Aventurero urbano
Jeep se adentra en un segmento desconocido para la marca, el de los SUV pequeños, y lo hace con una apuesta casi sobre seguro. El Renegade cuenta con una estética que recuerda ligeramente a la del Wrangler, el modelo off-road por excelencia de la marca, combinada con un diseño fresco y desenfadado que, por lo que hemos podido comprobar, gusta mucho.
La llegada del Renegade a este segmento coincide con el gran crecimiento que están experimentando las ventas de SUV pequeños y de esta manera aprovechar el tirón y llevarse un buen número de ventas que le vienen muy bien a la marca, la que más ha crecido en lo que va de año en España
Tiene ante sí un duro reto, que no es otro que el de enfrentarse al superventas Nissan Juke, actualmente el referente en este tipo de vehículos, y a otros tantos como el Peugeot 2008, el Skoda Yeti, el Opel Mokka, Fiat 500X, Renault Captur, Suzuki Vitara o los recién llegados Mazda CX-3 y SsangYong Tivoli.
Para comprobar sus cualidades lo hemos probado con el motor 2.0 Multijet de 140 CV, con cambio manual y tracción a las cuatro ruedas. Con el nivel de acabado Limited el grado de equipamiento se posiciona en su punto más alto, teniendo en cuenta que la versión Trailhawk sólo puede montar el motor de 170 CV combinado con la nueva caja de cambios de 9 relaciones y una reductora electrónica.
Diseño con ADN Wrangler
Cuando alguien piensa en un Jeep lo más probable es que el primer modelo que le venga a la cabeza es el Wrangler. Todo un icono. Siguiendo esta pauta se ha desarrollado el Renegade, un pequeño SUV (o todoterreno urbano como lo denomina la propia marca) con varias señas de identidad que rápidamente hacen que se lo asocie con esta firma de automóviles.
El frontal exhibe la característica parrilla de siete franjas verticales custodiada por dos faros circulares de grandes dimensiones que le aportan una mirada inconfundible. El marco del parabrisas del mismo color de la carrocería es otro de los elementos característicos importados del Wrangler, como también lo son los grandes pasos de rueda de forma trapezoidal, los retrovisores montados en las puertas y una línea de cintura muy alta. Los pilotos traseros en forma de “X” están inspirados, según Jeep, en equipamientos militares, como los famosos jerrycan de gasolina.
Los 4,23 metros de longitud, 1,8 de ancho y 1,69 de alto, se ven representados por unas formas generales muy cuadradas, con mucho músculo, redondeadas en sus vértices. La parte baja de la carrocería está protegida por revestimientos plásticos de color negro que le aportan robustez visual y protección si su propietario decide adentrarse al campo con él. Algo que no debe descartarse porque es el SUV pequeño con mejores ángulos de ataque y salida.
El ambiente interior combina a la perfección elementos propios de todo un 4x4, como el asidero delantero para el acompañante o el marco que envuelve la pantalla del navegador con un guiño al pasado, aunque también cuenta con otros detalles y acabados más comunes en un vehículo convencional.
La calidad percibida es muy buena y como apunte personal diría que el diseño del salpicadero, los elementos de la consola central y los varios huecos portaobjetos distribuidos por todo el habitáculo están muy bien resueltos. Opcionalmente el cliente puede elegir diferentes detalles en color para las salidas de aire, en la base del pomo del cambio de marchas, en las puertas o los asientos, por ejemplo. Nuestra unidad, con todo en negro, se muestra un poco más clásica pero igual de atractiva. Cuestión de gustos.
Ya que os la he nombrado, la pantalla del sistema de infoentretenimiento que monta este coche de pruebas es opcional. De serie se equipa una radio con pantalla táctil de 5 pulgadas con Bluetooth pero la que veis en las fotografías es de 6,5 pulgadas y añade la función de navegación con cartografía 3D por 1.132 euros adicionales. En la parte final del artículo os detallo el principal equipamiento de serie que lleva esta versión Limited además de los extras que se le han añadido con sus correspondientes precios.
El cuadro de instrumentos me parece muy original y funcional. El toque desenfadado lo pone el tacómetro, que nos informa de la zona roja de las revoluciones del motor con una simpática salpicadura de barro, mientras que la gran pantalla TFT de 7 pulgadas situada entre los dos aros proporciona todo tipo de información relativa al ordenador de a bordo y al sistema de infoentretenimiento a color.
