Optimismo moderado. Así se puede describir la sensación que se vive en las plantas de producción de vehículos ubicadas en España tras conocer los datos de enero de 2023, anunciadas por Anfac (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones). Optimismo porque las cifras son mejores que las del mismo periodo de 2022, pero moderado porque aún no se puede hablar de plena recuperación.
La cifra que mejor expresa la mejoría del sector es el aumento de la producción: se fabricaron 194 553 unidades, es decir, un 8,1 % más que en enero de 2022. El crecimiento ha sido mayor entre los turismos y todoterrenos (8,8 %) y ligeramente menor entre los vehículos comerciales (6,1 %).
Otro dato que invita al optimismo es el aumento de las exportaciones: 170 346 unidades se vendieron en el exterior, lo que supone un 6,2 % más que en el primer mes del año pasado y representa casi el 88 % del total de los vehículos producidos en España. Europa acapara la mayor parte de esas unidades (más del 90 %), con Francia, Alemania, Reino Unido, Italia y Turquía a la cabeza.
Cifras que consolidan las tendencias en el sector
Un análisis pormenorizado de las cifras de producción permite observar la consolidación de algunas tendencias en el sector. Por ejemplo, el aumento de producción de vehículos de cero o bajas emisiones (un 58,7 % más en términos interanuales), hasta el punto de que casi uno de cada cinco automóviles ensamblados en España tienen esta consideración.
Dentro de este grupo de vehículos, destaca el importante aumento de los híbridos (HEV), con casi un 300 % más de unidades producidas (7767). Por su parte, los electrificados (eléctricos puros e híbridos enchufables) han crecido un 41 % respecto a enero de 2022 y representan casi el 15 % de los fabricados en nuestro país (27 973 unidades).
Por fuentes de energía, solo caen los automóviles propulsados por diésel (-12,4 %, 49 813 unidades) y los de gas natural (-55,9 %, para una fabricación residual de 215 unidades). Los vehículos de gasolina siguen siendo, con gran diferencia, los más numerosos, con 106 967 unidades fabricadas en enero de 2023, lo que supone un crecimiento del 7,8 %.
Anfac pide cautela en el análisis de la situación
En su análisis de las cifras, Anfac atribuye el buen comportamiento del sector a un cierto “alivio” en las cadenas de suministro a nivel global, que tanto tensaron el sector en 2022, principalmente por la escasez de semiconductores. Y ese alivio ha permitido acelerar los ritmos de producción de automóviles.
Sin embargo, Anfac considera que aún no se puede hablar de recuperación por dos motivos. Por un lado, porque las cifras de producción siguen siendo peores que las experimentadas antes de la pandemia (en torno a un 20 % menos que en 2019). Y por otro, porque “sigue habiendo problemas intermitentes de aprovisionamiento de piezas en las fábricas“, según la patronal del sector, lo que ocasiona cuellos de botella que ralentizan la producción de vehículos.
De cara al futuro inmediato, Anfac pone el foco en varios aspectos que pueden determinar la evolución del sector: la logística por carretera, el ritmo de fabricación de microchips, la situación económica global y la aprobación de la normativa Euro 7 en la Unión Europea.