ADN Alfa

Alfa Romeo es una marca que tiene una larga y reputada tradición como fabricante de automóviles. Sus más de 100 años de historia, sus éxitos en competición y la creación de bellos y prestacionales modelos son un buen bagaje sobre el que la marca italiana ha estado viviendo durante años. Pero también es cierto que en las últimas décadas Alfa Romeo parecía estar viviendo en los laureles, confiada en una gama de producto muy limitada y con pocas novedades.
Esto va a cambiar, según parece, y la marca va a relanzarse en los próximos años con una nueva gama de automóviles, diseñados desde cero y con la misma pasión que siempre ha identificado a los productos de esta firma italiana.
El Alfa Romeo Giulia es un claro ejemplo de estos nuevos aires que corren en la firma milanesa, y a pesar de que se ha hecho esperar, ya es una realidad.
Antes de ello, Alfa Romeo convocó a la prensa internacional a probar la gama Giulia en su circuito de pruebas privado, situado en Balocco, en el norte de Italia. Allí nos esperaban unidades diésel y Quadrifoglio Verde, que van a ser las primeras en comercializarse.
Este es un detalle importante: Alfa Romeo ha optado por construir y lanzar primero la versión más deportiva y extrema, para a continuación derivar el resto de la gama. Es posiblemente una cuestión de imagen, de querer impactar primero con una berlina superdeportiva, con motor V6 de 510 CV, que da mucho que hablar. Pero a mi entender, esto también demuestra que Alfa Romeo se ha planteado como primer objetivo crear una plataforma que garantice altas prestaciones y fuertes sensaciones al volante, y después todo lo demás. Y así, sobre la base del QV, se beneficia el comportamiento dinámico del resto de la gama.
Motor delante, tracción atrás
El Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio Verde es un coche con una carrocería muy ligera pero a la vez con una elevada rigidez torsional. Monta un motor en posición longitudinal y un sistema de tracción a las ruedas posteriores, algo cada día más inusual y que permite un perfecto reparto de pesos al 50% entre los dos ejes.
Además, cuenta con una relación peso/potencia excelente, como suele ser norma en los productos de esta marca. Es un serio competidor para coches tan consolidados como el BMW M3 o el Mercedes-AMG C63 Coupé , entre otros. Alfa Romeo quiere volver a entrar en competencia dentro del segmento de las berlinas medias, básicamente dominada por productos alemanes. Y en este sentido, valor y descaro no le falta. El Giulia, en cualquiera de sus versiones, debuta en el mercado sin compromisos, con el objetivo de reforzar la imagen de la marca y atraer a nuevos clientes que busquen un producto nuevo y diferente.
Y aunque el Giulia tiene en la versión Quadrifoglio Verde su máxima expresión, Alfa Romeo ofrece una gama mucho más amplia, formada por versiones que pueden montar un motor diésel 2.2 con diferentes niveles de potencia (136, 150 y 180 CV), o bien cualquera de los dos motores de gasolina disponibles: un 2 litros con 200 CV y el 2.9 V6 con 551 CV de la versión QV.
Dependiendo de la potencia y el nivel de acabado, pueden ir unidos a un cambio manual de 6 velocidades o uno automático de 8.
La versión QV será la primera en llegar a los concesionarios, junto con la diésel de 180 CV. Posteriormente vendrán los diésel de menor potencia y la versión de gasolina, sobre la cual se esperan ventas bastante limitadas, al menos en España. Los responsables de Alfa Romeo también afirmaron que más adelante se presentará un Giulia Quadrifoglio Verde con tracción integral.
Mezcla de estilos
Alfa Romeo es una marca reconocida por cuidar el diseño de sus vehículos, y el Giulia no es una excepción. El coche entra por los ojos, seduce por las formas deportivas de su carrocería y una imagen que, en mi opinión, mezcla la frescura y originalidad propias del diseño italiano con la sobriedad característica de las berlinas alemanas.
Los más incondicionales de la marca dirán que Alfa Romeo no ha sido demasiado atrevida a la hora de diseñar el Giulia, ya que recuerda en algunos aspectos al BMW M3, o a un Maserati Gran Turismo si lo miras por detrás. Pero creo que el resultado es notable, y el coche resulta muy atractivo en cualquiera de sus versiones.
