire son ligeramente diferentes, la parte inferior del paragolpes es de nuevo diseño, se instala un difusor trasero más efectivo y se montan llantas específicas de 19 pulgadas de baja resistencia al aire. Además se instala el logotipo e-tron en la parte trasera y en los laterales.
En el interior no se aprecian cambios en la habitabilidad para sus cinco ocupantes. La batería va situada bajo el piso del maletero por lo que no puede montarse una tercera fila de asientos para completar las siete plazas que sí puede tener un Q7 estándar. La fila trasera puede desplazarse longitudinalmente y ofrece respaldos reclinables para aumentar el confort de los pasajeros.
El hándicap que supone instalar las baterías debajo del piso del maletero obviamente le resta algo de capacidad de carga. En este caso el volumen con los asientos en su posición original es de 650 litros, mientras que con la segunda fila de asientos abatidos se aumenta el espacio hasta los 1.835, ligeramente por debajo de una versión estándar. En el Q7 e-tron se incluye de serie la apertura eléctrica del portón.
Los cambios los encontramos en los sistemas sujetos o relacionados con el sistema híbrido del coche. El cuadro de instrumentos Audi Virtual Cockpit, con su pantalla de 12,3 pulgadas detrás del volante, se ha adaptado a las necesidades específicas del modelo. En este caso es capaz de representar la información necesaria en gráficos en alta definición y rediseñar los indicadores circulares para una mejor comprensión a la hora de realizar una conducción eficiente. También queda representado el estado de la carga de la batería, la potencia eléctrica con el “power meter”, pantallas para ver el flujo de la energía y la autonomía restante.
En cuanto al sistema de infoentretenimiento se añaden elementos específicos para las pantallas relacionadas con el sistema eléctrico, como estadísticas de consumo, representación gráfica de la autonomía en modo eléctrico en el navegador y el estado de la recarga o la programación de la climatización.
Toma de contacto
Al volante del Audi Q7 e-tron las sensaciones son muy confortables tanto por comportamiento como por la buena puesta a punto de los elementos del chasis. Es más pesado que su homónimo con motor únicamente de combustión, pero la dinámica de conducción sigue siendo bastante buena.
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Es relevante contar la fuerza que exhibe a la hora de acelerar, ya sea desde parado como en recuperaciones a la hora de adelantar un vehículo. Los 700 Nm de par máximo son toda una bendición en este caso. Pero si algo destaca en este Q7 tan “verde” es sin duda en las múltiples opciones de conducción que propone.
Cuatro son los modos que el conductor puede seleccionar para adecuar las características del coche al tipo de conducción que mejor convenga en cada momento. El modo EV prioriza la utilización del sistema de propulsión eléctrico. En el modo híbrido es el propio sistema el que gestiona de forma automática en qué condiciones debe utilizar cada tipo de propulsor o combinarlos si es preciso. El tercer modo reserva la carga de la batería para futuras situaciones en la conducción, echando mando únicamente al motor térmico, y por último un modo de carga de la batería mientras se circula.
El Audi Q7 e-tron quattro normalmente inicia la marcha en modo eléctrico si dispone de suficiente carga de batería y se mantiene de esta forma hasta que se alcanza una velocidad elevada, si se precisa de más potencia para afrontar una fuerte pendiente o si queremos una aceleración más fugaz.
También cuenta con un modo de marcha libre o comúnmente conocido como “a vela”. Este sistema comienza a funcionar en cuanto el conductor levanta el pie del acelerador y la palanca del cambio automático se encuentra en la posición “D”. En ese caso se apagan los motores térmico y eléctrico y el vehículo se mueve por la inercia. Un sistema muy útil cuando circulamos por autopista en bajada, por ejemplo.
Con el cambio en la posición “S” y con el modo de carga de la batería seleccionado, el sistema de recuperación de la energía se activa tan pronto se suelta el acelerador. En este caso la retención de los dos motores es mucho mayor lo que permite detener el coche casi por completo sin utilizar el freno. Con las levas del volante se puede ajustar el grado de retención.
Me ha gustado especialmente la suavidad y la calma que transmite al circular con el modo EV seleccionado. El comportamiento es bueno y la suavidad de conducción, sin vibraciones ni reverberación del motor, es todo un lujo para los sentidos. Por supuesto el ahorro de carburante está ahí y si tenemos sitio para cargarlo en casa y en el trabajo, apenas visitaremos la gasolinera muy de vez en cuando.
La organización nos propuso una ruta de aproximadamente 100 km de longitud y nos instó a usar el modo automático, es decir, el que varía entre los cuatro modos de conducción para intentar lograr la mayor eficiencia posible. El recorrido comprendía tanto autopistas, carreteras secundarias como travesías por poblado. Al final obtuve una media de apenas 4,6 l/100 km sin realizar una conducción meramente ecológica.
El Asistente Predictivo de Eficiencia tiene gran parte de culpa de este buen registro. Este sistema es capaz de suministrar información precisa del entorno para adaptar el funcionamiento del coche según las características de la vía. Puede anticipar hasta tres kilómetros antes la llegada a un poblado, una fuerte pendiente, curvas o rotondas gracias a los datos del sistema de navegación, la cámara frontal y los sensores delanteros.
Cuando nos acercamos a un pueblo, por ejemplo, el sistema emite unos pequeños pulsos en el pedal del acelerador para advertir que puedes levantar el pie del acelerador y llegarás en modo vela sin gastar combustible o carga de batería. Este sistema usa la energía eléctrica en puntos específicos, como en ciudad, poblado o al circular a baja velocidad para maximizar la carga restante de la batería y usarla en momentos donde no se requiera demasiada potencia.
La suspensión y la dirección se han adaptado para mejorar la manejabilidad y la dinámica de conducción dado que, inevitablemente, este Q7 e-tron ha engordado unos kilitos respecto a las versiones de combustión estándar. Al volante apenas se aprecian cambios significativos y goza de una rodadura fina y confortable perfecta para realizar largos viajes.
Cargado de equipamiento
Como ya hemos comentado su llegada al mercado está prevista para la primavera de 2016 y lo hará con un precio de partida de 82.960 euros. Como cualquier otro Q7 podrá elegirse el grado de equipamiento, en este caso con los acabados Design y Sport, y contará además con algunos elementos muy interesantes que se ofrecen de serie. Entre ellos destacan, por ejemplo, el sistema MMI Navigation plus con una pantalla de 8,3 pulgadas, con 4G y WiFi para dispositivos móviles, el Audi Virtual Cockpit, el control del sistema de infoentretenimiento con la voz, el selector de modos de conducción Audi Drive Select o los faros LED.
Opcionalmente se podrá equipar un buen número de componentes para hacer aún más tecnológico al Q7 e-tron o para aumentar el confort a bordo. La marca propone como elementos extra los faros Audi Matrix LED, el Phone Box para recarga de smartphones mediante la inducción, la interfaz Audi smartphone para conectar teléfonos iOS y Android o o los sistemas de sonido 3D Bang & Olufsen y Bose, entre muchos otros. Un clásico.
El grupo VW confirma oficialmente el trucado de los motores V6 TDI del grupo VAG desde 2009 a 2015 para falsear sus emisiones de NOx despues de las acusaciones de la EPA de EEUU sobre ellos. Sus emisiones de particulas se elevarian hasta 9 veces las facilitadas por el fabricante!!! Asi que, merece la pena este Q7? Suerte que no vivo en una gran ciudad como Madrid o Barcelona donde la niebla provocada por la contaminacion de los vehiculos diesel de este grupo provocan intoxicacion y cancer en sus habitantes. Saludos