10.000 millones en 3 años para la industria del automóvil

La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, confirmó ayer en la Mesa de la Automoción, un encuentro con representantes de las Comunidades Autónomas y del sector del automóvil celebrada en Zaragoza, que el Gobierno tiene previsto destinar al sector del automóvil unos 10.000 millones de euros en los próximos tres años procedentes de los fondos europeos de reconstrucción post-Covid “Next Generation EU”. La idea es reactivar el sector de la automoción con el 14% del total de esos fondos que se destinarán a un plan de movilidad sostenible, la activación del hidrógeno renovable y el apoyo a proyectos estratégicos.

La ministra ha destacado que “la prioridad del Gobierno es desarrollar un ecosistema de movilidad sostenible, inteligente, segura y conectada, reforzando la industria automovilística española, y apoyar su descarbonización, conectividad, 5G, infraestructura de recarga y vehículos alternativos, con el objetivo de que sea una palanca para la recuperación económica y social en los próximos años”.

La parte más importante del dinero (6.000 millones de euros) se destinará al llamado plan de choque de movilidad sostenible, segura y conectada en entornos urbanos y metropolitanos. Este plan incluye el establecimiento de zonas de bajas emisiones; el despliegue masivo de infraestructura de recarga como clave para el impulso del vehículo eléctrico, con el efecto tractor que supone sobre la industria de los bienes de equipo; el desarrollo de nuevos modelos de negocio y la modernización del parque público con vehículos limpios. Por supuesto, las fórmulas para todo ello están pendientes de concreción

Por lo que respecta a la hoja de ruta del hidrógeno renovable, se destinarán a ella 1.500 millones de euros con el objetivo de que el hidrógeno creado a partir de energías limpias se convierta en de las palancas clave de reactivación económica ligadas a la transición energética, junto a otros ámbitos como el despliegue renovable, la movilidad sostenible y conectada o la rehabilitación energética. En este vídeo os explicamos el estado actual de la industria del hidrógeno y cómo la Unión Europea lo considera clave para el desarrollo de nuevas tecnologías no necesariamente relacionadas con el automóvil.

Finalmente, se destinarán 1.200 millones de euros para apoyar proyectos estratégicos para la transición industrial. Uno de los objetivos de esta medida es impulsar la modernización del ecosistema nacional de la industria de automoción, mediante la digitalización, el impulso de la conectividad y 5G y la mejora de la eficiencia energética de la cadena de valor. Entendemos que de este dinero deben salir las ayudas gubernamentales a la reconversión de las fábricas de automóviles existentes en España para que puedan asumir la fabricación de vehículos eléctricos en el futuro.

Maroto repasó los datos europeos y nacionales de fabricación y venta de vehículos en lo que llevamos de año y explicó las diferentes ayudas del Gobierno al sector incluidas en el Plan de Impulso de la cadena de valor del sector del automóvil, como los Planes RENOVE y MOVES II, pasando por las ayudas ICO para vehículos de transporte por carretera profesional e industrial y los incentivos fiscales. En este vídeo os explicamos cómo son estos planes de ayudas a la compra y en este artículo cómo se pueden pedir las ayudas del Plan RENOVE.

Las patronales del sector automovilístico (Asociación de Fabricantes -ANFAC-, de componentes -SERNAUTO-, y de distribución y comercalización -FACONAUTO y GANVAM-) advirtieron en la misma Mesa de Automoción convocada por el Ministerio de Industria, de la necesidad de definir el modelo para la industria de la automoción que se ha de alcanzar a través de la puesta en marcha de las acciones contempladas en el citado Plan de Impulso a la Cadena de Valor del Sector de la Automoción. El sector valora positivamente que se priorice al sector a la hora de asignar y pedir los fondos europeos y ofrece su colaboración para trabajar en un modelo constructivo para la industria.

Las entidades del sector consideran que el Plan de Impulso es positivo para el sector ya que incluye medidas a corto plazo, para fomentar su recuperación, y a medio y largo plazo para progresar en la transformación del sector. No obstante, el sector aboga por definir un “modelo constructivo, proactivo y consensuado con el sector, en el que se alcanzarán los objetivos de descarbonización y digitalización del parque planteados con Europa pero manteniendo la industria, el empleo de calidad y el tamaño del mercado, con una transición inclusiva que permita la transformación del tejido actual con los menores impactos negativos posibles”.

El sector ha solicitado también que, tal como se ha hecho en otros países como Francia o Portugal no se aplique todavía la nueva normativa de medición de emisiones de CO2 (WLTP) en el cálculo del Impuesto de Matriculación ya que ello encarecerá el precio de muchos vehículos, algo negativo teniendo en cuenta las consecuencias que el Covid-19 ha tenido en la industria, con una caída del mercado en España de al menos un 35% en 2020, la tercera peor de Europa.

Al respecto, las informaciones procedentes del Ministerio es que en 2021 se aplicará la fiscalidad siguiendo el protocolo WLTP (el Gobierno ya aprobó una moratoria de un año y medio en su día) y que la decisión al respecto es firme. Ayer mismo, algunos dirigentes, como el Director General de Seat España, Mikel Palomera, declararon que "no es el momento para que el Gobierno encarezca el precio de los coches con la actualización de este impuesto. Esta subida no va a ayudar en absoluto al sector".

El sector sugiere la posibilidad de una reforma integral de su fiscalidad, que incluya criterios medioambientales, privilegie los vehículos electrificados, penalice el uso de vehículos más viejos respecto de la compra de vehículos más eficientes y que no dificulte la renovación del parque. En este sentido, pide que el impacto se neutralice ajustando la tarifa del impuesto mientras el sector se recupera de la crisis y se consensúa el nuevo paquete fiscal anunciado por el Gobierno en el Plan de Impulso.

Las asociaciones han indicado finalmente en un comunicado conjunto que la necesaria transición a la movilidad del futuro se tiene que hacer sin poner en riesgo la industria y los empleos, estimulando fuertemente la demanda de vehículos sin emisiones para que la oferta y la producción se adecúen a ella pero acompañando el modelo y medidas sectoriales a la realidad del mercado y de la producción en nuestro país en cada momento, donde todas las tecnologías juegan un papel esencial.