La Quadrifoglio Verde destaca por sus paragolpes más deportivos, la presencia de un splitter delantero que se despliega a alta velocidad para dar más estabilidad al morro, el pequeño alerón de carbono, el difusor trasero o las llantas de aleación de 19 pulgadas, entre otros detalles exteriores.
El resto de la gama no pierde atractivo a pesar de no montar estos extras aerodinámicos. Es una berlina bella, con formas muy proporcionadas, con un aire cupé, marcado por el largo capó, la línea de techo en ligera caída hacia atrás, un longitud entre ejes de las mejores del segmento y unos cortos voladizos. Tiene el estilo deportivo que esperas en una berlina de Alfa Romeo y además, se percibe muy elegante.
Acabados “Premium”
La primera sensación al subirte al interior es positiva, se percibe un buen nivel de calidad en los acabados y los materiales utilizados, al menos en las versiones tope de gama que se mostraron a la prensa en Balocco. El salpicadero tiene formas suaves y está orientado al conductor. El cuero puede estar presente en la parte superior del salpicadero, además del volante o la tapicería de los asientos. La madera remata algunos aspectos de la consola, el aluminio está presente en algunos apliques y los plásticos utilizados tienen un buen aspecto y tacto. El volante de tres radios tiene un diseño muy deportivo, está ligeramente achatado en su parte inferior y ofrece un excelente agarre. Como curiosidad, integra el botón de arranque en su parte inferior izquierda.
El Giulia equipa una pantalla digital que puede ser de 6,5 pulgadas en las versiones inferiores de la gama o bien de 8,8 pulgadas si se monta el sistema Connect 3D, que se sirve de diales para manejar los diferentes menús. La consola central adopta una posición elevada, y encaja al conductor en un cockpit que de entrada invita a conducir. Hay todo tipo de regulaciones para adoptar la mejor posición de conducción, y la visibilidad es buena, excepto hacia atrás. Para mejorarla, se monta de serie una cámara de visión trasera que, lamentablemente, proyecta una imagen demasiado pequeña en la pantalla.
En las filas traseras viajan mejor dos adultos que tres, debido al intrusismo del túnel de transmisión, obligado en un coche con tracción trasera. Hay un buen espacio en todos los sentidos, y se percibe un buen nivel de confort. Por lo que respecta al maletero, Alfa Romeo todavía no ha facilitado datos de capacidad, pero en este primer contacto la sensación que me dio es que pecaba de poca altura. Si buscáis un Giulia más familiar, debéis saber que, de momento, está descartada una versión Station Wagon, según se comentó en rueda de prensa. El Giulia es un coche con un espíritu global, y las versiones familiares sólo se demandan en determinados países europeos, por lo que no urge una derivación de carrocería de este tipo.
El nuevo Guilia se ofrece con tres niveles de acabado (Giulia, Super y Quadrifoglio), que están pensados para satisfacer todas las necesidades y ofrecen amplias posibilidades de enriquecer y personalizar cada automóvil.
El equipamiento de serie más destacado de la versión “Giulia” incluye eficientes sistemas de seguridad activa, como aviso de colisión frontal (FCW) con freno autónomo de emergencia (AEB) y reconocimiento de peatones, sistema de frenos integrado (IBS), aviso de abandono del carril (LDW) y control de velocidad de crucero. A todo esto se añaden las características estéticas y funcionales, como las llantas de aleación de 16 pulgadas, climatización automática bi-zona, Alfa DNA con selección de modos de conducción y el sistema de infoentretenimiento Alfa Connect con pantalla de 6,5 pulgadas.
La versión “Super” añade características interiores y exteriores exclusivas, como la doble salida de escape, asientos tapizados en piel y tela, sensores de parking traseros, llantas de aleación de 17 pulgadas y las levas en el volante para las versiones con cambio automático.
