Las averías más habituales del aire acondicionado del coche

Llega el verano y el sol, y también las temperaturas elevadas que pueden hacer del habitáculo de nuestro vehículo un auténtico horno. Hoy en día el aire acondicionado se ha convertido en un elemento fundamental en cualquier coche, incluso en los acabados más básicos. Mantener el interior del coche a una temperatura adecuada es crucial para una conducción segura, por este motivo es de vital importancia comprobar que el aire acondicionado funciona correctamente.

Tanto si tu coche lleva un simple aire acondicionado como si está equipado con un sistema de climatización más sofisticado, es muy importante que el gas refrigerante esté en perfectas condiciones, de lo contrario el habitáculo tardará más de la cuenta en enfriarse o incluso el sistema será incapaz de mantener una temperatura aceptable.

Si te percatas de alguno de estos síntomas, lo más probable es que debas efectuar una recarga de gas para que todo vuelva a funcionar correctamente. El circuito de refrigeración del aire es estanco, pero siempre puede haber alguna impureza o un ligero mal ajuste por donde se pierde poco a poco el gas con el paso del tiempo. El precio de una recarga puede oscilar entre los 50 y los 100 euros (más o menos) dependiendo de dónde se haga. Esta acción, por lo general, debería hacerse cada 2-5 años si queréis que funcione al 100%.

Los profesionales pueden comprobar si existe alguna fuga en el sistema utilizando algunos medios, como lámparas UV, añadiendo gas Formier para comprobar que la presión se mantiene estable o mediante un sistema electrónico capaz de encontrar microfugas.

Si se ha comprobado que no existen fugas en el circuito del gas y el aire acondicionado o el climatizador sigue sin funcionar correctamente, algunas de las posibles averías las podríamos encontrar en el compresor, que se encarga de comprimir y descomprimir el gas refrigerante para que circule por todo el circuito, en el condensador o en la válvula de expansión. Cualquier avería, ya sea eléctrica o mecánica, hará que el compresor se desactive.

Otra posible causa del mal funcionamiento se puede encontrar en la caja del climatizador, que es la pieza encargada de impulsar el aire acondicionado y el aire caliente al interior. Si las trampillas que los separan no cierran herméticamente pueden mezclarse y reducir la eficacia.

Si el problema es que no sale suficiente aire por los aireadores del coche puede deberse a una falta de mantenimiento del filtro de aire. Éste podría haberse obstruido con suciedad y polen, por este motivo sería interesante incorporar un filtro antipolen si tu vehículo no lo lleva de serie.

El condensador también puede dar problemas. Este dispositivo va situado delante del radiador del coche y es el encargado de enfriar el gas refrigerante comprimido para convertirlo a estado líquido. Pequeños golpes al aparcar, un accidente frontal, o incluso los insectos o la suciedad pueden taponar el pequeño filtro de este componente.

Otro problema bastante molesto que puede provocar un mal mantenimiento del sistema de refrigeración es el mal olor. A veces, con el paso del tiempo resulta que al usar el aire acondicionado obtenemos un olor un poco desagradable. Esto podría ser debido a una obstrucción en el desagüe. Como en cualquier aire acondicionado, el del coche también expulsa agua de condensación que muchas veces podemos ver en forma de charco justo debajo del vehículo. Este proceso es totalmente normal y nuestro coche cuenta con un pequeño desagüe para expulsar ese agua que proviene de la caja de evaporador y del sistema de calefacción. Sin embargo, pueden quedar restos de humedad que, con el tiempo, pueden provocar olores un poco desagradables.

Estas son las posibles consecuencias de un mal mantenimiento del aire acondicionado o del climatizador, un sistema que en muchos casos pasamos por alto a la hora de poner a punto para las vacaciones. Como véis, es difícil que vosotros mismos podáis encontrar o reparar una avería, así que lo mejor es que llevéis el coche a un taller especializado o al de tu marca para que lo revisen. Los fabricantes recomiendan realizar el mantenimiento del sistema de climatización cada 2 o 3 años.