Para cualquier concesionario el reacondicionamiento de vehículos usados es una oportunidad de aumentar sus beneficios. Y para que las ventas sean lucrativas es necesario elegir bien los vehículos y reacondicionarlos en el menor tiempo posible.

¿Cuánto puede durar este proceso? Lo habitual es entre uno y siete días. Incluso un poco más. Por otro lado, hay distribuidores que incluso tardan menos de 24 horas en hacerlo. Lo que está claro es que cuanto antes esté a punto el coche, antes se podrá poner a la venta. Y para conseguir una venta lucrativa y maximizar su rentabilidad, los concesionarios siguen los parámetros que detallamos a continuación.

Tips qué mejorarán tu proceso de reacondicionamiento de vehículos usados

Olvidarse de los vehículos dudosos o problemáticos

Es extraño decirlo, pero así es. Algunos concesionarios optan por reacondicionar coches que no tienen valor. En la mayoría de las ocasiones, realizan esta práctica porque buscan aumentar su catálogo de vehículos usados a toda costa.

¿Merece la pena? No. Normalmente, el reacondicionamiento sale caro si no se evalúa el estado de salud real del coche. Existen vehículos que pueden aparentar estar en buenas condiciones sin estarlo. Siempre se puede optar por uno en mal estado, sí, pero cuando el reacondicionamiento merezca la pena, así como sus ganancias potenciales.

Por otro lado, aunque a veces un vehículo puede parecer una ocasión única para la venta por su categoría o buen estado visual, quizás no lo esté tanto. Se deben realizar las comprobaciones pertinentes, evaluar cuál sería el reacondicionamiento que necesita y sus gastos antes de adquirirlo.

Reducir al máximo los costes del vehículo a reacondicionar

Los concesionarios deben observar sus márgenes de pérdidas y ganancias iniciales y finales. Su finalidad es evaluar si les merece la pena hacerse con un vehículo u otro. Los repuestos que se deben cambiar han de ser de una mínima calidad para ofrecer lo mejor a los clientes. Además, es una forma de fidelizarlos.

También ayudaría disponer de un equipo de personas dedicadas exclusivamente al reacondicionamiento de vehículos para terminar lo más rápido posible. De esta forma, los vehículos estarán listos en un tiempo reducido. Igualmente, se recomienda optar por utilizar piezas de bajo coste para conseguir un mayor ahorro, pero sin bajar la calidad, como se ha comentado.

Crear un proyecto para la venta de los coches usados

Reacondicionar un coche lleva un tiempo y supone unos costes. Lo más indicado es realizar un estudio completo sobre el proceso: gastos iniciales, tiempos, consumos, etc. Esta es la única forma de comprobar si compensa reacondicionar o no un vehículo.

Los concesionarios no deberían hacerse con un catálogo extenso de vehículos usados para reacondicionar. Aun así, una excelente opción para elegir un coche es optar por las subastas online. Asimismo, son un método apropiado para entablar relaciones con los nuevos clientes.

Trabajar con distribuidores de aprobación automática

El objetivo es empezar cuanto antes con el reacondicionamiento. También se suele establecer el coste de antemano para que el proceso se haga cuando corresponda. Para gestionar todo este proceso se pueden utilizar algún software de reacondicionamiento.

De esta manera, el concesionario puede acceder a toda la información del coche fácilmente. Y al contar con todos los datos del vehículo se puede acelerar el proceso. Además, es una forma eficiente de trabajar y evitar al máximo sorpresas desagradables.

Trabajar por conseguir una buena reputación en los vehículos en venta

Los concesionarios que mayores ventas logran son aquellos con clientes satisfechos. Si están contentos con sus adquisiciones y consideran que han comprado un vehículo de calidad, incluso estarán más dispuestos a gastar más dinero. Sin contar con el boca a boca.

Estos clientes posiblemente vuelvan al mismo concesionario en el caso de una nueva compra. Por ello, es importante labrarse una buena reputación donde prime la calidad. Es difícil que a un concesionario con buenas referencias se le acumulen los vehículos en el inventario.