Nueve de cada diez personas viajarán por carretera este verano, siete de cada diez tienen previsto realizar más de 1.000 kilómetros e incluso un 33,3% asegura que superará los 2.000 kilómetros, según una encuesta realizada por Coches.net y Motos.net. Es momento de vacaciones y de ponernos al volante. Y para hacerlo con seguridad y reducir los riesgos en carretera, aquí tienes estos diez puntos clave para viajar en coche en verano.

Antes de entrar en materia os recordamos que la Dirección General de Tráfico ha puesto en marcha un dispositivo de vigilancia con 780 radares fijos de control de velocidad (92 son de tramo), 545 radares móviles, 12 helicópteros, 245 cámaras de control de móvil y de cinturón (29 más que el pasado verano) y 39 drones para actividades de regulación (23 con capacidad para denunciar). Además, como novedad este verano, está intensificando el control durante los fines de semana con 34 motos camufladas.

Aquí tienes las 10 claves para viajar en coche en verano:

1. ¿El coche ha pasado su revisión?

Antes de iniciar cualquier viaje en coche es muy importante asegurarnos que está en perfecto estado: neumáticos con presión y estado correctos, ITV en vigor, líquidos, aceite, frenos, amortiguadores, iluminación…

El mantenimiento es clave sobre todo en un parque de vehículos de los más antiguos de Europa. La edad media ya alcanza los 11,9 años de edad media con un peso de los vehículos de más de 10 años del 59%, y lo que es peor, los de más de 15 años ya tienen casi el mismo peso que los que no superan los 9 años. Los coches que no hacen mantenimiento preventivo tienen de media un 42% más averías que los que sí lo hacen, según concluye un reciente estudio.

2. Vestuario y alimentación

La preparación del viaje es fundamental. Además de estar descansado y en buenas condiciones mentales, se incluye la ropa que nos vamos a poner para conducir y qué vamos a comer antes o durante el trayecto.

Duerme al menos 7 u 8 horas, evita comidas copiosas, flatulentas y con mucha grasa -mejor opta por un almuerzo ligero rico en proteínas y vitaminas-, y utiliza ropa ligera, transpirable y que te facilite la libertad de movimientos.

3. Siempre con el cinturón bien abrochado

El cinturón de seguridad es un elemento de seguridad obligatorio y también uno de los que más vidas ha salvado. Reduce hasta en un 80% el riesgo de muerte en caso de accidente.

Desde el 21 de marzo, la DGT considera infracción hacer un mal uso del cinturón por lo que asegúrate -por tu propia seguridad- que está correctamente abrochado, con la cinta tensa y sin enrollar. La multa por no utilizarlo o usarlo mal es de 200 euros y tres puntos menos en el carnet. Todos los ocupantes tienen que llevarlo puesto en cualquier tipo de trayecto.

La misma norma se aplica en el caso de que los ocupantes sean niños. Si su altura es igual o inferior a 135 centímetros estarán obligados a utilizar un sistema de retención infantil (SRI) homologado según su peso y altura. El SRI se recomienda utilizar hasta los 150 centímetros de altura y viajar en sentido inverso a la marcha durante el mayor tiempo posible.

4. Nada de alcohol ni drogas

El consumo de alcohol está presente en el 27% de los accidentes mortales, por detrás de las distracciones (31%) y por delante de la velocidad (25%), según los últimos datos disponibles de la DGT correspondientes a 2020.

Aunque la tasa legal máxima de alcohol permitida en España es de 0,5 gr/l en sangre o 0,25 mg/l en aire espirado ((0,3 gr/l y 0,15 mg/l, respectivamente, en el caso de conductores profesionales o noveles con permiso de conducción con menos de dos años de antigüedad), lo más sensato y responsable es no consumir nada de alcohol ni drogas.

5. Evita el exceso de equipaje

Llega el momento de cargar el coche con el equipaje pero no de cualquier manera ya que el peso influye en la conducción, supone una pérdida de potencia, una mayor distancia de frenado… Y si además, llevas un cofre en el techo, el centro de gravedad se eleva y el vehículo se comporta con mayor inestabilidad.

Por este motivo hay que evitar sobrecargar el peso, algo que hace un 20% de los conductores consultados por el RACE y Goodyear. También es importante colocar correctamente las maletas y bultos para que estos no se desplacen por el maletero. Coloca los bultos más pesados en la zona más adelantada y las maletas más grandes y rígidas en el fondo. Las redes te ayudarán a sujetar objetos más pequeños. Y siempre intenta llevar todo el equipaje en el maletero y no dentro del habitáculo porque en caso de frenazo brusco se convertirán en auténticos proyectiles.

