Entre Tres Tierras

Mapa: Mapa general del la comarca de Las Loras y el Valle de Valderradible. Características del terreno: Pistas forestales, piedra y grava. Distancia: 340 kms (aproximadamente) Recorrido: Bárcena Mayor- La Lomba. Duración: Dos días.

De la mano de Toyota, Coches.net se adentra en una de las aventuras más fascinantes que trascurre en el sector más meridional de la Cordillera Cantábrica, limítrofe con las provincias de Burgos y Palencia. Toda una oportunidad única de disfrutar de un entorno de fuerte carga medioambiental - tanto de flora, fauna, como de ecosistemas -, donde tendremos la gran oportunidad de recorrer y disfrutar de entornos tan especiales como el Parque Natural de la Saja, los altas páramos de Palencia y Burgos o el cerrado valle de Valderredible.

El medio natural entre los que nos desenvolveremos no presenta mayores dificultades orográficas para poder realizarlo con todoterrenos tales como los Toyota Hilux, Land Cruiser y RAV4, que empleamos para la ocasión.

Hayas, abedules, acebos y la presencia del impresionante sotobosque con musgo, helechos, setas... serán algunos de nuestros compañeros de viaje de este singular recorrido. Además de la naturaleza, también es protagonista el impresionante patrimonio artístico que se da cita en estas regiones, donde se encuentran la mayor colección de iglesias rupestres de toda Europa. Entre antiguos monasterios y conjuntos urbanos tradicionales de piedra tendremos la oportunidad de deleitarnos la vista, entre otros monumentos, con la colegiata de San Martín de Elines situada en el camino primitivo de la Ruta de Santiago.

Un día inolvidable

Comenzamos nuestra ruta partiendo desde Santander hasta llegar a Bárcena Mayor, donde comenzará nuestro recorrido off road, tras realizar unos 62 kilómetros por carretera. Para llegar a este núcleo enclavado en el Parque Natural de la Saja-Vesaya, tomamos la A-67 hasta llegar a Virgen de la Peña, para coger la nacional 634 que nos llevará a Cabezón de la Sal. Desde este bello municipio que nos adentra en el espectacular Valle de Cabuérniga tomamos la comarcal CA-280 hasta llegar a esta aldea perdida, considerada conjunto histórico artístico. Durante el trayecto por este valle, recorrido por el río Saja, que se abre desde el Puerto de Palombera hasta la hoz de Santa Lucía, en Cabezón de la Sal, podremos disfrutar del verdor que ostenta el paisaje cántabro combinado con bellas poblaciones de casas tradicionales y montañesas, que se asientan cerca del río y se ven acechadas por los montes, que limitan el espacio a ambos lados.

Después de comer en un pueblo tan lleno de historia como es Bárcena, plagado de casonas de piedra, casas de madera, ventanucos, zaguanes, corraladas y callejones iniciamos nuestro descenso a los montes de la Sierra de Bárcena Mayor. Para ello tomaremos la pista que asciende junto al río Argoza por el monte de las Fuentes. Dicho camino llega a una zona donde se han habilitado unas cabañas situadas en la Braña del Castillo. Subiendo la ladera de este camino que se separa progresivamente del río Argoza, podemos contemplar el bello hayedo de Culamiña. En su extenso sotobosque veremos las arandaneras, que dan el fruto que tanto gusta a los osos.

En un momento dado de nuestro ascenso se abre el paisaje y aparece frente a nosotros una hondonada, conocida como el Pozo de Arbencia. Este paraje está considerado como uno de los más bellos del parque, une el arroyo de las Fuentes y el Hormigas, volcando sus aguas sobre pozos en sendas cascadas.

