Audi S5 Cabrio 3.0 TFSi: Huracán de sensaciones

Audi es un fabricante reconocido por su elevada calidad y por la deportividad y la elegancia que destilan todas y cada una de sus creaciones. Pero dentro de su extensa gama de productos algunos destacan por su exclusividad; sólo los más potentes, dinámicos y prestacionales son merecedores de lucir el emblema S que acompaña a su denominación. En el caso del S5 Cabrio su capota de tela practicable multiplica su distinción y hace de él un vehículo altamente seductor por su imagen pero también relativamente polivalente y confortable para disfrutar por igual de la conducción más impulsiva -gracias a sus 333 CV- pero también de una conducción relajada con el techo abierto. En este mismo grupo de automóviles de altas prestaciones, techo descapotable y cuatro plazas, encontramos alternativas similares, como el BMW Serie 3 Cabrio 335i o el Mercedes Clase E Cabrio 350 CGI pero es quizás el modelo de la firma de los cuatro aros el que ofrece un compromiso visual y de uso más equilibrado entre la deportividad, la modernidad, la elegancia y el confort. Como no puede ser de otra forma, los automóviles que se salen de la norma, o los de "rompe y rasga", tienen en su contra diversos factores inherentes a su condición: el primero suele ser la tarifa, considerablemente elevada en esta ocasión (más de 70.000 euros), y el segundo, su servidumbre a las miradas del resto de automovilistas y peatones, que clavan sus ojos indefectiblemente en el vehículo -y sus ocupantes- al verlo pasar; más aún cuando en sus ruedas calzan unas llamativas llantas en forma de estrella con 7 radios dobles de 20 pulgadas y su tapicería de piel combina el negro con un intenso rojo carmín.

La familia del A5, recientemente remozada por Audi, ha visto incrementado, su ya de por sí elevado atractivo estético, gracias a la incorporación de un nuevo frontal con ópticas rasgadas silueteadas por una tira de luz diurna de leds, una parrilla más agresiva y unos parachoques rediseñados. El resultado de todo ello es un perfil notablemente más estilizado que convierte al A5 Cabrio (si no lo era ya) en un auténtico rompecorazones. Y si a todo el arsenal estilístico desplegado por el equipo liderado por el magistral Walter DaSilva -responsable del diseño original del A5- le sumamos el atractivo adicional de los componentes "S", la fiereza y la sofisticación en el diseño del S5 Cabrio alcanzan su grado máximo. Entre los aditamentos propios de la gama deportiva de la marca figuran abundantes detalles cromados, como las lamas horizontales que atraviesan la parrilla, los perfiles que enmarcan los faros antiniebla o las carcasas plateadas de los retrovisores exteriores, además de la presencia las imponentes cuatro salidas de escape o del difusor trasero en color aluminio.

Con sus 4,63 m de largo, las plazas traseras ofrecen un nivel de confort estimable como para resultar útiles por todo tipo de pasajeros y en cualquier trayecto. En cuanto al maletero, lo mismo sucede: sus 380 litros de capacidad cuando se circula con el techo cerrado (320 abierto) se antojan suficientes para poder alojar diversas maletas. Abatiendo los asientos traseros se comunica el espacio del maletero con el habitáculo y se aumenta su capacidad de carga hasta los 750 l. Los pasajeros delanteros, además, gozan de una generosa amplitud que parece multiplicarse cuando se esconde la capota de lona en el receptáculo sobre el maletero. Esta operación -totalmente automatizada y gestionada desde un pulsador que hay junto a la palanca de cambio- comporta 15 segundos para la apertura y 17 para el cierre y se puede realizar en marcha si se circula por debajo de 50 km/h. Las múltiples posibilidades de regulación del puesto de conducción proporcionan una excelente y rápida adaptación, además cuenta con un dispositivo adicional de acercamiento del cinturón de seguridad que incrementa todavía más el confort. Por otra parte, el nivel de acabado interior transmite una sensación de altísima calidad. En la unidad probada, aluminio, negro mate y negro brillante y costuras en rojo en combinación con asientos de piel bitono negro-rojo decoran un habitáculo con un "baño" deportivo muy acentuado.

