Dicen que quien compra un descapotable está demostrando una cierta dosis de egoísmo en su decisión. Muchos cabrios son vehículos de uso muy limitado, que sólo pueden ser disfrutados en compañía de otra persona, o en el mejor de los casos, de otros dos sufridos acompañantes.El diseño de estos coches resulta perfecto para incrementar nuestro ego. Visten bien y permiten lucir la melena (los que la conserven).
Pues si esto es así, bienvenido sea el egoísmo bien entendido, porque el Audi TT RS Roadster que hemos probado demuestra que, además de todo lo comentado, también es un coche que ofrece grandes sensaciones al volante, fruto de su concepción como deportivo de altas prestaciones. Su motor de gasolina de 340 CV es una delicia, y la respuesta de su chasis, apoyado por la eficaz tracción quattro, estimula rápidamente nuestros sentidos, dando una gran sensación de seguridad. El Audi TT RS Roadster también hace gala de la tradicional calidad de fabricación de la marca germana, aunque esto lógicamente tiene su precio: 69.580 euros. Es un poco más caro que su principal rival, el BMW Z4 sDrive 35is, también con 340CV. PVP: AUDI TT RS Roadster 2.5 TFSI 340 CV STronic quattro 69.580 €
Diseño
El Audi TT RS Roadster no es un coche grande, mide sólo 4,20 metros de longitud. No obstante, a primera vista aparenta mayor volumen, ya que su presencia es imponente. Visto por delante, llaman nuestra atención el gran faldón delantero, las amplias entradas de aire, la enorme parrilla con el emblema TT RS o las luces de posición LED, entre otros detalles que demuestran su espíritu deportivo. Visto de lateral, destaca la bonita capota de lona, que le da un aire muy clásico, y las preciosas llantas de aleación de cinco radios y 19 pulgadas. Para rematar su llamativa estética, en la zaga encontramos un difusor con dos salidas de escape cromadas y el spoiler de accionamiento automático, una opción que equipaba nuestra unidad de pruebas. Este alerón se desplega automáticamente a partir de 120 km/h, o podemos hacerlo nosotros mismos cuando nos venga en gana pulsando un interruptor. Por lo tanto, estamos ante un Audi para recrearnos la vista, y durante un buen rato.
Habitabilidad
El Audi TT RS Roadster es un deportivo de dos plazas. El habitáculo se percibe algo angosto al subirnos por primera vez al coche. Esto se debe al efecto que produce el pequeño parabrisas más inclinado de lo habitual, y el hecho de no haber espacio detrás de las plazas delanteras, con la excepción de unos pequeños compartimentos. No obstante, es algo esperado y aceptado en un coche de su condición, que no admite compromisos. En un coche así el maletero es un recurso muy utilizado para colocar la chaqueta o cualquier bulto El espacio que necesita la capota de lona una vez plegada no es excesivo, y como consecuencia, el espacio aprovechable del maletero es superior al esperado. Abrir y cerrar esta capota es un juego de niños, y además es una operación rápida: requiere tan sólo 12 segundos desde que pulsamos el interruptor, al lado de la palanca del cambio. El acceso a las plazas presenta la dificultad típica de cualquier otro deportivo de baja altura, a la que hay que acostumbrarse, aunque una vez dentro te encuentras muy a gusto. El tacto del volante es excelente (aunque personalmente no soy partidario del diseño achatado en su parte inferior) y las regulaciones son infinitas, por lo que adaptar la postura de conducción es coser y cantar. El contraste del salpicadero en color negro con las terminaciones de aluminio y la tapicería de color claro es acertadísimo, y crea un aire lujoso y deportivo que percibimos desde el primer momento en el que nos ponemos al volante.
Mecánica
Uno de los puntos destacados de este Audi es el motor. Se trata de un cinco cilindros de gasolina, con turboalimentación e inyección directa FSI, que da 340 CV. Es un motor de grandes prestaciones, que catapulta este Audi TT en el 0 a 100 km/h en 4,7 segundos, y permite alcanzar los 250 km/h como velocidad máxima limitada. El par motor, de 450 Nm, está disponible desde las 1.600 vueltas hasta los 5.300 rpm. Con estos datos, es fácil entender la tremenda elasticidad en su respuesta, para nada brusca pero sí contundente y efectiva. Desde el primer recorrido del acelerador el coche empuja sin titubeos, no percibimos en ningún momento la entrada del turbo y podemos estirar hasta las 7.000 revoluciones sin dilación. Falta que haya alguna carretera que nos lo permita, porque con esta potencia se puede ir muy rápido. En un deportivo de este estilo los consumos son algo secundario. Audi indica que esta versión gasta 9,5 litros de combustible a los 100 kilómetros de media, lo que no está nada mal teniendo en cuenta las prestaciones. A nosotros nos gastó algo menos rodando por autopista : 8l/100. Hay que tener en cuenta que a 120 km/h el motor gira a 2.000 vueltas, un régimen muy bajo. En carretera gastó 12,7 l/100 y en ciudad se fue a los 14,9 l/100km.