A vista de pájaro

Dejando atrás este interesante paisaje nos encontramos con el hayedo del Monte de las Fuentes y más adelante con el collado de la Cruz, lugar donde podremos disfrutar de una panorámica impresionante del valle de Campoo. Una vez que lo hemos rebasado, la pista nos lleva a una breve descenso hasta alcanzar la carretera, que se encuentra situada muy cerca de la cima del puerto de Palomera (1.260 metros). En este momento tomamos la pista del puerto de Sejos, que se encuentra junto a la llamada Venta de Tajahierro, - una antigua posada rural construida con la piedra del monasterio de Ozcaba -.Dicha pista empieza en ascenso tocando un bosque de abedules por su parte superior, el del Barranco del Pozo del Agua, cuyos brotes apreciamos en el propio talud de la pista.

Subiendo por la pista alcanzamos la Braña de Reburdiajos, cuyo refugio ofrece un magnífico mirador del parque natural, ya que extiende su panorámica sobre el puerto de Palombera, la Sierra de Bárcena Mayor y el Canal del Infierno. Es precisamente en este último lugar donde la pista asciende en paralelo hasta abrirse en una amplia pradera de origen glaciar, la denominada Llano Castrillo, que forma parte del Puerto de Sejos. En este lugar la pista hace un giro y llega a un collado, desde donde se apreciar las cimas del Cordel, Iján, La Horcada, La Conicilla y Monte Redondo. Un poco más adelante nos queda el acebal del Campanario, el punto más alto del parque natural y enseguida la pista desciende por otro abedular, buscando la cabecera del río Saja. El camino elegido continúa hacia el Collado de Sejos, que da nombre a los puertos, muy cerca de cuya intersección encontramos varios menhires tumbados, que formaron en su día un cromlech.

El descenso al Valle de Polaciones nos lleva a través de varios tramos de hayedos a Uznayo, una vez que hemos cruzado los puentes levantados sobre los arroyos de Joispel y Lairragado, junto a un humilladero del S.XVIII.

Tras cruzar las bellas poblaciones de Uznayo y Puente Pumar, nuestra ruta se encamina a la divisoria de La Liébana, situada a la altura del Puerto de Piedrasluengas (1.329 metros). Desde este atractivo puerto de montaña nos encaminamos hacia Cervera de Pisuerga por la comarcal CL-627. Una vez en Cervera tomamos la P-212 hacia Aguilar de Campoo, para coger la N-611 que nos lleve hacia San Vicente y nos enganche a San María de Mave, punto y final de la primera jornada.

La quietud de un paisaje pétreo

Comenzamos el siguiente y último día entrando en campo en Olleros del Pisuerga, una pequeña población palentina, que esconde entre sus casas tradicionales las mejores ermitas rupestres de la Península; entre las que destaca la ermita que lleva el nombre de la población y que se encuentra excavada en la ladera del monte Cildá. Dicho recorrido comienza precisamente rodeando este monte, tras asomarse al cañón de la Horadada. Tras rodear el monte Cildá, la ruta continúa por Valoria de Aguilar, donde encontraremos una espléndida panorámica de la zona exterior de las Tuerces hasta coronar una meseta próxima, situada al este. Para llegar a ésta atravesaremos Villaescusa de las Torres y comenzaremos el ascenso. Nada más salir de Villaescusa el paisaje empieza a cambiar y basta hacer una pequeña subida para darse cuenta del entorno pétreo que se extiende por la zona occidental de la meseta. Nuestro recorrido continúa descendiendo el burgalés valle de Velducio por la lora de Valdivia. Tras atravesar Pomar de Valdivia, nuestra ruta rodeará la lora por la ladera septentrional, penetrando primero entre hayas, para asomarse después al espectacular y desconocido Valle de Valderredible. Por encima dejaremos las rocas calizas del páramo, así como la cueva de los Franceses y el paraje de Covalagua.

