Estafas en la carretera: cuáles son las más frecuentes y cómo evitarlas

Las estafas en la carretera son un fenómeno cada vez más preocupante que afecta tanto a conductores particulares como a profesionales del transporte. Estas actividades delictivas, cada vez con técnicas más sofisticadas, ponen en riesgo la seguridad de las personas, además de generar importantes pérdidas económicas.

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Respecto a los métodos utilizados para estafar en carretera, los delincuentes han perfeccionado sus métodos, utilizando tanto tácticas tradicionales como herramientas digitales para engañar a sus víctimas. Por eso, resulta imprescindible estar bien informados y preparados para reconocer estas prácticas fraudulentas.

Además, la colaboración ciudadana y la denuncia ante las autoridades competentes son fundamentales para combatir este tipo de delitos y protegernos a todos. La Fundación PONS Seguridad Vial ha compartido su conocimiento al respecto y en este artículo analizamos cuáles son las principales estafas en las carreteras españolas y algunos consejos para evitarlas.

Los estafadores provocan una colisión leve con el vehículo de la víctima, alegando que su coche es alquilado y que tienen prisa por devolverlo. Simulan contactar a su aseguradora, pero en realidad hablan con un cómplice que recomienda pagar en efectivo la reparación del retrovisor, valorada entre 1.200 y 1.500 euros. Acompañan a la víctima al cajero, donde aprovechan para obtener su código PIN y robar la tarjeta.

En áreas de descanso, peajes o estaciones de servicio, los delincuentes pinchan una rueda del vehículo. Cuando el conductor se detiene al notar el pinchazo, ofrecen ayuda con la intención de robar pertenencias del interior del coche, dejando a la víctima sin sus objetos y con una rueda dañada.

La víctima recibe una llamada de un supuesto abogado que informa sobre la detención de un familiar por causar un accidente grave. Se le ofrece la posibilidad de pagar una fianza para evitar la cárcel, solicitando una suma de dinero que, al ser entregada, desaparece junto con el estafador.

Los estafadores se detienen al costado de la carretera, simulando haberse quedado sin gasolina. Solicitan ayuda a los conductores, ofreciendo a cambio joyas de oro que resultan ser falsas. Si la víctima no lleva efectivo, insisten en acompañarla a un cajero automático, evitando ir a una estación de servicio cercana.

En casos de avería o accidente, delincuentes se presentan con vehículos similares a los de empresas reales de asistencia en carretera. Engañan a los conductores para que paguen en efectivo por un servicio que supuestamente será reembolsado por su aseguradora, lo cual nunca sucede.

Los ciberdelincuentes envían mensajes fraudulentos, suplantando a la Dirección General de Tráfico (DGT), notificando sobre una supuesta multa pendiente. Estos mensajes incluyen enlaces que dirigen a páginas falsas donde se solicita ingresar datos personales y de tarjeta de crédito. La DGT ha alertado que no envía notificaciones de multas ni por SMS ni por correo electrónico, solo a través de correo postal o la Dirección Electrónica Vial.

La mejor manera de acabar con estas estafas en la carretera es la prevención y para ello es necesario estar bien informados. A continuación puedes ver una serie de consejos para mantenerse protegido:

• Desconfiar de situaciones inusuales: Si alguien solicita dinero en efectivo u ofrece objetos de valor a cambio de ayuda, es mejor desconfiar.

• Verificar la identidad: Antes de realizar cualquier pago o proporcionar información personal, es fundamental confirmar la identidad de la persona o entidad con la que se está tratando.

• No compartir información sensible: Evita proporcionar datos personales o financieros a desconocidos o a través de enlaces sospechosos.

• Contactar con las autoridades: Si sospechas de una estafa, comunícate con la policía o con la aseguradora para verificar la situación.