Nissan Murano

El Nissan Murano de la generación anterior revolucionó el segmento de los crossover en el mercado americano cuando apareció en el año 2003. Su sorprendente estética le convirtió en un superventas en Estados Unidos y en objeto de deseo del público europeo que no pudo disfrutar de él hasta 2007 y tuvo que conformarse inicialmente sólo con las versiones de gasolina. Cuando llegó el diésel (aquí nuestra prueba del año 2011), coincidiendo con un rediseño completo, la expectación había caído y el coche tuvo -tiene ya que sigue a la venta- una carrera comercial más que discreta en Europa.

Ahora, Nissan lanza la segunda generación (tercera si consideramos el rediseño de 2009 como un modelo aparte respecto al original) y de nuevo sorprende con una estética muy conseguida. El Murano sigue siendo un crossover -nada de todoterreno- de 4,8 metros de largo, cinco plazas y un planteamiento de coche de lujo, casi metido en terreno premium.

La estética resulta muy atractiva. A primera vista recuerda a los nuevos modelos de la marca en este campo, tanto a la segunda generación del Qashqai (aquí la videocomparativa entre el 1.5 dCi 4x2 y el 1.6 dCi 4x4) como, especialmente, al X-Trail, el coche que viene a sustituir al Qashqai+2 con sus siete plazas y su superior longitud y que en Estados Unidos se vende con el nombre de Rogue y se sitúa en la gama justo por debajo de este nuevo Murano.

Destacan en el nuevo Murano la espectacular parrilla delantera, con una ancha V metálica, los faros, que siguen el estilo de los del 370Z, y los agresivos parachoques. Lateralmente sorprende la doble línea cromada que siguen la base y la parte superior de los cristales y que están a punto de juntarse en el pilar trasero donde ambas se acercan para alejarse de nuevo. El pilar mantiene una forma parecida a la del modelo anterior pero la impresión óptica es diferente al estar pintado en el color de la carrocería y en negro mate. Con ese toque negro se consigue una continuidad visual con las ventanillas y se enlaza con el alerón del techo, también negro.

En la trasera, los pilotos recuerdan a los del nuevo Juke, con su forma de boomerang, y el portón, de líneas bastante recargadas, cae bastante para ofrecer un bajo umbral de acceso al maletero. Nissan no ha comunicado todavía ni las dimensiones del coche ni la capacidad del espacio para equipajes, de manera que habrá que esperar a la apertura del Salón de Nueva York para tener referencias de ello.

En el habitáculo destaca la reproducción de la V de base ancha y borde metalizado que define la consola central y que está claramente emparentada con la que el coche luce en la parrilla. Una pantalla de gran tamaño y una reducción notable del número de botones nos lleva a pensar que la mayoría de órdenes al coche se le darán a través de la pantalla táctil. También observamos en la instrumentación una gran pantalla a color entre los principales instrumentos, una pantalla que será configurable y en la que el conductor elegirá qué quiere ver.

La marca ha elegido para las primeras fotos del coche una unidad con un atractivo interior tapizado en cuero de color marfil combinado con un salpicadero también del mismo tono e inserciones de madera clara tanto en la consola entre los asientos como en la banda superior del salpicadero. La imagen de los asientos traseros permite intuir un habitáculo amplio, con bastante espacio para las piernas y un túnel de transmisión muy poco intrusivo.

Nissan ha anunciado sólo el motor de lanzamiento en el mercado americano que no es otro que el V6 de 3,5 litros de que ya disponía la versión anterior con 240 CV de potencia asociado a una caja de cambios de tipo CVT y a un sistema de tracción integral aunque también existirá una versión sólo con tracción delantera. Nada sabemos del motor diésel que, imprescindiblemente llevará en Europa (Mercedes, tal vez) cuando llegue a nuestro mercado bien entrado el próximo año.

Es de suponer que el nuevo Murano dispondrá de los últimos equipamientos de seguridad de los coches de la marca -gestión del cambio de carril y el ángulo muerto, cámaras periféricas, aparcamiento asistido, reconocimiento se señales de tráfico, detector de fatiga, etc...- y de los nuevos sistemas de conectividad y navegación de Nissan.

Este nuevo Murano se fabricará, como el anterior, en los Estados Unidos y reproduce con bastante fidelidad las líneas avanzadas en su momento por el concept car Nissan Resonance lanzado con ocasión del salón de Detroit de 2013 y del que ya avanzamos que sería el nuevo Murano.