La versión de gama alta, el Quadrifoglio, es todavía más deportivo y prestacional: con asientos deportivos en piel y alcántara de serie, volante deportivo con botón de encendido rojo, molduras interiores de fibra de carbono y aerodinámica activa exterior. El equipamiento para confort y seguridad incluye la tecnología de control de ángulo muerto (BSM) y cámara de visión trasera, además de faros bi- xenón con tecnología AFS adaptativa.
También llaman la atención los aspectos técnicos diseñados específicamente para maximizar el rendimiento dinámico: el sistema Active Aero Splitter, el sistema Torque Vectoring que funciona como diferencial trasero para controlar electrónicamente la entrega de par a cada una de las ruedas, o el selector DNA Pro con 4 posiciones y modo Race que se comunica con el sistema CDC (Chassis Domain Control), que actúa de cerebro para coordinar toda la electrónica y la dinámica del vehículo.
Suscríbete a la newsletter
Si quieres estar al día de nuestras noticias, tienes que tener una cuenta en coches.net.
A estos acabados podemos incorporar packs que otorgan al vehículo equipamiento adicional a un coste menor para el cliente. Destacan, por ejemplo, el Pack Sport, el Pack Driver Assistance, el Pack Sound Theatre o el Pack Business Plus. El Pack Sport completa la versión Super con la adición de volante deportivo con mejor agarre, apliques de aluminio en el salpicadero, túnel central y paneles de puerta, así como faros bi-xenón.
El Pack Driver Assistance, disponible para las versiones Giulia y Super, complementa el pack estándar de asistencia al conductor con cámara de visión trasera con líneas de estacionamiento dinámicas y sensores de parking delanteros y traseros.
El Pack Sound Theatre complementa el equipamiento de serie suministrado con las versiones Super o Quadrifoglio al añadir un sistema de sonido de alto rendimiento firmado por Harman/Kardon® y luces de ambiente en el interior del vehículo.
El Pack Business Plus, que añade a la versión Giulia opciones tales como el sistema de navegación con pantalla de 6,5 pulgadas, sensores delanteros y traseros para estacionamiento, retrovisores exteriores e interior electrocrómicos, cámara de visión trasera con líneas guía, avisador de ángulo muerto y asistente automático de cambio de luces
Diésel convincente
Pude conducir una de las versiones más interesantes de la gama: la diésel de 180 CV con cambio automático. Es el tope de gama en diésel, y se vende sólo con el acabado Super, por 40.350 €. Si la quieres con cambio manual, son 37.850 €.
Es la versión con más prestaciones, exceptuando la brutal QV, y la que tiene un mejor acabado y equipamiento. Si quieres disfrutar del excelente chasis del Giulia pero tu presupuesto no alcanza los 86.600 € que cuesta la Quadrifoglio Verde, ésta debe ser tu elección. Monta de serie el Alfa DNA o sistema de selección de modos de conducción (Efficiency, Natural y Dynamic), levas de cambio, doble salida de escape, asientos tapizados en piel y llantas de aleación de 17 pulgadas, entre otros.
Tiene un motor que funciona muy suave, es elástico en su entrega de par y potencia y empuja muy bien la liviana carrocería del Giulia. En esta primera toma de contacto encontré excesivamente suave el tarado de suspensión en modo Natural, y noté un poco de balanceo de la carrocería al apoyar en la curva. Pero entiendo que se busca también un buen nivel de confort, además de que siempre puedes optar por activar el modo Dynamic, que endurece la suspensión.
La segunda versión que tuve ocasión de conducir fue la Quadrifoglio Verde, y precisamente en el trazado del circuito grande de Balocco. Su especial cadena cinematica la hace totalmente diferente al resto, juega en otra liga. Su motor V6 es una referencia en prestaciones, y sus 510 CV empujan con mucha rabia el coche en cualquier régimen.
Probé una unidad con cambio manual, que me pareció ideal para testear la pureza de sensaciones que puedes tener al volante de una berlina con semejante caballería y con tracción trasera. Con el modo Race insertado (exclusivo de esta versión), el eje trasero queda desligado de la acción del ESP, y podemos hacerlo deslizar fácilmente en cuanto aceleramos con decisión a la salida de las curvas.
