Tras la reducción de las restricciones y el restablecimiento de la movilidad, el precio del combustible comenzó a subir significativamente, al menos así lo ha hecho con respecto a 2021. Por esa razón, muchos conductores empezaron a preguntarse qué podían hacer para ahorrar en gasolina y diésel.

Lo cierto es que existen algunos consejos que, pese a no hacer milagros, pueden reducir el gasto, algo que notarás si coges tu vehículo a menudo.

Recomendaciones para ahorrar en el consumo de diésel o gasolina

Estos trucos y sugerencias te permitirán ahorrar en el consumo de diésel o gasolina de tu coche. Una vez los conozcas, te darás cuenta de que reducir el gasto de combustible no es tan complicado como imaginabas.

Planificar el viaje

Si te organizas bien, podrás llegar a tu destino de manera segura, rápida y sin desperdiciar combustible. Ten en cuenta que alargar el viaje, aunque solo sea unos minutos, puede suponer un aumento de consumo considerable y, por ende, también del gasto.

Comprobar la presión de neumáticos

Si los neumáticos tienen una presión inferior a la adecuada (0,5 bares por debajo de lo recomendado) la resistencia a la rodadura aumentará. Esto, inevitablemente, disparará tu consumo de combustible haciendo que tengas que gastar más.

Para no perder ni un euro, te recomendamos también tener en cuenta el peso que llevas. Si el coche va cargado de maletas y demás, tendrás que aumentar la presión de los neumáticos.

Eso sí, procura no excederte: si las ruedas están más hinchadas de lo necesario, su resistencia disminuirá y el consumo de combustible aumentará.

Organizar el maletero

A la hora de hacer un viaje, es importante llevar justo lo imprescindible y dejar en casa todo lo que no se vaya a usar. Estos trucos te ayudarán a distribuir convenientemente la carga y, por ende, a ahorrar en el repostaje. El consumo de combustible puede dispararse si llevas demasiados kilos a bordo.

Velocidad uniforme

Circula de forma fluida en todo momento manteniendo una velocidad constante y evitando los cambios de marcha innecesarios. Si apenas pisas el acelerador y frenas de forma suave, el coche consumirá menos combustible.

Cuidar los filtros de aire

Encender el aire acondicionado conlleva un gasto de combustible, de ahí que sea necesario saber utilizarlo apropiadamente. Si el filtro está en mal estado, la potencia del motor se reduce y el consumo aumenta.

Apagar el motor

Ante un atasco o parada duradera, lo más recomendable es apagar el coche, pues el motor al ralentí no solo consume bastante carburante, sino que hace que el coche se caliente (deteriorando el motor con el tiempo). De hecho, un coche en ralentí puede llegar a consumir unos 0,5 litros de combustible por hora.

¿Aire acondicionado o ventanillas abiertas?

En ciudad, lo más recomendable es bajar las ventanillas del coche para ahorrar combustible. Sin embargo, en autopista, lo aconsejable es viajar con las ventanillas cerradas y el aire acondicionado en funcionamiento. De otra forma, el viento entraría en el interior, ofreciendo mayor resistencia, algo que requeriría más combustible.

Conducción eficiente en ciudad

Mantén la distancia de seguridad adecuada entre vehículos para regular tu conducción y así evitar acelerones y frenadas bruscos. De ese modo, podrás obtener un mayor campo de visión, anticiparte a las situaciones, disponer de más tiempo para reaccionar y conducir con suavidad.

Aprovechar bajadas

Los descensos son perfectos para aprovechar la inercia, circular a baja revolución y ahorrar en el consumo de combustible. En cuanto a las subidas, lo más acertado es retrasar la reducción de marcha en cada tramo, incrementando ligeramente la presión sobre el acelerador.