En España hay un problema con el consumo de alcohol que se está trasladando a las carreteras. Tal es la gravedad que desde la Dirección General de Tráfico (DGT) están trabajando en varias propuestas como son bajar la tasa de alcohol en sangre de 0,5 a 0,2 gr/km, retirar el carnet a conductores adictos al alcohol a propuesta del médico o promover el uso del alcoholímetro antiarranque como alternativa a las retiradas del carnet, o incluso a las suspensiones del permiso de conducir. Sobre esta última iniciativa te quiero hablar hoy.
El consumo de alcohol al volante es la segunda causa de siniestralidad en España después de las distracciones.
Alcoholímetro antiarranque para seguir conduciendo
Hace unos días participé en el encuentro Safe&SoberTalk’, dirigido a analizar la lucha contra la conducción bajo los efectos del alcohol, dar a conocer las medidas dirigidas a reducir este tipo de siniestros y explicar los retos que tiene Europa para frenar la siniestralidad mortal en carretera relacionada con este factor de riesgo. Un acto organizado por la Fundación Mapfre en colaboración con el Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte (ETSC, por sus siglas en inglés).
Se dieron muchos datos sobre cómo afecta el alcohol al volante y cómo aumenta el riesgo de fallecidos y heridos graves pero también se habló sobre el alcoholímetro antiarranque, también conocido por sus nombres comerciales interlock o alcolock. Todos los expertos participantes coinciden en la importancia de promover su uso para los conductores reincidentes o a los que se haya detectado con tasas muy elevadas de alcoholemia. La idea es promover su uso como alternativa a la retirada del carnet, así como en caso de que sea necesario para trabajar, como medida reeducadora o en apoyo a programas integrales de rehabilitación de algunas personas.
"De un total de 93.000 condenas, el 53%, unas 52.000, son por conducir con altas tasas de alcohol", explicaba el fiscal de la Sala Coordinador de Seguridad Vial, Luis del Río, durante la celebración de la jornada sobre alcohol al volante organizada por la Fundación Mapfre. Actualmente la normativa sí permitiría que el juez proponga el uso de alcoholímetro a un condenado en lugar de la retirada del carnet aunque, según el fiscal, no se está promoviendo.
También sería una buena alternativa para la suspensión temporal del permiso pero en este caso sí sería necesaria alguna reforma legislativa del código penal para su aplicación. Igualmente se necesitaría reformar la normativa por vía administrativa para aplicar el uso del dispositivo en lugar de una suspensión. "La caja negra también puede ser más efectiva porque recoge otros datos que facilitan la investigación para determinar la causa o causas del accidente", explica el fiscal.
La idea que promueven los expertos es que el alcoholímetro se ofrezca como alternativa a un condenado a suspensión o retirada del carnet. Podría seguir conduciendo, socializando o trabajando (según necesidades) gracias al uso de este dispositivo, algo que puede compensar y mucho el pago que le supondrá el alcolock, unos 1.200-1500 euros (que podría revender una vez cumplida la condena).
¿Qué es un alcoholímetro antiarranque y cómo funciona?
Se trata de un dispositivo antiarranque que se conecta al encendido del motor gracias a una preinstalación. Los conductores tienen que soplar en un etilómetro y dar negativo en alcohol para que el vehículo pueda arrancar.
El etilómetro medirá la concentración de alcohol en el aliento y solo si el grado de impregnación alcohólica está dentro de los márgenes programados el sistema permitirá el arranque. De lo contrario, no se podrá poner en marcha el motor. ¿Cómo se evita? Gracias a un inmovilizador electrónico del vehículo, uno de los componentes del alcoholímetro antiarranque junto al sistema de detección de concentración de alcohol en aire expirado.
La preinstalación obligatoria en nuevos vehículos matriculados desde julio de 2024 consiste en un 'interface' estandarizado para todas las marcas y modelos con primera matriculación desde el 6 de julio de 2024 para que se pueda instalar de forma sencilla el propio dispositivo alcolock.
