El Parlamento Europeo ha aprobado una directiva para que la UE se rija por unas normas concretas con el fin de acelerar el proceso de instalación de los puntos de recarga eléctrica y de hidrógeno.

El objetivo de esta iniciativa es servir de apoyo a fabricantes y clientes dispuestos a aportar su grano de arena en la movilidad sostenible. ¿Cómo? A través de unos planes de desarrollo que faciliten la implantación de una red de infraestructura lo suficientemente potente como para prestar servicio diario a conductores particulares, agencias de transporte o empresas de mercancía.

¿Cuáles serán las novedades del reglamento AFIR?

Con un respaldo de 485 votos frente a 65 en contra, el Parlamento Europeo ha propuesto algunos objetivos a cumplir por todos los países de la UE, entre los que destacan los siguientes:

  • En 2026, los países de la UE deberán contar con estaciones de carga cada 60 kilómetros, salvo que se trate de carreteras con poco tráfico.
  • De cara a 2028, optar por el impulso de estaciones de hidrógeno cada 100 kilómetros.
  • Por cada vehículo eléctrico ligero matriculado deberá suministrarse al menos un kilovatio de potencia. En el caso de los vehículos híbridos enchufables, 0,66 kW por modelo matriculado.
  • A finales de 2025, cada grupo de recarga deberá ofrecer una potencia mínima de 300 kW y contar con una estación individual de 150 kW como mínimo. Esta potencia llegará a los 600 kW y serán dos las estaciones de recarga de 150 kW en 2030.
  • En cuanto a los vehículos pesados, para cada grupo de recarga se exige un mínimo de 1400 kW y un punto de recarga de 350 kW como poco. En 2030, la potencia tendrá que haber alcanzado los 3500 kW y tendrán que añadirse dos estaciones de 350 kW.

Reforzar la red eléctrica, algo clave

Asegurar una capacidad de carga óptima es indispensable, tal y como ha señalado el informe de la Comisión de Transportes del Parlamento Europeo. Para hacerlo posible es preciso establecer una potencia de conexión mínima, de forma que ni los autobuses ni los camiones puedan quedarse sin suministro en algún punto de su recorrido.

La necesidad de un sistema de reserva para los operadores de transporte

Puesto que los conductores profesionales tienen que satisfacer necesidades muy diferentes con respecto a los particulares, sería preciso establecer un sistema de reserva, algo que los parlamentarios no han incluido en el informe.

Las empresas de transporte han de planificar sus rutas con cierta antelación y este sistema les aportaría mayor confianza y seguridad en el trayecto.

Un punto europeo de información en 2023

El Parlamento Europeo también ha previsto la creación de un punto europeo con información relevante acerca de las estaciones de carga. Su propuesta debería estar disponible a partir de 2023, de forma que los operadores de transporte puedan conocer la disponibilidad de los puntos de recarga eléctrica y de hidrógeno, así como los precios, la capacidad de suministro y el plazo de espera.

Una propuesta ambiciosa

Dentro del marco del paquete de medidas Fit for 55, el texto parlamentario es más ambicioso que el propuesto por la Comisión, de ahí que tenga mayor apoyo por parte del sector y de los usuarios. Y es que su finalidad no es otra que crear confianza en el comprador, además de contribuir a bajar el precio de compra del coche eléctrico en la UE para facilitar aún más el proceso de descarbonización.

Según la previsión actual de los objetivos marcados, en 2035 es posible que en España existan más de 610 000 puntos de carga distribuidos por todo el país.

Directiva AFIR