El Gobierno ya ha aprobado el PERTE de microchips para que España se convierta en un referente en el diseño y fabricación de semiconductores. Este proyecto, financiado con fondos europeos del Plan de Recuperación, es el de mayor inversión y cuenta con un presupuesto de 12 250 millones de euros hasta 2027 (1250 millones más de lo presupuestado anteriormente).

Un proyecto con altas perspectivas de futuro

El PERTE de microchips es el proyecto con mayores expectativas de los aprobados hasta la fecha. Tal y como ha señalado Nadia Calviño, la ministra de Asuntos Económicos, los semiconductores son clave para la transformación digital. Por eso este proyecto engloba su diseño y producción. El objetivo es potenciar este tipo de industria en nuestro país a través de una colaboración público-privada marcada por la estrategia europea.

De ese modo, en España se desarrollarán todas las acciones pertinentes para formar parte de la cadena de valor, desde la investigación hasta el diseño y posterior fabricación. Dada la cifra invertida y el impacto que esta supone en la industria, se trata de uno de los proyectos más ambiciosos del plan de recuperación, sino el que más.

La falta preocupante de estos componentes se debe a la combinación de múltiples factores: escasez de materiales, crisis del comercio internacional y la pandemia. El plan es involucrar a España en la cadena de suministro de microchips, elementos esenciales de los dispositivos electrónicos.

Sus cuatro ejes de inversión

El proyecto se centrará en cuatro ejes fundamentales para fortalecer las capacidades de investigación, diseño, construcción de plantas de fabricación y la dinamización de la industria electrónica y TIC en España.

I+D

El primer eje, en el que participarán hasta 10 entidades, pone especial énfasis en la investigación y desarrollo de microprocesadores, chips cuánticos, arquitecturas alternativas y fotónica integrada. Para cubrir el área, se emplearán 500 millones de los reservados para proyectos de microelectrónica por el Ministerio de Industria, aunque se espera utilizar hasta 1165 millones.

Estrategia de diseño

Contará con 1330 millones de refuerzo que servirán para crear nuevas compañías que se dediquen en exclusiva al área de diseño y comercialización. Se trata de empresas que carecen de plantas de fabricación propias, conocidas popularmente como fabless. La inversión en este eje también se empleará para implantar pruebas piloto a nivel educativo y formativo.

Construcción de plantas de fabricación

Tiene como objetivo la creación de diversas plantas para fabricar microchips de tamaño inferior y superior a cinco nanómetros. Estas fábricas, llamadas foundries, se distribuirán por todo el territorio español, para lo que hará falta invertir más dinero. Por esa razón, le han destinado 9350 millones de euros.

Dinamización de la industria (tecnologías de la información y TIC)

En este último PERTE se emplearán 400 millones de euros, que irán dirigidos a empresas de tecnología. La idea es crear un sistema de incentivos para las compañías ya creadas y un fondo de capital para fomentar la aparición de nuevas empresas emergentes.

Crean un Comisionado Especial

Con objeto de regular y garantizar la efectividad de las actuaciones, se ha creado un Comisionado Especial para el Proyecto de Microelectrónica y Semiconductores. La intención de esta unidad técnica y directiva es coordinar y fomentar todas las acciones relativas al PERTE.

Dentro de sus principales funciones destacan: la valoración de la viabilidad de proyectos y ayudar a instaurar las iniciativas empresariales dentro del marco de la Ley Europea de Chips, cuyo propósito es garantizar el suministro y minimizar su dependencia.