El corazón de esta máquina pasional es un V6 de tres litros turboalimentado que eroga 333 CV de potencia que le permiten alcanzar una aceleración de 0 a 100 en algo menos de cinco segundos y medio (con velocidad autolimitada a 250). A este poderoso bloque se le une el eficaz cambio S Tronic de doble embrague de siete velocidades con posibilidad de manejo secuencial y levas en el volante. La perfecta sintonía que muestran estos dos componentes transforma la conducción de este vehículo en un ejercicio de precisión y deleite difícilmente comparable. Sentir el brutal empuje de este bloque gestionado con la delicada suavidad de su transmisión de 7 marchas y todo ello por aderezado con una sonoridad mecánica embriagadora -especialmente acentuada cuando se circula sin techo- es una experiencia francamente inolvidable. La eficacia de todo el conjunto crece aún más gracias a la disponibilidad de la tracción total quattro, que permite ofrecer un comportamiento a toda prueba y garantiza la transmisión al suelo de toda la potencia generada por el motor, que no es precisamente poca. En cuanto a su consumo, se puede considerar un éxito los 8,5 litros de media homologada, aunque la realidad -y más aún si la conducción es "impulsiva"- es que las cifras se disparan con facilidad, especialmente en ciudad donde se superan con facilidad los 11,2 litros oficiales. Aunque los consumos no pueden ser una prioridad en un vehículo de corte "radical" como el S5, Audi lo ha dotado de un nuevo sistema de información al conductor con un programa de eficiencia en la conducción.

Pese a que circula casi sobre raíles y a demostrar un comportamiento intachable, neutro en sus reacciones, ágil y preciso en los cambios de dirección y apoyo y extremadamente estable, la marca alemana ofrece diversos equipamientos opcionales para incrementar las posibilidades dinámicas del vehículo. Uno de ellos es el conocido "Audi drive select", que permite adaptar la conducción a cada estilo según tres programas prefijados. Cada mapa modifica diversos parámetros, como la inyección de combustible, los regímenes de cambio de marchas y la servoasistencia de la dirección para ajustarse al estilo preferido del conductor. Otra interesante alternativa es el nuevo diferencial deportivo, que aporta una mayor dinámica al eje trasero y permite trazar plano las curvas gracias a una rapidez de funcionamiento superior a la del ESP. Al girar o al acelerar en curva, la mayor parte de la fuerza motriz fluye hasta la rueda trasera ubicada en el exterior de la curva, lo que equivale a "empujar" al vehículo hacia el interior de la curva. De este modo el sistema previene de la tendencia al subviraje (seguir recto sin obedecer el giro) o al sobreviraje (cuando la trasera parece querer "adelantar" a la parte delantera).

Como es habitual en la marca y en un modelo de sus características y precio, la seguridad es un elemento que evidencia un tratamiento concienzudo. En este sentido el S5 Cabrio cuenta con los elementos habituales: control de estabilidad, control de tracción o asistente de frenado pero opcionalmente puede incorporar además con diferentes asistentes electrónicos, como el de cambio de carril o el control de crucero adaptativo, que mantiene una distancia constante respecto a otros vehículos acelerando y frenando selectivamente. Para alcanzar una conducción mas deportiva y a la vez segura, la firma alemana ofrece también la posibilidad de montar dirección dinámica con desmultiplicación variable y un sistema de amortiguación adaptativa regulable que ajusta el tren de rodaje a las diferentes situaciones de conducción o estado de la calzada.

El compromiso alcanzado en este modelo entre el dinamismo y las prestaciones y el confort y la exclusividad es excelente. Prueba de ello es la dualidad de su uso, como un deportivo radical pero también como un placentero cabrio de cuatro plazas. Además, hay algunos elementos y equipamientos que refuerzan su carácter de descapotable Premium, como por ejemplo el sistema de calefacción para el cuello del conductor y del acompañante, -similar al AirScarf de Mercedes-Benz- con dos niveles de temperatura a escoger, y que impulsa aire caliente a la cabeza y la nuca de los ocupantes delanteros. Otra muestra de su sofisticación es el tratamiento especial de la tapicería de piel para reducir el excesivo calentamiento de la misma cuando está expuesta al sol de forma continuada. El confort acústico del que hace gala el S5 también es destacable, con un magnífico aislamiento de su capota de lona cuando está cerrada y una óptima protección sin ella, con mínimas turbulencias y la posibilidad de mantener una conversación sin elevar el tono de voz incluso a más de 120 km/h.