6. Carreteras secundarias

Las carreteras convencionales o secundarias son las más peligrosas porque en ellas se producen dos de cada tres víctimas mortales. El accidente más frecuente es el de salida de vía y colisiones frontales al realizar adelantamientos. Recuerda que desde el 21 de marzo, con la nueva Ley de Tráfico, está prohibido rebasar en 20 km/h la velocidad máxima permitida en dichas vías para realizar un adelantamiento. Presta también atención a los cambios de rasante, curvas, calzadas estrechas y sin arcén. En este enlace te doy más detalles sobre cómo realizar un adelantamiento con la mayor seguridad posible.

Mucha precaución además con ciclistas y peatones caminando por el arcén. El año pasado, 110 personas fallecieron atropelladas, es decir, el 10% del total de fallecidos. Hay una preocupación en la DGT porque este año están creciendo las víctimas mortales en vías de alta capacidad. Concretamente en lo que llevamos de año, los fallecidos en autovía y autopista han crecido un 35% comparado con las cifras de 2019. En cambio, en las carreteras secundarias la siniestralidad ha bajado un 1% en el primer semestre del año.

7. Olvídate del móvil

Las distracciones son la principal causa de siniestralidad en las carreteras y sigue en aumento. Y el principal culpable es el teléfono móvil. Ponlo en modo coche si lo tiene o siléncialo para no verte tentado a leer mensajes. También evita distraerte al manipular el volumen del sistema de sonido, buscar objetos en la guantera, mirar el paisaje, atentes a los niños, iniciar una discusión o incluso comer.

Cuando circulas a 120 km/h, el coche recorre 33 metros cada segundo. Imagina que durante tres segundos no miras la carretera: habrás recorrido a ciegas una distancia superior a un campo de fútbol. 

8. Siempre con distancia de seguridad

Los conductores tenemos que dejar una distancia de seguridad suficiente entre dos vehículos para poder frenar el vehículo sin colisionar y evitar lesiones de gravedad. No respetar esta distancia conlleva una multa de 200 euros y la retirada de 4 puntos en el carnet de conducir. Una multa que puede llegar a 500 euros y 6 puntos si el agente considera que se ha producido conducción temeraria.

Esta distancia de seguridad es la suma de la distancia de reacción, es decir, la que recorre el vehículo mientras el conductor empieza a reaccionar ante el imprevisto, y la distancia de frenado, la distancia que recorre hasta que llega a frenar. ¿Sabías que circulando a una velocidad de 100 km/h recorres 27,7 metros en un solo segundo?

En este enlace te explico más detalles sobre la importancia de respetar la distancia de seguridad y cómo calcularla.

9. Adapta la velocidad

Un reciente estudio de la Fundación Línea Directa concluye que el 43% de los conductores excede los límites de velocidad. También nos recuerda que en la última década, uno de cada cuatro fallecidos en carretera murieron en un siniestro relacionado con exceso de velocidad.

Tan importante es no exceder los límites de velocidad como adaptar la velocidad a las circunstancias de la vía, tráfico, meteorología, estado del conductor, del vehículo… Estos son los límites de velocidad genéricos según el tipo de vía:

• Autopistas y autovías: 120 km/h

• Carretera convencional: 90 km/h (hay tramos a 100 km/h pero pocos)

• En ciudad: 50 km/h, pero también hay calles a 30 km/h y a 20 km/h

10. Descansa cada dos horas

Un gran error por parte de algunos conductores es tratar de hacer el viaje del tirón por esa idea de llegar cuanto antes y con la creencia de que conducir tantas horas no te cansa. Pero a todos nos pasa factura estar más de dos horas conduciendo sin descansar. Si a esto le añadimos que en los viajes en verano el calor afecta más a la fatiga y a la somnolencia, el aumento del riesgo está asegurado.

Inicia el viaje descansado tras haber dormido por lo menos 7 u 8 horas, haz una parada para estirar las piernas y refrescarte cada dos horas de viaje y evita viajar en coche en verano entre las 3 y las 5 de la madrugada y entre las 2 y las 4 de la tarde porque es cuando más afecta la somnolencia.

Ahora sí, te queremos desear ¡feliz viaje en coche!