Tal como se acaba de anunciar desde Bruselas, la Comisión Europea tiene la firme intención de someter a aranceles de importación a aquellos vehículos eléctricos de batería que hayan sido fabricados en China y que sean introducidos en el mercado sin fronteras de la Unión Europea.
Se trata, por supuesto, de una medida algo controvertida, y parece estar impulsada por la ventaja desleal que podrían tener los fabricantes del gigante oriental. Según algunos, el arancel equilibra la balanza; pero, según otros, solo traerá más problemas.
Nuevos aranceles a los coches chinos: ¿Por qué?
Así lo acaba de anunciar la Comisión Europea: a partir de ahora, parece ser que se impondrán una serie de aranceles, de carácter provisional, a los vehículos de batería eléctrica que sean importados desde China.
Se trata de aranceles que llegarán hasta el 38,1 % y, tal como ha explicado el vicepresidente comunitario, Margaritis Schinas, la medida serviría para combatir una clara e ilegal ventaja que los fabricantes chinos tienen, en parte por los subsidios que les llegan desde Pekín. Todo esto se ha convertido en una amenaza para el sector automovilístico europeo, lo que ha ocasionado la necesidad de imponer estas medidas.
No todos están de acuerdo
Por supuesto, la medida tomada por la Comisión Europea no resulta ninguna novedad. Y es que, antes que ellos, países como Turquía o Estados Unidos ya habían realizado movimientos similares. Aun así, esto no significa que todo el mundo se haya mostrado de acuerdo.
De hecho, la parte de la industria automotriz europea que apoya estos aranceles no es tan significativa como cabría esperar. Y es que algunos fabricantes, como los alemanes, ya se han mostrado en contra. Los motivos son claros: el mercado tiene, a día de hoy, una importante dependencia de las ventas de coches eléctricos en el mercado asiático, y China podría responder con sus propias medidas para tomar represalias. Algunos de los fabricantes más importantes mantienen relaciones con dicho país, un mercado importante, e importan muchos vehículos cada año. Por eso, una respuesta por parte del Gobierno chino podría repercutir en ese sector.
Así, además de Alemania, otros países también se han pronunciado en contra, como es el caso de Hungría y de Suecia. Asimismo, el canciller alemán ha hecho lo posible por rebajar la cifra decidida para los aranceles.
Aranceles adicionales a los coches chinos: fechas y plazos
Estos nuevos aranceles, pues, no serán la única barrera que los vehículos con batería eléctrica de China tendrán que superar, ya que la cifra se sumaría al 10 % que ya existe en la actualidad. No obstante, hay que señalar que la nueva medida todavía no ha sido puesta en marcha, y la Unión Europea afirma que todavía queda abordar fases de investigación para decidir si se puede llegar a aplicar de forma retroactiva.
Esta fase de investigación, no obstante, no va a concluir hasta noviembre, de modo que todavía queda mucho por ver. En todo caso, según se ha anunciado, el 4 de julio será cuando se divulgue el reglamento con las conclusiones provisionales de la investigación en el Diario Oficial. Y, de este modo, la medida entrará en Vigor al día siguiente el 5 de julio.
La vigencia de esta medida
A partir del día en que entre en vigor, las partes interesadas van a disponer de 15 días para formular observaciones. Asimismo, se tendrán otros 7 días adicionales para los comentarios de las otras partes.
Antes de que se impongan los aranceles definitivos, si es que ese momento llega, todos los estados miembros podrían votar la propuesta. De ser aprobadas, estas medidas tendrán una vigencia de 5 años, tras lo cual se deberá volver a valorar la situación.