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Comportamiento
El motor del Audi TT RS Roadster se combina perfectamente con el cambio automático STronic de 7 velocidades, de tipo doble embrague y con posibilidad de accionarse de modo secuencial mediante levas detrás del volante. Es uno de los mejores cambios de marcha que hemos probado, toda una referencia en cuanto a precisión y rapidez: un pequeño toque a la leva, y ya tenemos la marcha insertada, sin pérdida alguna de régimen ni indeseados resbalamientos. La facilidad de conducción de este Audi es sorprendente. La tracción está en todo momento asegurada por el sistema integral permanente quattro, y esto nos da un grado extra de confianza a la hora de afrontar los virajes, sabiendo que las reacciones del coche son muy neutras y los límites están muy lejos. La suspensión tiene un tarado bastante firme, y contribuye a que el coche vire plano y entre en las curvas con gran rapidez. La dirección, directa y precisa, acaba de rematar una cadena cinemática muy bien diseñada y conjuntada . Aun siendo un roadster, la rigidez de la carrocería es encomiable. Al estar construida en buena parte en aluminio, el coche se percibe ligero y muy ágil, ideal para practicar un estilo deportivo de conducción. La frenada es contundente, gracias a la utilización de discos de freno autoventilados de 370 mm. delante y 310 mm. detrás con pinzas de cuatro pistones. El control de estabilidad puede desconectarse totalmente, para una mayor diversión, a ser posible en circuito. Por lo tanto, este coche ofrece potencia, estabilidad, precisión, facilidad de conducción y algo importante: una buena dosis de sensaciones, que se incrementan si conducimos a cielo abierto y percibimos totalmente la sonoridad que emiten sus escapes, en forma de bramido, perfectamente estudiada para estimular nuestros sentidos. Esto es tan sólo un detalle, pero indica hasta qué punto Audi, y más concretamente la división quattro GmbH, han concebido esta versión RS, destinada para hacer que cada minuto a sus mandos sea una agradable experiencia, cargada de deportividad.
Seguridad
Los airbags frontales y laterales cabeza/torax para conductor y acompañante son de serie. En caso de vuelco, este descapotable tiene el marco del parabrisas reforzado con protección antivuelco integrada y cuenta con unos arcos detrás de los asientos delanteros. Como corresponde a un coche de su calidad y precio, los sistemas electrónicos al servicio de la seguridad son varios: ABS de 5ª generación, distribuidor electrónico de fuerza de frenado, bloqueo electrónico de diferencial, control electrónico de tracción y control de estabilidad. Por supuesto, el sistema de tracción integral quattro es otra de sus características, y contribuye a hacer la conducción muy segura en carretera.
Valoración final
El Audi TT RS Roadster es un coche de auténtico capricho. Se dirige a personas que saben apreciar la conducción en el estado más puro, amantes de los vehículos con carácter deportivo pero no por ello radicales. Este Roadster ofrece grandes prestaciones, está preparado para ser pilotado, pero a la vez se ha diseñado para ser agradable, confortable y sencillo de conducir. Te hace sentirte mejor conductor de lo que eres, debido a la gran seguridad que transmite. Este es el carácter que Audi impone a sus vehículos, y que se ve perfectamente reflejado en la que es la máxima expresión entre sus descapotables. 69.580 euros es lo que pueden separarte de un coche como éste, cuya principal alternativa está en el BMW Z4, otro de los grandes en este segmento.
Es una pena que una marca como es AUDI se quedara atras en estos ultimos años por no querer dar su brazo a tocer ante las tracciones delanteras y su ya famosa correa de distribucion, a esta marca le esta salvando sus porches y el cambio que estan sufriendo con sus tracciones integrales,solo les falta ya sustituir la correa de distribucion por una buena cadena, yo pague el otro dia 900- por cambiar la correa y he tenido algun susto por la traccion delantera, de todas formas puedo decir que el AUDI A6 es un automovil sin problemas mecanicos ya que tengo 360.000 Kmts y averias han sido pocas o ninguna.