Un interior muy aprovechable
Las formas cuadradas que presenta la estructura de la carrocería, junto con una distancia entre ejes de 2,57 metros, se traducen en una habitabilidad envidiable. El Jeep Renegade es uno de los modelos más espaciosos de este segmento aunque también es cierto que es uno de los más grandes y que está a medio camino entre el segmento B en el que milita y el C, el de los Qashqai y compañía.
Las plazas delanteras son amplias, cómodas y confortables gracias a unos asientos muy ergonómicos, que además incorporan sujeciones laterales bien marcadas para evitar que se desplacen la espalda y las piernas ante fuertes inercias laterales. Como curiosidad, estos asientos incorporan en la zona de las cervicales un gráfico que recuerda al frontal del mítico Willys.
Atrás se aprovecha bien el espacio útil que proporcionan los pilares laterales rectos y un techo alto sin apenas caída. En las plazas laterales podrán viajar cómodamente dos adultos sin problemas de espacio para las rodillas o la cabeza. A la plaza central se le puede sacar un buen partido y es más ancha de lo que uno se imagina de primeras (obviamente no tanto como las de los extremos). En este caso el túnel central entorpece un poco la colocación de los pies y no tiene ningún tipo de sujeción lateral, pero su mullido no es demasiado incómodo y realizar pequeños trayectos sentados en medio no será tan incómodo como en otros modelos.
El maletero se resiente ligeramente debido a la buena habitabilidad de la segunda fila, sin embargo logra homologar unos interesantes 351 litros de capacidad gracias a unas formas totalmente cúbicas que nos permitirán aprovechar hasta el más mínimo hueco para cargar. Los respaldos traseros se abaten en proporción 60/40 de serie aunque también pueden pedirse opcionalmente asientos traseros partidos en secciones 40:20:40.
La capacidad total, con la segunda fila abatida, se amplía hasta los 1.297 litros y el piso nos ofrece la posibilidad de situarse en dos alturas. Si necesitamos transportar algún objeto largo contamos con la posibilidad de abatir hacia adelante el asiento del acompañante delantero para ganar espacio longitudinal.
Mecánica
La oferta mecánica para el pequeño de los Jeep comprende tres variantes de gasolina de 110, 140 y 170 CV y otras tres diésel de 120, 140 y 170 CV. Hay tres cajas de cambios a elegir (según el motor): manual de cinco velocidades, manual de seis relaciones o automática de nueve, y puede contar con tracción 4x2 o 4x4.
La unidad que nos ha cedido la marca esconde bajo el capó el motor diésel 2.0 Multijet II de 140 CV, con cambio manual de seis velocidades y con la configuración de tracción a las cuatro ruedas. Una combinación que se presenta muy apetecible si además de carretera le vamos a dar un uso esporádico por caminos de montaña, siempre que éstos estén en buen estado.
El Renegade ofrece el Jeep Active Drive de tracción variable. Se trata de un sistema de desconexión del eje trasero cuando las condiciones de tracción son óptimas y no se requiere del 4x4 para mejorar la estabilidad. El sistema se encarga de conmutar entre las dos y las cuatro ruedas motrices de forma automática sin la intervención del conductor.
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Con el Jeep Active Drive se incluye el sistema Selec-Terrain que ofrece cuatro ajustes independientes: Auto, Nieve, Arena y Barro. El modo Auto evalúa la situación y aplica el tipo de tracción necesaria (4x2 o 4x4) según convenga. Los otros tres son programas 4x4 calibrados especialmente para las condiciones indicadas.
Es el primer modelo que utiliza la nueva arquitectura modular 4x4 de Jeep denominada “small-wall”. Esto implica que se pueden fabricar varios modelos con los mismos componentes fundamentales y reducir costes. También garantiza menor tiempo de desarrollo y la posibilidad de variar la distancia entre ejes, los anchos de vía, los voladizos, etc…
Cuenta con suspensión independiente en las cuatro ruedas de tipo McPherson, con una altura libre al suelo de 21 cm. La estructura de la carrocería es de tipo monocasco con aproximadamente el 70% compuesta por aceros de alta resistencia que mejora el peso y garantiza la seguridad de los ocupantes en caso de colisión.
Diseñado para la carretera
La primera impresión al volante es la de que se trata de un coche totalmente pensado para el asfalto. La cuádruple suspensión independiente y un tarado más firme de la misma que en cualquier todoterreno, o incluso que la mayoría de los SUV de su tamaño, revelan su buen comportamiento en este tipo de firme.
Al volante se percibe como un coche muy seguro que se desenvuelve a las mil maravillas en asfalto. Es un vehículo bastante dinámico, especialmente por lo que comento de las suspensiones, y que balancea muy poco en curva. Este hecho también puede llegar a incomodar ligeramente ya que no filtra demasiado bien las irregularidades del terreno. Los badenes que se sitúan para que aminoremos la velocidad, por ejemplo, provocan rebotes exagerados.
