La marca coreana Hyundai puso la primera piedra de una nueva fábrica de coches eléctricos que se construirá en el complejo de Ulsan, en Corea del Sur. Esta nueva planta será adyacente a las cinco que el fabricante tiene en esa localidad coreana donde en el año 1968 construyó su primera instalación fabril. La planta de EV de Ulsan, que ocupará unos terrenos de 548.000 m² ha requerido una inversión de unos 1.500 millones de euros, estará operativa en el primer trimestre de 2026 y tendrá una capacidad para fabricar 200.000 coches eléctricos anuales.
La ceremonia de colocación de la primera piedra tuvo lugar el pasado lunes con la presencia de los principales dirigentes de la compañía, el ministro de Industria coreano y el alcalde de la localidad. Euisun Chung, vicepresidente ejecutivo de la compañía, explicó que esta nueva planta abre una nueva era tecnológica para la compañía de cara a los próximos 50 años de electrificación.
En el complejo de Ulsan, donde se producen numerosos modelos, tanto de combustión como eléctricos, y que cuenta con un puerto propio para embarcar los coches hacia los mercados internacionales, se ha eliminado la pista de pruebas, desplazada a una nueva ubicación, y en los espacios que ocupaba se construirá la nueva fábrica para modelos eléctricos. Esta planta es la primera de nueva construcción en Corea en las últimas tres décadas. Ulsan es, ahora mismo, el mayor complejo para producción de automóviles del mundo, con cinco factorías en su interior.
Una fábrica con la mejor logística automatizada
Los responsables de Hyundai han definido este nuevo emplazamiento como una fábrica centrada en las personas, que estará provista de luz natural a lo largo de toda la cadena de montaje, tendrá numerosas áreas verdes alrededor y dispondrá de una logística extremadamente evolucionada. Hyundai prevé que la calidad de los vehículos montados en esta nueva factoría sea la más alta de la historia de la compañía.
El fabricante ha anunciado que la nueva instalación estará terminada en el año 2025 y que empezará a operar en el primer trimestre de 2026 fabricando un nuevo modelo eléctrico SUV de la marca de lujo Genesis. Actualmente, en Ulsan, en otras líneas de fabricación, se producen ya los otros modelos eléctricos de la marca, el Kona, el Ioniq 5 y el Ioniq 6. La planta será desde sus inicios una planta neutra en las emisiones de carbono, tendrá toda la logística completamente automatizada, introducirá un sistema de producción flexible para diversificar los modelos producidos, responderá a los cambios globales del mercado mundial y tendrá un elevadísimo grado de automatización.
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La ceremonia de inicio de la construcción de la planta mezcló imágenes de la nueva con las del pasado de la factoría de Ulsan que, en 1968, empezó a fabricar el Ford Cortina británico bajo licencia. Hyundai produjo los modelos de Ford hasta 1975, año en que inició la producción de su primer modelo de desarrollo propio, el Pony, que sería, asimismo, el primer modelo coreano exportado a terceros mercados, entre ellos el norteamericano y el europeo (en España solo se vendió en Canarias).
Entre los asistentes a la inauguración estaba el diseñador italiano Giorgetto Giugiaro, colaborador habitual de la marca y considerado como el mejor diseñador automovilístico del Siglo XX.
En un espacio adjunto al salón donde se celebró el acto se expusieron cuatro coches importantes para la marca: el primer Ford Cortina, restaurado para la ocasión, el Pony Coupé diseñado por Giugiaro, que nunca llegó a producirse en serie, el reciente N 74 híbrido (eléctrico y de hidrógeno) inspirado en aquel y el prototipo del Hyundai Sonata de 1991 con motor eléctrico que fue el primer modelo de este tipo desarrollado en Corea, aunque nunca llegó a fabricarse en serie.