Su función es evitar el arranque del coche cuando detecta que el conductor ha consumido alcohol o lo haya hecho por encima de los límites permitidos. En España los límites de presencia de alcohol en aire espirado están entre 0,25 mg/l y en sangre hasta 0,5 g/l (entre 0,15 mg/l y 0,3 g/l para noveles y profesionales). Aprovechamos a recordar que se acaba de aprobar en el Congreso esta iniciativa para reducir la tasa de alcohol al volante, por lo que su aprobación definitiva cada vez está más cerca.
Un dispositivo preparado para la picaresca
Como bien he explicado, hay que soplar en el dispositivo y seguro que estás pensando que puede soplar otra persona en tu lugar. El programa con el que se ha desarrollado está pensado para evitar todo tipo de fraudes ya que obliga a repetir la prueba a los 15 minutos. Y si das positivo y a los 15 minutos alguien sopla por ti y da negativo, te hará una serie de preguntas que tienes que explicar.
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También puede saber si quien sopla es una persona adulta o es un niño, si es otra persona diferente al conductor o es aire procedente de un globo o de una máquina. Incluso si la instalación es obligatoria por normativa también se exige tener una cámara. Además, hay que tener en cuenta que el 80% de los conductores van solos en el coche, por lo que tendrías problemas cuando te pida repetir la prueba a los 15 minutos o de forma periódica.
En Suecia los jueves aplican sanción con el uso de un alcoholímetro antiarranque por normativa desde el año 2018 y lleva aparejado un programa de rehabilitación con clases de formación, obligación de acudir a un centro a descargar los datos cada dos meses o visita al psicológico cada año. Otro ejemplo donde también se usa el alcolock es en Noruega. Allí no hay ninguna normativa que lo obligue. Aunque su uso es voluntario, la realidad es que todos los autobuses o autocares lo utilizan por su estrategia de conseguir cero siniestros de tráfico y porque desde la administración lo piden como requisito imprescindible para ganar concursos públicos.
En Finlandia el uso de alcolock está regulado para los autobuses escolares desde 2012 e igualmente en Francia desde finales de 2015. En España se obliga a su uso en la Ley de Tráfico (en vigor desde marzo 2022) para vehículos de pasajeros con más de 9 asientos y camiones pero todavía no se ha desarrollado la normativa que lo regule.
¿Qué dice la ley sobre el alcoholímetro?
La ley europea indica que todos los vehículos de nueva matriculación desde julio de 2024 deben llevar una preinstalación o conexión para poder instalar dispositivos antiarranque. La reglamentación europea deja libertad a cada estado miembro para que decidan cuándo se obligará a utilizar el propio alcoholímetro antiarranque.
En el caso de España su uso se ha regulado en la Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, en vigor desde marzo de 2022: los vehículos destinados al transporte de personas con más de nueve plazas (categorías M2 y M3 o autobuses y autocares) con la preinstalación hecha, tendrán que instalar y utilizar el alcoholímetro antiarranque.
La realidad es que de momento no tenemos una normativa que regule esa obligación de la Ley de Tráfico. Según fuentes de la DGT: "Se está analizando con otros organismos implicados para ver cómo se desarrolla". Por lo tanto, hoy por hoy, el uso del alcoholímetro es totalmente voluntario. Algunas empresas de transporte, como Alsa, ha sido pionera instalando el Alcolock en el 10% de su flota, de momento en 500 vehículos desde el pasado mes de julio.
Los graves datos sobre el alcohol al volante
Los riesgos del consumo de alcohol al volante se reflejan en las cifras de siniestralidad. De los 863 conductores fallecidos en 2023, el 53,6% (462 conductores) dieron positivo en alcohol, drogas o psicofármacos. Y de esos 462 conductores, el 32,7% solo presentaba alcohol en sangre. Son datos del Instituto de Toxicología y Ciencias Forenses.
En 2023 realizaron 6,6 millones de pruebas de alcohol con 79.000 positivos. Al día son 18.000 pruebas y 200 positivos, según nos cuenta el teniente coronel Ignacio Varela, de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Es un porcentaje pequeño pero representa cerca de la mitad de mitad de los conductores fallecidos bajo los efectos del alcohol.
¿Qué opinas sobre la posibilidad de usar un alcoholímetro antiarranque en lugar de verte perjudicado por una retirada o suspensión del carnet?