Los consejeros delegados de Renault y Nissan están dispuestos a negociar para equilibrar la balanza de poder a favor de Nissan, redefiniendo así su alianza. Mientras esto sucede, Nissan ha tenido que asumir la caída de sus acciones en un 15 % en el último mes, frente a la subida de las de Renault, prácticamente, un 4 %.

¿Nissan ganará peso en detrimento de Renault?

Una información que atañe a la alianza formada por Mitsubishi, Nissan y Renault, asegura que la marca francesa cederá parte de sus acciones y de su poder en beneficio de Nissan.

Tal y como señalan algunos medios, Nissan estaría presionando a Renault para que reduzca su participación en la corporación japonesa a fin de cederle acciones, pasando así de un 44 % a un escueto 15 %.

Según estas fuentes, Nissan le concedería a cambio una suculenta inyección económica a Renault para que pueda mejorar su situación actual derivada de la crisis de los microchips y su salida forzada de Rusia. ¿Cómo? La idea sería entrar a formar parte de la división eléctrica de Renault.

Ante esta información, y tras pasar unos años un tanto complicados, las compañías han querido transmitir una imagen de unidad, dejando claro a través de un breve comunicado que su intención es estudiar varias iniciativas para “reforzar su cooperación y el futuro de su alianza”.

Renault y Nissan plantean nuevas formas de cooperación para reforzar su alianza fabrica

Nissan quiere invertir en Renault

Tal y como apuntan las compañías, las conversaciones entre ambas tratan un conjunto de iniciativas asociadas a nuevas tecnologías y productos, y la posibilidad de que Nissan invierta en la división eléctrica de Renault como parte de la estrategia Nissan Ambition 2030.

Dicha estrategia también incluye la venta de una participación considerable en la división dedicada a los motores de combustión que aún seguirán fabricándose para comercializar vehículos de gasolina y diésel en aquellos mercados donde esté permitido, y en cuya actividad la compañía automovilística de origen chino Geely ejercerá un papel clave.

La inversión conjunta anunciada por las tres compañías

A principios de 2022, Nissan, Renault y Mitsubishi decidieron anunciar oficialmente una inversión trascendental respaldada por las tres compañías. El objetivo es destinar 23 000 millones de euros hasta 2030 en materia de electrificación para lanzar 35 modelos eléctricos.

Para hacerlo posible, los fabricantes disponen de varias plataformas de fabricación comunes, utilizadas actualmente para dar salida al 60 % de sus vehículos. No obstante, su intención es alcanzar el 80 % en 2026, de forma que cada empresa pueda adaptarse a las necesidades de sus clientes, al mismo tiempo que la alianza comparte sus innovaciones a un coste inferior.

Del mismo modo, los socios de la alianza se plantean reducir a la mitad el coste de las baterías en 2026 y llegar al 65 % menos en 2028. Su cometido principal es contar con capacidad suficiente en 2030 para producir baterías de estado sólido de 220 GWh para sus modelos eléctricos.

La revolución de la plataforma CMF-BEV

Una de estas plataformas, la CMF-BEV que entrará en funcionamiento en 2024, permitirá reducir costes y producir coches con una gran autonomía (hasta 400 kilómetros), lo que será fundamental para la democratización de la movilidad eléctrica.

Según las previsiones de la alianza, es posible que la plataforma genere un total de 250 000 vehículos Nissan, Renault y Alpine para 2026. Entre ellos se incluiría el Renault R5 y el modelo europeo que pretende sustituir al Nissan Micra diseñado por el fabricante japonés pero desarrollado por los ingenieros de Renault.