Controlar ese sobreviraje es uno de los aspectos más divertidos de la conducción del Giulia QV. Es un coche que te lo pone relativamente fácil gracias al excelente reparto de pesos, al 50% entre ambos ejes según la marca, y a una dirección muy directa, que reacciona de inmediato a nuestras órdenes, y además, lo hace de forma precisa.
Sólo pude dar cinco vueltas al trazado de Balocco, pero fueron suficientes para confirmar el enorme espíritu deportivo de esta versión QV. Sus escapes emiten un sonido adictivo, en circuito frena de forma contundente (siempre que montes el equipo de freno carbocerámicos, opcional). Esta versión más rácing cuenta además con un diferencial trasero con tecnología Torque Vectoring, que distribuye el par entre las dos ruedas de forma automática para asegurar la mejor tracción y ayudar, en determinados casos, a meter con rapidez el coche en la curva.
Todos los sistemas del Giulia QV, desde el selector de modo de conducción (Alfa DNA Pro), el diferencial trasero activo (Alfa Active Torque Vectoring), la suspensión activa (Alfa Active Suspension), el splitter delantero (Alfa Active Aero Splitter) y el IBS (sistema que combina el ESP y el ABS para reducir la distancia de frenado) están supervisados por una centralita electrónica que los coordina a la hora de actuar. Es lo que Alfa Romeo denomina Chassis Domain Control, y uno de los secretos de la efectividad de este chasis en conducción deportiva.
Financiación
Alfa Romeo Financiación, apoya el lanzamiento del nuevo Giulia ofreciendo soluciones financieras para los diferentes clientes, desde privados hasta profesionales, autónomos y empresarios.
Plan Classic: el plan de financiación más tradicional, donde el cliente paga lo mismo desde el principio hasta el final del contrato.
Easy Plan: la solución que permite disponer de un coche siempre nuevo y pagar una cuota más reducida. Entrada personalizable, cuotas fijas y flexibilidad para elegir la duración que más convenga al cliente. Y al finalizar el contrato, la posibilidad de elegir entre las siguientes opciones: sustituir el vehículo comprando otro nuevo, quedarse con el coche pagando la última cuota al contado o refinanciándola, o devolverlo.
Alfa Free: Con esta opción, el cliente paga una entrada inicial aproximada del 50% del valor del vehículo y tras 24 meses tiene la libertad de elegir la opción que más le convenga: cambiar su coche por uno nuevo, quedárselo pagando la última cuota, solicitar la financiación de la misma, o devolverlo. Este producto de financiación sin cuotas durante 24 meses tiene la ventaja de que no se abonan interese.
Easy lease: producto para empresas, personas jurídicas y autónomos, que combina las ventajas del Easy Plan y del Leasing tradicional. Entrada personalizada según disponibilidades, cuotas más reducida respecto al leasing y la posibilidad de deducirlas fiscalmente. Además, ofrece la flexibilidad de poder elegir al finalizar el contrato si quedarse con el coche pagando la última cuota al contado o refinanciándola, o devolverlo.
Los precios del Giulia están a la altura de sus rivales “Premium”:
Alfa Romeo Giulia 2.2 136 CV: 33.150 € Alfa Romeo Giulia 2.2 150 CV: 34.550 € Alfa Romeo Giulia 2.2 150 CV Automático: 37.050 € Alfa Romeo Giulia 2.2 150 CV Super: 36.050 € Alfa Romeo Giulia 2.2 150 CV Automático Super: 38.550 € Alfa Romeo Giulia 2.2 180 CV Super: 37.850 € Alfa Romeo Giulia 2.2 180 CV Automático Super: 40.350 € Alfa Romeo Giulia 2.9 V6 510 CV Quadrifoglio: 86.600 €
Ya está a la venta en toda la red de concesionarios de España.
Pues ya e tenido mas de 10 alfas, el unico male era el 33. El 164 turbo,el 164 v6 turbo, el 166, el 147 1.9 16 valvulas JTD com 450 000km so sabeis de lo que hableis,porque no habeis tenido Alfas. Ya my Vw e mi BMW pasa el tiempo. en el taller e los precios...de escandalo. Sin palabras...