A muchos conductores que son amantes del motor y no saben mucho de coches les gustaría aparentar que son grandes entendidos. Si quieres saber cómo lograrlo, te presentamos algunas frases para dejar asombrada a tu audiencia. Parecerá que sabes, y mucho, de coches y que controlas la jerga tan bien como cualquier experto o mecánico.
Cinco expresiones técnicas para pasar por un experto en vehículos
“El ABS es muy intrusivo”
El ABS es obligatorio en todos los coches desde los primeros años del presente siglo. Este sistema antibloqueo de frenos ayuda a que las ruedas no se bloqueen ni pierdan tracción. Cuando se dice que es intrusivo es justamente porque le afecta a la calidad de frenada. Esto se traduciría en un mayor tiempo de frenado y un riesgo para la seguridad.
El ABS, además, evita que las ruedas se bloqueen ante una frenada brusca… muy importante para la seguridad del viajero y de los demás conductores. Siempre debería funcionar bien. Por tanto, un ABS muy intrusivo es básicamente el que no hace correctamente su trabajo y alarga las frenadas.
“El subviraje y sobreviraje parecen correctos”
Tanto uno como otro concepto están relacionados con la adherencia de las ruedas sobre el asfalto. En el primer caso sería la pérdida de adherencia en el tren delantero. Normalmente ocurre en curvas o giros cerrados. Los motivos por los que sucede son varios, desde tomar una curva a una velocidad elevada hasta frenar bruscamente.
Mientras que, en el segundo caso, el sobreviraje, consiste en una pérdida de adherencia, pero del eje trasero. El resultado es el típico derrape, al ir las ruedas traseras en dirección opuesta a las delanteras. Ante esta situación se debe girar el volante hacia el lado contrario al del morro del coche, reducir la velocidad y levantar el pie del acelerador.
“La carrocería balancea demasiado”
Los vehículos circulan constantemente y deben mantener una estabilidad mientras lo hacen. Así, los movimientos de la carrocería deben ser limitados. Cuando giramos el coche es cuando podemos comprobar si la carrocería tiene o no balanceo. Todo el peso de esta se inclina hacia el lado contrario.
Sin embargo, es normal que haya balanceo, el problema es cuando este es excesivo. Pues puede generar un descontrol en la dirección. Por tanto, no es un inconveniente, a no ser que se incline demasiado. Aquí afecta la resistencia del aire, la resistencia al derrape y la resistencia al levantamiento. Ante de comprar un vehículo es importante comprobar el balanceo.
“La dirección es muy directa”
Cuando giramos el volante para maniobrar las vueltas que le demos para una misma maniobra pueden variar de uno a otro vehículo. Aquellos que requieran menos vueltas de volante o menos giros son los coches que tienen una dirección muy directa. Todo está relacionado con la desmultiplicación de la dirección.
¿En qué consiste? Las direcciones menos directas son aquellas con una gran desmultiplicación. Es cierto que son más sencillas a la hora de maniobrar, pero cuentan con una menor precisión. La desmultiplicación está relacionada con el giro del volante y también con el ángulo de cambio de las ruedas.
“La sexta marcha es muy larga”
La clave para utilizar las marchas correctas es cuando el coche está circulando cómodamente. Si vamos con el vehículo por autopista con una marcha larga el consumo será menor. A la contra veremos que le costará acelerar, entre otras cosas, pero aun así salimos ganando, y el coche también.
Además, usar marchas largas permite mantener la buena salud del coche al no forzarlo a circular con una marcha inferior cuando esta ya le queda corta. Siempre debemos fijarnos en la respuesta del motor al cambio de marchas. Al final tenemos que pensar que con cada marcha se consigue un resultado y sensación concretos.