El Jeep Renegade es un coche muy cómodo de conducir que apenas provoca fatiga al volante. La postura de conducción alta, más erguida que en una berlina, y con una visión periférica mayor sobre la carretera aportan un plus de bienestar a bordo.
Es destacable también la buena insonorización que ofrece al interior y la excelente filtración de las vibraciones del motor. En este caso, recordemos, estoy probando la versión diésel de 140 CV y una vez en marcha apenas se percibe ese típico traqueteo de los propulsores de gasóleo.
Esta mecánica posiblemente sea la más recomendable para el Renegade, desde mi punto de vista. No es un coche liviano, pues registra un peso total ligeramente superior a los 1.500 kg. Este motor aporta un plus de potencia adicional que garantiza adelantamientos con seguridad y el poder subir pendientes sin demasiado esfuerzo.
Con la versión de 140 CV y tracción 4x4 el ordenador de a bordo acabó registrando un consumo medio de 7,5 litros. Teniendo en cuenta que además de una conducción normal también lo apreté un poco e intenté hacer algo de off-road (a continuación os explico sobre esto) me parece un registro bastante aceptable.
En caminos de montaña se comporta. Sin más. Ni los neumáticos de orientación asfáltica ni las suspensiones duras pensadas para carretera juegan a favor del Renegade ante una conducción por tierra.
La tracción 4x4 ayuda mucho a la hora de afrontar alguna pendiente o complicación que se presente en el camino, pero no es recomendable adentrarse por sitios complicados porque no está pensado para tal fin. Para eso está la versión Trailhawk con reductora pensada precisamente para estos menesteres.
Tiene buenos ángulos de ataque y salida al disponer de voladizos cortos, sin embargo la altura libre al suelo no es la adecuada para superar obstáculos. Eso sí, con este Renegade se puede circular por caminos en buen estado y hasta por otros que presenten alguna dificultad. Pero repito, no es un todoterreno ni pretende serlo.
Buen equipamiento. Precio elevado
Lógicamente al tratarse de la versión tope de gama (volvemos a excluir al Trailhawk) el nivel de acabado Limited trae consigo de todo y prácticamente no hace falta añadirle nada. Sin embargo, como de costumbre en los coches de pruebas que nos ceden las marcas, nuestra unidad montaba algún que otro equipamiento opcional que os detallo a continuación.
El color Blanco Alpine de la carrocería y el techo negro nos hace añadir 1.258 euros adicionales a la factura. El interior de cuero con las costuras en color Beige otros 1.037 euros, las llantas de 18 pulgadas Granite Crystal 522 €, la pantalla táctil de 6,5 pulgadas con navegador y cartografía en 3D cuesta otros 1.132 euros y los cristales traseros sobretintados 157 euros más.
Al precio base de 29.000 euros para la configuración explicada anteriormente (motor, cambio, tracción y acabado) hay que sumarle los 4.106 euros en extras para obtener el precio final del modelo que veis en las fotografías: 33.106 euros.
Pero volvamos a los 29.000 euros iniciales. ¿Qué equipamiento de serie tenemos con el acabado Limited? Este grado de equipamiento nos ofrece un equipo de audio con pantalla de 5 pulgadas 6 altavoces y Bluetooth, el climatizador automático o el cuadro de instrumentos con una pantalla TFT de 7 pulgadas a color para el interior, las barras laterales del techo, los faros antiniebla, sensores de aparcamiento traseros, el Pack Safety que incluye el Aviso de salida del carril Plus y el Aviso de colisión frontal Plus, la monitorización de la presión de los neumáticos, airbags delanteros, laterales y de cortina, y el asiento del acompañante con el respaldo abatible en plano entre muchos otros equipamientos.
La política de precios (sin descuentos) lo sitúa como uno de los más caros del segmento. Sin embargo, a su favor cuenta con la baza de tratarse posiblemente del modelo con más personalidad de entre todas las opciones que tenemos para elegir, estéticamente hablando. Cuenta además con unos acabados de primera y con una amplia gama mecánica que cubrirá prácticamente todas las necesidades del cliente.
Aunque se trate de un modelo muy nuevo, debes saber que en Coches.net tenemos anunciados casi 80 Jeep Renegade, en su mayoría de kilómetro cero, que pueden hacer que te ahorres un buen dinero si te has decidido por su compra. ¿Por qué no le echas un ojo?: Jeep Renegade de ocasión
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