En el camino escogido decidimos realizar un pequeño bucle en el que descendemos a Valderredible para después volver a subir. Para este tramo, los vehículos utilizados eran los Hilux y Land Cruiser dada la orografía más acusada del terreno. Empezamos la subida a La Lora por la pequeña aldea de Revelillas hasta ascender al páramo en su cara meridional, tras tocar la localidad palentina de Respenda de Aguilar y atravesar las poblaciones burgalesas de Villaescobedo, Mundilla y Pedrosa hasta alcanzar Basconcillos del Tozo, donde nace y sumerge en una cueva el arroyo Hurón. La ruta continúa por el Páramo de La Lora hasta alcanzar el dolmen de la Cabaña, un conjunto megalítico funerario de más de 5.000 años situado en la localidad de Sargentes de Lora. Tras rodear esta población, una pista nos sumergirá en una inquietante llanura, a lo largo de la cual podremos apreciar las dolinas, bajo las cuales el agua filtrada ha ido erosionando la roca hasta lograr pequeños hundimientos. La fuerte erosión del paisaje de La Loras nos lleva de nuevo al Valle de Valderredible. En este preciso momento llegamos a un punto donde el páramo se corta de forma vertical hacia el valle, avisándonos que ha llegado el momento de volvernos hacia La Lora y deleitarnos la vista con los suaves montes, de extensa vegetación y las pequeñas y dispersas aldeas, que forman Valderredible.

La pista de bajada presenta una vista única por sus panorámicas y su pronunciada pendiente, que en menos de un kilómetro y medio salva más de 200 metros de desnivel. La suerte de contar con un día soleado nos permitía ver San Martín de Elines con el Ebro dividiendo en dos a esta bella población burgaleasa, plagada de bellas casas de piedra, praderas de pastos y donde tiene su enclave una encantadora colegiata románica, fiel testigo del paso primitivo del Camino de Santiago y una de las joyas más impresionantes del Valle de Valderredible. Nuestro camino atravesara esta armoniosa construcción con su esbelta torre como fiel testigo de nuestro paso.

Tras cruzar algunas poblaciones como Villota de San Martín y Arenillas de Ebro, para salvar las aguas del propio Ebro, nuestra ruta asciende a los montes que separan Valderredible del Embalse del Ebro al paso de pequeñas poblaciones como Polientes, Salcedo, Mediadoro, Malataja y Arroyo, entre otras hasta alcanzar Reinosa, punto y final de este recorrido de fuerte carga medioambiental. Para llegar a esta ciudad cántabra tomamos desde Arroyo la CA-270 hasta llegar a Bolmir, momento en el que se coge la A-67 hasta llegar a esta localidad cántabra centro neurálgico de la comarca de Campoo. Una vez llegamos a Reinosa tomaremos la CA-183, que nos guía hasta la localidad cántabra de La Lomba, donde pondremos fin a dos intensos días de recorrido. Texto: Bienvenido Alcántara

Complejo Puente Romano. Reinosa (Cantabria) Paraje de Riaño s/n - Tel. 942 77 93 12 Este complejo que dispone de un espacio de 12.000 metros cuadrados goza de un especial encanto, ya que se encuentra situado en plena naturaleza, entre la confluencia de los ríos Hijar y Guares. Sus excelentyes zonas de baño cuenta con una cascada natural y extensos arbolados. En su restaurante podemos degustar la cocina tradicional cántabra, con la incorporación de algunos platos de nueva cocina, aunque siempre con productos de la zona.

Hotel Convento de Santa María de Mave. Palencia Calle del Monasterio s/n - Tel. 979 12 36 11 Internet: www.hosteria-elconvento.com Antiguo priorato rehabilitado situado en plena montaña palentina, entre unas frescas arboledas ribereñas al Pisuerga. Este pequeño hotel situado a tan sólo dos kilómetros del pueblo de Mave mantiene la estructura del convento. Su restaurante prepara uno de los corderos al horno de leña con mejor reputación.

Restaurante El Puente-Bárcena Mayor (Cantabria) Especialidad en alubias, cocido montañés y carnes de caza. C/ Derecha nº 17- Tel. 942 74 12 00 Restaurante Río Argoza- Bárcena Mayor (Cantabria) Especialidad en carnes de caza, cocido montañés y lechazo al horno Bº El Puente, 38- Tel. 942 70 60 33