¿Cómo interpretar los datos técnicos de un coche?

Los datos técnicos de un coche nos pueden dar las claves para conocer los puntos fuertes y débiles de nuestro vehículo. Cilindrada, par motor, aceleración, tipo de transmisión… son términos cuyos datos no siempre el comprador sabe interpretar.

Algunas de las cosas que debes saber para conocer y entender cómo funciona tu vehículo las encuentras en las fichas técnicas:

Tamaño del motor: Nos lo indica el número de cilindrada (cc), pero no por tener una cilindrada baja significará siempre que sea poco potente. La electrónica y sistemas de última generación, como el turbo, están facilitando una reducción del tamaño de los motores, aumentando al mismo tiempo su potencia.

Tipo de transmisión: El modelo puede ir asociado a una caja de cambios manual o automática. Lo habitual es encontrar cambios manuales de cinco o seis velocidades, si es de cuatro ya es antigua. Las transmisiones automáticas han evolucionado mucho desde las clásicas de cuatro velocidades. Ahora lo habitual es encontrar cajas de cinco, seis o más marchas, incluso las hay más rápidas y con menos consumo que las manuales, como son, en algunos casos, las de doble embrague.

Potencia y par motor: En este apartado la clave está tanto en el valor de la potencia (CV/kW) y el par motor (Nm) como en el número revoluciones (rpm) donde los ofrece. Cuanto más caballos de potencia y mayor par motor a un menor número de revoluciones, más ágil y dinámico será el coche y mayor capacidad de recuperación tendrá.

Relación peso/potencia: Este dato también nos sirve para conocer la agilidad del vehículo. Un modelo con pocos caballos y con muchos kilos de peso ofrecerá una alta relación peso/potencia y se moverá con menos soltura. Lo ideal es que esta relación sea como máximo de 10 kilos por cada CV de potencia.

Velocidad máxima: En muchos modelos –segmentos altos y deportivos- el dato está limitado a 250 km/h. La cifra que ofrece el fabricante es la obtenida en las mejores condiciones posibles. Si no eres un conductor experto y no tienes opción de conducir en una carretera recta y sin límite de velocidad, puede que en un coche potente no consigas alcanzar esta cifra.

Aceleración: El dato más frecuente que dan los fabricantes es el tiempo (en segundos) de la aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora (km/h). Cuanto menor sea esta cifra más rápido y ágil será el coche. Ten en cuenta que los datos se obtienen tras unas pruebas de homologación con las condiciones más favorables: sin pasajeros, depósito de combustible al mínimo, carretera a nivel del mar…

Consumo: Desde el 1 de septiembre de 2019 todos los turismos en Europa se homologan según el ciclo WLTP, una prueba mucho más precisa y fiable al consumidor porque introduce condiciones de ensayo más realistas que el antiguo Ciclo de Homologación de Consumo NEDC -sin cuestas, a bajas velocidades, sin aceleraciones ni frenazos bruscos-. El dato de consumo se acerca ahora más al real, aunque sigue estando por debajo de lo que se consigue en condiciones normales de conducción. Aun así, el dato que aparece en la ficha técnica nos sirve de referencia para compararlo con otros modelos.

Volumen del maletero: El método más extendido para medir el volumen del maletero (cm3 o litros) es el de la VDA (Asociación de Fabricantes Alemanes) y lo utiliza el 95% de los fabricantes. Consiste en introducir el mayor número de paralelípedos –poliedros de seis caras- de medidas 20 x 10 x 5 cm. Cada poliedro equivale a un litro de capacidad. También se puede medir llenando el maletero de agua pero en este caso la cifra será mayor ya que el agua cabe en cualquier hueco.

En este otro artículo te contamos dónde encontrar los datos técnicos de un coche nuevo o usado.