El sector de la automoción tenía amplias perspectivas con respecto a 2020, pero el coronavirus hizo saltar las alarmas, frenando toda posibilidad de avance. Esto se tradujo en una caída drástica en las matriculaciones de vehículos en España.
El año comenzó con datos positivos, pero finalmente el mercado del automóvil se ha convertido en uno de los más castigados. La pandemia provocó una fuerte crisis sanitaria y económica que aún continúa, dando como resultado la caída en ventas de turismos y todoterrenos.
Haciendo balance, el 2020 cerró con algo más de 850.000 unidades matriculadas, un 32,3% menos que el año anterior, cuyas unidades matriculadas ascendieron entonces a 1,25 millones.
Un año que queremos dejar atrás
Tras el comienzo de 2021 se han puesto encima de la mesa los datos relativos al cierre del ejercicio anterior con respecto a las ventas de coches en España.
El descenso de vehículos matriculados ha sido drástico, aunque en diciembre se registró un número similar al ejercicio anterior. Incluso se experimentó una subida del 0,1% (106.000 unidades matriculadas en diciembre de 2020 frente a las 105.850 matriculaciones de 2019).
Ahora bien, este dato esperanzador es fruto del esfuerzo comercial de concesionarios, marcas y distribuidores. De hecho, el objetivo era impulsar aún más las ventas, teniendo en cuenta el fin del plan RENOVE y la subida del impuesto de matriculación en enero de 2021.
El descenso experimentado en los vehículos comerciales ligeros es de 26,4%, con algo más de 158.100 unidades vendidas. En diciembre se matricularon unos 16.600 vehículos de este tipo, lo que supuso un 1,5% más que el año anterior.
En cuanto a las matriculaciones de vehículos industriales, autobuses, autocares y microbuses, se entregaron 1.757 unidades en diciembre, lo que supone un incremento del 10%. Ahora bien, teniendo en cuenta el conjunto del año, el total de vehículos matriculados asciende a 21.400, lo que supone una caída del 24%
Análisis por canales y segmentos
La venta de vehículos ha sufrido un duro revés. Durante el 2020, se matricularon 427.000 unidades a clientes particulares, con una caída del 27%. En cuanto al canal empresas, el año terminó con 328.000 unidades vendidas, lo que supuso una reducción del 24%.
Si hablamos de segmentos, noviembre fue un verdadero varapalo para el sector. Sin embargo, en diciembre experimentó una subida y la venta creció un 58%, principalmente en monovolúmenes grandes (22%) y vehículos urbanos (14%).
Teniendo en cuenta el tipo de carburante, los clientes han seguido apostando por los coches de gasolina, con un 41% de las ventas de diciembre. Le siguieron los vehículos correspondientes a energías alternativas, con un 33%, y los vehículos diésel, con un 26%.
Perspectivas futuras
Los expertos creen que la recuperación dependerá en gran medida de cómo evolucione la pandemia y la correspondiente crisis económica. Ahora bien, el fin del plan RENOVE, con 200 millones de euros sin utilizar, y la subida del impuesto de matriculación en 2021 no facilitan las cosas.
Este año se presenta complicado, al menos durante los primeros meses. Al final, el mercado estará sujeto a dos circunstancias clave: cómo influirá la subida del impuesto de matriculación en la decisión de compra, y la confianza del consumidor ante la evolución del plan de vacunación.