Toyota llevaba cinco años sin liderar las ventas del mercado mundial hasta 2021, año en el que ha conseguido vender más de 10 millones de vehículos, ganando la partida a su principal competidor, Volkswagen. Ahora bien, pese a ser el primero en la lista, es necesario aclarar que el fabricante japonés bajó un 11% con respecto a las cifras registradas de 2019.

Toyota supera a Volkswagen

Toyota se ha convertido en la empresa con mayor número de vehículos entregados el año pasado, superando a Volkswagen, su principal rival de origen alemán. La compañía aseguró que las ventas de 2021 superaron a las de 2020 en un 10%, convirtiéndose así en líder indiscutible.

Como hemos mencionado, Toyota vendió un total de 10,5 millones de unidades, incluyendo los modelos que vienen de sus dos filiales: Hino Motors y Daihatsu Motors.

Ocupando el segundo puesto se encuentra Volkswagen, con la nada despreciable cifra de 8,9 millones de unidades vendidas en 2021. Ahora bien, a pesar de lo que pueda parecer, la marca alemana ha obtenido los volúmenes más bajos de los últimos 10 años. De hecho, sus ventas han caído un 5% atendiendo a 2020.

Descenso general en el mercado mundial

El mercado mundial se ha visto afectado por varias razones: la crisis sanitaria y la escasez de microchips. En el caso de los fabricantes japoneses, sus volúmenes de ventas se vieron reducidos un 10% en 2020. Concretamente, Mitsubishi fue el fabricante que más descenso experimentó con un 37%, seguido de Nissan con un 27% menos. Sin embargo, también es cierto que han presentado mejores cifras en 2021 con subidas nada despreciables.

Pese a que Volkswagen ha ocupado el segundo lugar tras presentar sus cifras en ventas, los fabricantes alemanes también han dado un paso atrás. Así, tanto Audi como Seat, Skoda, Scania o incluso Porsche han seguido afectados en parte por la situación.

En cuanto a los fabricantes franceses, Renault cerró 2021 con una bajada en sus ventas del 4,5% con respecto a 2020, año en el que ya sufrió un duro revés. En el caso de Dacia, experimentó un crecimiento del 3%, un porcentaje escaso si tenemos en cuenta que fue gracias a sus nuevas generaciones Sandero y Duster.

¿Por qué Toyota no se ha visto tan afectado como otros fabricantes?

En general, 2021 no ha sido un año sencillo para los fabricantes de coches. La pandemia irrumpió en nuestras vidas en 2020, aunque a esa dificultad hubo que añadir la falta de semiconductores tras la paralización de las cadenas de suministro.

En esta situación, algunas marcas pudieron sortear mejor que otras los problemas logísticos. En el caso de Toyota, el impacto por el escenario imprevisto fue menor que en el caso de otras marcas. Y es que tras el terremoto de Japón de 2011 en el que varias fábricas de producción quedaron destruidas, llevó a cabo una estrategia para acumular piezas clave con objeto de satisfacer su demanda en casos de emergencia.

Una situación totalmente distinta a lo sucedido en Europa, el mercado principal donde trabaja Volkswagen.

Volkswagen podría volver a liderar el pódium en 2022

La crisis de los contenedores está afectando al comercio internacional. De hecho, Toyota cree que no va a poder alcanzar su objetivo de producción el próximo 31 de marzo por este impacto mundial en forma de saturación y cierres de puertos, y la reducida circulación de barcos de carga y contenedores.

Dado que el problema seguirá persistiendo en 2022 y que omicron, tras golpear América y Europa, se acerca peligrosamente a Asia, Toyota se enfrenta a un serio problema. De hecho, recientemente el fabricante no tuvo más remedio que parar parte de su producción en el país nipón después de que algunos trabajadores y proveedores se vieran afectados por la enfermedad. Incluso por la misma razón, Toyota tuvo que cerrar en enero varias plantas situadas en Tianjin, China.

Su objetivo en 2022 es alcanzar 11 millones de unidades vendidas, todo un reto que no sabemos si será posible tras el azote de omicron y las rigurosas políticas “cero Covid” que le siguen.