No os escondais: o sois los que tienen un amigo con una camper o sois los de la camper. Sea como fuere vuestra historia de amor con estos vehículos en este artículo vamos a ver los requisitos especiales que tenemos que tener en cuenta a la hora de pasar la ITV.
No olvidemos que con la popularidad creciente de estas furgonetas camperizadas como alternativa de transporte y alojamiento, es crucial conocer los pasos necesarios para regularizar su estado para cumplir con la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Este nuevo artículo, como decimos,os queremos ofrecer una pequeña guía sobre qué es una camper, cómo regularizarla y qué aspectos específicos tenemos que considerar para pasar la ITV.
Un básico: ¿qué es técnicamente una camper?
Una camper es un vehículo modificado para convertirse en un espacio habitable, capaz de cumplir tanto funciones de transporte como de alojamiento. Este tipo de vehículo, también conocido como furgoneta camperizada, ha sido adaptado para incluir elementos como camas, cocina, y otras comodidades que lo convierten en un hogar móvil. Estos vehículos son populares entre viajeros que buscan flexibilidad y la libertad de moverse sin las limitaciones de un alojamiento fijo.
Es el concepto de autocaravana que conocemos desde tiempos inmemorables pero más recogido, personalizable y en cierto modo, según como te lo montes, más barato de primeras si eres un manitas o el conocido YouTuber Vicesat. Pero en esencia es un concepto similar al de autocaravana o al de caravana a secas (que necesita un coche para ser remolcada.
¿Cómo regularizar una camper?
Ahora bien, entrando en materia, vamos a profundizar en cuáles son los pasos para regularizar nuestra camper. Este es el paso previo a ir a la ITV y tenemos que tener en cuenta los siguientes detalles:
Identificación
El primer paso para regularizar una camper es asegurarse de que toda la documentación esté en regla. Esto incluye el informe de conformidad, proyecto técnico, certificado final de obra y, si corresponde, el certificado de instalación de gas. Todos los cambios realizados durante la camperización deben estar reflejados en esta documentación, ya que cualquier omisión puede resultar en la imposibilidad de pasar la ITV. Igual que cuando modificamos y homologamos en nuestros coches, pero con muebles y fuegos de cocina.
Acondicionamiento exterior
El acondicionamiento exterior es un aspecto crucial durante la ITV. Elementos como toldos, placas solares, o unidades de aire acondicionado instaladas en el exterior deben ser revisados para asegurar que están correctamente montados y cumplen con la normativa vigente. Cualquier modificación externa debe estar documentada y ser segura.
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Acondicionamiento interior
Dentro del vehículo, el anclaje de los asientos y otros elementos añadidos durante la camperización es esencial para garantizar la seguridad. El mobiliario debe estar bien asegurado para evitar movimientos durante la conducción, y todos los componentes deben cumplir con las normativas de seguridad correspondientes. Este es un punto de importancia ya que en caso de colisión todos los elementos han de quedar en su sitio.
Frenada
Dada la complejidad y el peso adicional que suelen tener las campers debido a su equipamiento, la revisión del sistema de frenado es fundamental. Los frenos deben estar en perfectas condiciones para garantizar la seguridad en carretera, especialmente en viajes largos o en terrenos exigentes. Este punto es francamente importante si optamos por comprar una Volkswagen California, por poner un ejemplo, con más años que el concepto autocaravana y sabemos de la dudosa capacidad de frenada.
¿Cada cuánto pasar la ITV a una camper?
La periodicidad con la que una camper debe pasar la ITV depende de su clasificación. Las furgonetas camperizadas que pertenecen a la categoría N deben pasar su primera ITV a los dos años de la matriculación, y posteriormente cada dos años hasta alcanzar los seis años de antigüedad. A partir de ahí, la ITV se realiza anualmente, y una vez el vehículo supera los diez años, cada seis meses.
En cambio, las furgonetas de categoría M no requieren pasar la ITV hasta los cuatro años de su matriculación. Luego, deben pasarla cada dos años hasta el décimo año, momento en que la inspección se vuelve anual.
Cumplir con estas revisiones no solo es un requisito legal, sino una práctica esencial para garantizar la seguridad vial y la protección del medio ambiente. Siguiendo estas pequeñas pautas y teniendo todo en regla no habrá escapatoria por la geografía española y europea que nuestra camper y nuestras ganas de aventura puedan superar. Feliz camper-viaje.
Además, en este vídeo te damos las claves para pasar la iTV de tu coche: