Denza

Daimler, la empresa alemana propietaria de Mercedes-Benz y Smart, tiene una joint-venture (empresa creada por otras dos y participada al 50% por ambas) con el fabricante chino BYD que, además de producir automóviles, es uno de los principales fabricantes mundiales de baterías de iones de litio para múltiples usos, entre ellos, la automoción.

El primer resultado de esa empresa conjunta (la joint-venture al 50% con una empresa local es la única fórmula autorizada por el Gobierno Chino para la entrada de empresas extranjeras en el mercado local en todos los ámbitos de negocio) es el Denza, un automóvil compacto eléctrico cuya versión de serie se ha presentado en el Salón de Pequín.

El Denza es un coche de 4,3 metros de largo, de cinco plazas y con un maletero de 460 litros y, por tanto, con un planteamiento parecido al del Nissan LEAF o al de las versiones eléctricas de coches como el Volkswagen e-Golf o el Ford Focus. Se venderá en China en dos acabados, el Lifestyle, con llantas de aleación, tapicería de piel y equipo de audio con pantalla táctil de 8 pulgadas y el Executive, que añade un equipo de audio de gama alta, navegador y faros de xenón adaptativos. El precio de salida en China, único mercado en que se ofrecerá, es de unos 43.000 euros aunque hay previstas ayudas y descuentos que permiten rebajar el precio en unos 14.000 euros.

El coche monta un propulsor de 86 KW y 290 Nm y un esquema de baterías BYD situadas dentro de una compacta estructura de aluminio debajo del piso. Con ello se asegura que cumplirá con los más exigentes criterios de seguridad, N-CCAp incluido. el coche se ha desarrollado a conciencia en un plan de 18 meses que ha incluido más de 1,2 millones de kilómetros y 20 prototipos sometidos a diferentes crash test.

Tal vez el aspecto más interesante del Denza es que la marca anuncia una autonomía de 300 kilómetros, una cifra respetable (el Leaf anuncia 199 y ni Golf ni Focus llegan a los 200). La recarga se puede realizar en toma doméstica, cargador público o un equipo wall box que proporciona la marca (pagándolo, por supuesto) que se instala en casa, carga más rápidamente (entre media y siete horas según el modo elegido) y se controla mediante una app.

Daimler tiene puestas importantes expectativas en el mercado chino de vehículos eléctricos. La cultura eléctrica en China, donde existe un importante parque de motocicletas de este tipo, parece apoyar el uso de este tipo de coches. Además, según la marca, los desplazamientos medios de los clientes urbanos chinos van de los 50 a los 80 km diarios, cifras asumibles para un eléctrico de este tipo sin que aparezca la famosa "angustia de la autonomía". El Denza se pondrá a la venta en septiembre en China.