¿Qué es el alternador de un automóvil y qué fallos puede tener? Te lo explicamos aquí

Si alguna vez te has quedado tirado en la carretera por un coche que deja de funcionar súbitamente, podría ser culpa del alternador. Este pequeño pero poderoso dispositivo es una pieza fundamental del vehículo, aunque muchas veces pasa desapercibido hasta que termina de responder como debe. Pero, ¿qué hace concretamente el alternador y cómo puedes saber si está fallando? En este artículo tratamos de responder a estas y otras cuestiones relacionadas.

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El alternador es un componente esencial del sistema eléctrico de un coche. Su función principal es generar la energía eléctrica suficiente como para alimentar los sistemas del vehículo y recargar la batería mientras el motor está en marcha. Además, asegura una distribución estable y equilibrada de dicha energía, gestionando los picos de consumo que se producen cuando varios dispositivos operan simultáneamente (lo cual es algo habitual).

A diferencia de lo que algunos podrían pensar, la batería no es la principal fuente de energía de un automóvil durante la conducción, sino que es el mencionado alternador el componente que convierte la energía mecánica del motor en eléctrica a través de un proceso de inducción electromagnética. Esto asegura que elementos como las luces, el aire acondicionado, el sistema de sonido y otros dispositivos funcionen correctamente. Su instalación es indispensable en vehículos con propulsores térmicos.

El alternador utiliza una serie de componentes secundarios para cumplir su función. Estos trabajan simultáneamente y de forma continua mientras el motor está activo, garantizando el suministros de energía. Son, fundamentalmente, los siguientes:

• El rotor y el estator: Básicamente, el rotor gira dentro del estator, creando un campo magnético que genera corriente alterna.

• Puente rectificador: Convierte la corriente alterna en continua, que es la que utilizan los sistemas eléctricos del coche.

• Regulador de voltaje: Asegura que el voltaje generado sea constante y adecuado para los equipos (lo normal son 14 V).

Un alternador defectuoso puede generar una serie de síntomas que no deberían ser ignorados jamás por ningún conductor. A continuación, te presentamos las principales señales de advertencia:

• Iluminación tenue: Si las luces del coche pierden intensidad o parpadean, podría ser un signo indicativo de que el alternador no suministra la suficiente energía.

• Testigo de batería: Muchas veces, el primer aviso de un problema relacionado con el alternador es el encendido del indicador (testigo) de fallo la batería en el tablero.

• Ruidos extraños: Un alternador con problemas puede emitir sonidos desagradables o chirridos propios de fricción debido al desgaste de los rodamientos o de la correa.

• Arranque difícil: Si el coche tiene problemas para arrancar el motor de combustión, puede deberse a que la batería no está recibiendo suficiente carga del alternador.

• Fallos eléctricos: Sistemas como el de la climatización, el equipo multimedia o las ventanillas automáticas pueden funcionar de manera intermitente si existe avería.

• Olor a quemado: Si se percibe un evidente olor a quemado, esto podría ser debido a un sobrecalentamiento del alternador o a una correa excesivamente desgastada.

Como cualquier otro componente de un vehículo, sobre todo si está relacionado con sus sistemas eléctricos, los alternadores no están exentos de distintas averías. Estos son los fallos más comunes:

• Deterioro excesivo de la correa: La correa que conecta el alternador con el motor puede aflojarse, agrietarse o romperse, impidiendo que el alternador funcione.

• Fallo del regulador de voltaje: Si el regulador no opera correctamente, el alternador podría generar un voltaje demasiado alto o insuficiente, desequilibrado el sistema.

• Rodamientos muy desgastados: Los rodamientos permiten que el rotor gire suavemente, pero con el tiempo pueden consumirse y generar ruidos o atascos.

• Fallos en el puente rectificador: Un puente rectificador defectuoso no convertirá correctamente la corriente alterna en continua, lo que afectará al rendimiento.

Aunque el alternador tiene una vida útil considerable, generalmente más de 150.000 kilómetros, que depende del uso que se hace del vehículo y sus particularidades, un mantenimiento adecuado puede prolongar su funcionamiento. Algunos consejos son:

• Revisar la correa: Inspecciona regularmente la correa del alternador en busca de grietas, desgaste o tensión inadecuada.

• Evitar sobrecargas: No conectes demasiados dispositivos del sistema eléctrico del coche, ya que podría sobrecargarlo.

• Mantener batería: Una batería defectuosa o en mal estado obliga al alternador a trabajar más, acortando su vida útil.

• Realizar revisiones: Incluye el alternador en las inspecciones regulares y periódicas de tu vehículo para prever problemas.

Si sospechas que el alternador está averiado y fallando con base en toda la información anterior, lo mejor es llevar el coche a un taller especializado en mecánica, de manera inmediata, para una profunda revisión. Los técnicos podrán diagnosticar el problema y determinar si es necesario reparar o sustituir el componente en cuestión por uno nuevo, siendo esta segunda opción la más habitual en automóviles modernos y en la mayoría de servicios.

Remediar un alternador puede costar entre 100 y 300 euros dependiendo de la avería, pero su reemplazo vale normalmente entre 400 y 800 euros, dependiendo de la marca y modelo del vehículo, así como del tipo de alternador que emplea. No es la pieza más cara de un coche común, pero no deja de resultar dañina para el bolsillo, de modo que más vale prevenir y anticiparse a las eventuales complicaciones que pueda ocasionar, sobre todo porque es capaz acabar derivando en otras.

Un coche puede dejar de funcionar en marcha debido a un alternador roto, aunque el tiempo que esto tarde en suceder dependerá del estado de la batería y los dispositivos en uso. Cuando esta pieza deja de operar bien, la batería asume temporalmente la tarea de alimentar los sistemas eléctricos del coche, como la dirección asistida o la inyección de combustible. Con todo, la pila tiene una capacidad limitada y, al no recibir carga, se agotará rápido. Esto puede causar que el motor pierda potencia o incluso se detenga.

En situaciones críticas y excepcionales, como en una autovía, la falta de electricidad puede afectar sistemas esenciales como el ABS, aumentando el riesgo de accidente. Por esta razón, si detectas los síntomas de un alternador defectuoso, es crucial actuar rápidamente y no ignorar los avisos. Si ya estás conduciendo y sospechas de un fallo en ese componente, intenta reducir el uso de elementos eléctricos no esenciales y busca un lugar seguro para detenerte.