Apenas se conoce el papel de las mujeres en el sector de la automoción. Sin embargo, podemos encontrar mujeres conductoras, ingenieras y grandes empresarias que han aportado su granito de arena para mejorar esta industria.

¿Sabías que Clärenore Stinnes fue la primera mujer en dar la vuelta al mundo en coche? ¿O que Dorothy Levitt, además de inventar el retrovisor, batió diferentes récords de velocidad? Cada una ha dejado su huella de forma particular.

June McCarroll pintó las primeras líneas divisorias de la carretera

June McCarroll fue una doctora que poco tenía que ver con la industria automotriz. Hasta que un día un camión la echó de la carretera. Corría el año 1917 y, desde aquel instante, se dio cuenta de que, si la carretera hubiese tenido una línea divisoria, aquel accidente no hubiera tenido lugar.

Solicitó a las autoridades que la pintasen, pero no le hicieron caso hasta años después, así que, la pintó ella misma. Hoy nos cuesta concebir una calzada sin líneas divisorias, pero ¡antes era lo que había! Gracias a ella gozamos de mayor seguridad en las carreteras.

Margaret A. Wilcox nos dejó en herencia la calefacción del automóvil

¡Cómo se agradece la calefacción en el coche en un día frío! Pues este invento se debe a una ingeniera nacida en Chicago en el año 1838. A los 34 años ideó un sistema para calentar los vehículos con aire caliente utilizando el calor del propio motor.

1893 es la fecha en la que patentó su invento, que fue el origen de la calefacción de nuestros actuales vehículos. Si bien el sistema de calentamiento ha cambiado, la idea primigenia es de su autoría. Y con ella nos ahorramos sentir frío mientras disfrutamos de la conducción.

Mary Anderson ideó el limpiaparabrisas

Como prácticamente les ocurre a todos los inventores e inventoras, a Mary Anderson también fueron las circunstancias las que la condujeron a su invento. En este caso, una tormenta. Un buen día se fue de viaje a Nueva York pero, a causa del aguanieve, el conductor no podía ver tras el cristal.

Lo que hacía el conductor era sacar la cabeza por la ventana para poder seguir su trayecto. Fue entonces cuando esta emprendedora y promotora inmobiliaria decidió crear el limpiaparabrisas. Patentó su invento en 1903 y, 13 años después, todos los coches venían con ellos de serie.

Florence Lawrence nos regaló los intermitentes

Además de toda una estrella de cine de gran reconocimiento, Florence Lawrence también fue una ferviente apasionada de los coches; le gustaba tener diferentes modelos y arreglarlos. Llegó a crear un sistema para avisar a los demás vehículos cuando quería girar.

Este invento en forma de palo fue el origen de nuestros intermitentes. Lamentablemente, no lo patentó, con lo que nunca le pagaron por él ni obtuvo reconocimiento. Asimismo, esta mujer inventó la luz de freno, la cual se accionaba con una señal de “stop” en la parte trasera.

Margaret E. Knight contribuyó con las válvulas de camisa

Margaret ya era una inventora consumada cuando ideó las válvulas de camisa. De hecho, fabricó entre otras cosas una máquina para crear bolsas de papel en serie. Pero ¿qué aportó al mundo del motor? Sobre todo, las válvulas de camisa, fundamentales para el motor rotativo.

Además, entre sus patentes se encuentran diferentes componentes del coche, como cilindros o el diseño de pistones. También se dedicó al estudio de la reducción de la vibración. Sin duda, fue una inventora muy prolífica.