Las baterías de los coches siempre han sido un elemento crítico, pero, en la actualidad, la proliferación de los vehículos eléctricos ha contribuido a que su importancia crezca enormemente. La duración y la vida útil de estos componentes clave son factores muy tenidos en cuenta y su estado suele ser uno de los motivos de preocupación más habituales por parte de los usuarios.

La buena noticia, en este aspecto, es que el RACE (Real Automóvil Club de España) ya anunciado su intención de ofrecer la reparación y la sustitución de baterías en vehículos eléctricos e híbridos.

El compromiso del RACE

Por lo general, quienes se están planteando adquirir un vehículo eléctrico o un modelo híbrido enchufable tienen como principal preocupación la vida útil de las baterías. Así, el nuevo servicio de reparación o sustitución de baterías lanzado al mercado por el RACE parece nacer de esta motivación.

Dicho servicio, que va dirigido a sus socios, cubre a vehículos 100 % eléctricos, pero también a los modelos híbridos, a los microhíbridos y a los híbridos enchufables. Asimismo, el club se encarga de sustituir baterías fabricadas con diversos materiales, como las de níquel-cadmio o las de ion-litio, por ejemplo.

Una ampliación en la garantía

La nueva cobertura supone una interesante ventaja para los socios del RACE. Aquellos vehículos que ya no se encuentren dentro del período de garantía podrán beneficiarse de este servicio. La cobertura actuará como una ampliación en aquellos casos en los que la batería pierda eficiencia o su capacidad de carga descienda por debajo del 70 %. Eso sí, un requisito será que el coche tenga menos de 8 años para que pueda disfrutar de este beneficio.

Baterías con más vida útil

Los usuarios, por supuesto, perciben este nuevo servicio de protección para reparar o sustituir baterías de forma positiva, ya que este es un elemento clave a la hora de tomar decisiones. Después de todo, los compradores prestan especial atención a ciertas características de las baterías, como la velocidad de degradación (que variará en función de los materiales que se hayan empleado durante su fabricación). Del mismo modo, duración, eficiencia y autonomía son razones de peso por las que dichos usuarios pueden terminar decantándose por un modelo u otro.

Un punto positivo, en este aspecto, es el hecho de que los procesos de fabricación se han ido perfeccionando con los años. Las baterías que se instalan en la actualidad cuentan con una duración cada vez mayor. Según estiman algunos fabricantes, de hecho, la vida útil actual puede oscilar entre los 15 y los 20 años. Con la evolución tecnológica podría llegar a más.