Audi A3 Sportback 1.0 TFSi 116 CV S Tronic S-line

Elegancia, espacio y comodidad son algunos de los denominadores comunes del compacto alemán en su versión de cinco puertas, factores a los que hay que añadir algunos toques deportivos incluidos en esta terminación S line edition. A ello se suma un interior que hace honor al segmento Premium al que pertenece el modelo y en el que se respira una atmósfera de calidad. Bajo el capó de la unidad probada se encuentra el motor de gasolina 1.0 TFSI de 116 CV, opción muy a tener en cuenta para los conductores que tengan el ahorro de combustible entre sus prioridades.

En esta versión, además, el confort general se ve reforzado por la caja de cambios automática S tronic de siete velocidades. El precio es uno de los pocos hándicaps del vehículo, pues esta versión cuesta de serie 32.624 euros, cantidad que además aumenta considerablemente, hasta los 40.300 euros, si se añaden los numerosos opcionales que incorpora esta unidad. Entre sus principales rivales se encuentran modelos como el Mercedes-Benz Clase A o el BMW Serie 1.

Para comenzar a analizar el A3 Sportback, la versión de cinco puertas del compacto alemán, cabe repasar sus proporciones. Se trata de un vehículo de 4,31 metros de largo, 1,79 m de ancho y 1,43 m de alto. El frontal está presidido por la característica parrilla trapezoidal Singleframe de la marca de los cuatro aros así como por las ópticas de diseño achatado, que dan lugar a una “mirada” que dota al vehículo de cierta agresividad.

Sobre estas ópticas debe tenerse en cuenta que están integradas por faros LED, de serie en esta versión, y que ofrecen una destacable visibilidad en todo tipo de circunstancias. El carácter exterior del vehículo queda reforzado por el paquete exterior S Line de serie así como por elementos como las nervaduras que recorren tanto el capó como los laterales y el portón.

A ello también hay que sumar la presencia de las vistosas llantas opcionales Dynamik de aleación ligera de 18 pulgadas y de cinco brazos (120 euros). Otros de los extras que se aprecian exteriormente en esta unidad son las barras laterales en el techo de aluminio pulido (310 euros) y el color de carrocería Plata Floret metalizado (810 euros).

Al acceder al interior del vehículo nos encontramos con un puesto de conducción muy espacioso, confortable y que brinda un alto nivel de ergonomía, con todos los mandos muy a mano. Los asientos deportivos S ofrecen una óptima sujeción del torso durante la conducción, incluso cuando explotamos su lado más dinámico. Por su parte, el volante con el inferior achatado potencia el aspecto deportivo del habitáculo pero no es todo lo práctico que resulta un volante convencional.

El ambiente deportivo se refuerza también con detalles como los pedales de aluminio, por ejemplo. La presencia del cuadro de instrumentos digital de 12,3” Audi Virtual Cockpit (350 euros) no solo acentúa la atmósfera tecnológica sino, sobre todo, facilita mucho seguir las indicaciones del navegador. Mientras tanto, la pantalla del sistema multimedia es de 7 pulgadas y se escamotea eléctricamente en el salpicadero. Su ubicación brinda una excelente visión de las diferentes informaciones, pues su elevada posición hace que apenas sea necesario desviar la mirada de la carretera.

La calidad de acabados es de alto nivel, siguiendo la línea habitual de la firma germana. La segunda fila ofrece un generoso espacio para dos adultos, que se beneficiarán de una notable amplitud para las rodillas. Por su parte, la plaza central no es tan confortable como las laterales, por lo que su uso será más adecuado para trayectos cortos. En cuanto a capacidad de maletero, los 380 litros que proporciona el A3 Sportback suponen una cifra destacable si se comparan con buena parte de sus competidores de segmento. Este volumen puede aumentarse hasta los 1.220 litros si se abaten los respaldos posteriores.

Esta unidad S line Edition integra entre su equipamiento control de velocidad de crucero, sensores de luz y lluvia, climatizador, sistema multimedia con ocho altavoces, paquete Connectivity con Bluetooth y USB, ayuda de aparcamiento y sistema Start-Stop, entre otros. Por su parte, entre los opcionales que incorpora el vehículo probado se hallan elementos como asientos delanteros calefactables (400 euros), sistema MMI Navegación Plus con MMI Touch (1.880 euros), paquete deportivo S line (1.585 euros) o techo panorámico de cristal (1.295 euros).

La mecánica escogida para esta prueba ha sido una de las últimas en incorporarse a la gama. Se trata del motor de gasolina 1.0 TFSI de 116 CV, un propulsor de tres cilindros que, pese a su bajo cubicaje, es capaz de mover el vehículo con una soltura más que satisfactoria. El motor es bastante refinado y silencioso y se distingue por una importante suavidad de funcionamiento. Registra una entrega de par máximo de 200 Nm entre 2.000 y 3.500 rpm, lo que se traduce en una buena respuesta general desde parado y una conducta notable a bajas revoluciones.

La mecánica se caracteriza por una considerable elasticidad. Si el vehículo va muy cargado puede percibirse una cierta carencia de ímpetu al afrontar repechos a velocidad constante. En lo que respecta a las prestaciones, esta versión acelera de 0 a 100 km/h en 9,9 segundos. Asociada al motor se encuentra, en esta versión, la caja de cambios automática S Tronic de 7 velocidades, cuyo precio es 2.180 euros superior a la versión manual. La rapidez de cambio es una de las grandes virtudes de esta excelente transmisión.

En cuanto a consumo de combustible, la versión probada homologa una media de 4,7 litros cada 100 km, un registro realmente bueno. Una vez finalizada la prueba, que aunó conducción por ciudad, carreteras interurbanas, autopista y carretera de montaña, el valor logrado no fue tan ambicioso pero se quedó en 5,8 l/100 km, lo que pone de manifiesto que se trata de una combinación mecánica muy ahorradora.

Desde el punto dinámico, los resultados que proporciona el A3 Spotback se encuentran a un magnífico nivel. Nada más comenzar a rodar por ciudad, el modelo demuestra una remarcable maniobrabilidad que facilita mucho la conducción por las estrechas calles de cualquier urbe. Al afrontar sucesiones de curvas en carretera de montaña, el automóvil alemán proporciona un comportamiento muy estable, con una conducta noble que permite un rápido paso por curva.

La eficacia de su chasis, unida a la precisión de su dirección, de tacto muy directo y que aporta una gran sensación de control en todo momento, benefician la vertiente más dinámica del vehículo. En este sentido, hay que tener en cuenta la agilidad que transmite. A todo ello contribuye la presencia de la suspensión deportiva, de serie en esta versión S Line Edition.

Pero el carácter deportivo no implica renunciar a la comodidad. Y es que Audi ha sabido encontrar un punto intermedio entre el dinamismo y la comodidad. Esta situación lleva, por tanto, a un apreciable compromiso entre estabilidad y confort de marcha que se agradece en gran medida cuando se opta por una conducción más tranquila. Por otra parte, al rodar por las grandes rectas de autopista es cuando más se percibe la remarcable calidad de rodadura que transmite el compacto alemán.

En definitiva, esta interesante versión del A3 Sportback ofrece un interior amplio, aprovechable y muy buen acabado. Además, ofrece una dinámica eficaz y confortable que se combina con un satisfactorio rendimiento. Es evidente que si la prioridad es restarle tiempo al crono, la gama ofrece alternativas más ambiciosas. Pero si el ahorro de combustible juega un papel primordial, esta variante 1.0 TFSI de 116 CV debe tenerse muy en cuenta.