Bentley Valencia abrió sus puertas el pasado día 10 de marzo de 2022. Aprovechando la ocasión tuvimos la oportunidad de probar varios de los modelos actuales de la gama de la firma de la “B alada”. Bentayga S, Continental GTC V8 y Continental GT Speed. Precisamente de este último contamos con una prueba en vídeo en el circuito italiano de Vallelunga.
Bentley Valencia pertenece a Quadis, el mayor grupo de concesionarios de España, y está ubicada en el número 62 de la avenida Mestre Rodrigo de Valencia. El acto de inauguración contó con la presencia de Balazs Rooz, Director Regional de Bentley Motors en Europa. Balazs Rooz es un gran apasionado del automóvil, en el pasado estuvo en Jaguar-Land Rover y en una etapa anterior en SAAB y General Motors.
Para la presentación la firma británica llevó uno de los Contiental GT más especiales que existen. Hablo de la misma unidad que en 2019 logró el récord para un coche de calle en la mítica subida en cuesta de la Pikes Peak en Estados Unidos.
Un Continental GT con motor W12 de serie, las únicas modificaciones fueron refuerzos de chasis, barras anti-vuelco y escapes Akrapovic. El piloto estadounidense Rhys Millen paró el cronómetro en tan solo 10 minutos 18 segundos y 488 milésimas tras cubrir los 19,98 kilómetros.
Bentayga S
En la primera jornada tuve la ocasión de probar el Bentayga S, una versión más deportiva del SUV de Bentley. Hace un tiempo había podido probar el nuevo Bentayga V8 y quedé gratamente sorprendido de su buen comportamiento dinámico. Esta versión “S” va todavía más allá aportando un plus de comunicación y de disfrute al volante que para nada esperas en un SUV de semejantes dimensiones.
Sobre el papel Bentley anuncia que el rendimiento del motor V8 de la versión “S” es idéntico al del Bentayga normal. No obstante, la percepción al volante es que sí que hay un salto adelante en cuanto a prestaciones.
El motor V8 del Bentayga S declara 550 CV a 6.000 rpm y 770 Nm de 1.960 a 4.500 rpm. Las prestaciones que declara no están nada mal con una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos y una velocidad punta de 290 km/h.
Bentley ha introducido un sinfín de cambios en el chasis, unas modificaciones enfocadas claramente a dar lugar a un talante mucho más deportivo. El resultado es asombroso puesto que parece otro coche por completo. Es difícil imaginar de lo que es capaz. Hasta que no lo ves no lo crees.
Con seleccionar el modo “Sport” todo cambia como de la noche al día. Todo es más directo, más comunicativo, más vivo. Las suspensiones se endurecen, pero al mismo tiempo retienen un alto nivel de filtrado lo que garantiza una enorme estabilidad, incluso sobre firmes en muy mal estado.
Pero no termina ahí. En modo Sport la respuesta del acelerador es más viva, el sonido del escape deportivo opcional alcanza un punto más gamberro que te involucra todavía más en la experiencia de conducción. Y qué decir del trabajo que hacen las barras estabilizadoras activas que se endurecen un 15% extra en el “S”. Obran magia a la hora de reducir el balanceo de la carrocería en curva.
Mención de honor para los frenos. El Bentayga S equipa en opción unos frenos carbono-cerámicos que son espectaculares. No importa el peso del conjunto, te permiten pararlo con la máxima potencia en todo momento. Cuesta entender lo bien que llegan a funcionar estos frenos compuestos.
Se trata del conjunto de frenos de mayor tamaño que está disponible en un coche de calle, con discos de 440 milímetros de diámetro y pinzas de 10 pistones. Un extra que vale todo su peso en oro, puesto que en un coche como este marca la diferencia. Los frenos de acero responden bien, pero en conducción deportiva al cabo de un tiempo terminan sufriendo, mientras que los cerámicos son inagotables.
Lo mejor de todo es que cuando quieres pasarlo bien al volante conectas el modo “Sport” y disfrutas de todo lo que te acabo de contar. Pero para el resto del día, seleccionas o bien el modo “Bentley” o “Comfort” y sigue siendo igual de cómodo que un Bentayga normal. Pocos coches consiguen esta dualidad.
Continental GTC V8
Hasta la fecha había probado el Continental GT V8, el W12 y el Speed, pero todavía no había tenido la oportunidad de echarle el guante a la declinación con capota de lona del ya mítico Gran Turismo de Bentley. Un coche que con la capota abierta ofrece una línea y una presencia que bien podrían recordar a una lancha rápida o incluso a un yate.
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Ahora bien, que las apariencias no te engañen. Pese a esta apariencia de barco de lujo, se mueve con la agilidad de un jet privado. Se nota una menor rigidez estructural con respecto a la versión de carrocería cerrada. Pese a los refuerzos implementados en el chasis flexa un poco más, algo que percibes en los cambios de apoyo fuertes circulando a un ritmo bastante “alegre”. Aún así, es sorprendente ver de lo que es capaz.
Mide 4,8 metros de largo y declara en vacío 2,3 toneladas de peso. No sería la combinación ideal para un deportivo. No obstante, termina brindando un resultado que cuesta entender. Entra muy bien en curva, se muestra bastante neutro dentro de la misma y gracias a su sistema de transmisión integral termina saliendo del viraje con una capacidad de tracción que deja sin palabras. Pocos coches de ese tamaño se comportan con semejante agilidad.
Es un Gran Turismo de verdad de la buena que encima ofrece el lujo de poderlo disfrutar con el cielo por montera. Con las ventanillas subidas, la bufanda de aire caliente integrada en el reposacabezas, la calefacción y los asientos calefactados te lo puedes pasar bien descapotado incluso en invierno.
¡Ojo que hay más! Los asientos del Continental GTC ofrecen varios programas de masaje con distintos niveles de intensidad que harán que tus viajes sean todavía más perfectos. Mira que he probado sistemas de masaje en coches de este calibre y tengo que reconocer que el de Bentley es de los mejores.
Lo que más me sorprendió aquí fue la buena sonoridad que ofrece el escape deportivo opcional. Atravesando túneles de roca, en marchas cortas el V8 de 4 litros ofrece una musicalidad que no esperas en una mecánica sobrealimentada por dos turbocompresores.
Continental GT Speed
En el trayecto de vuelta a Barcelona tuve la ocasión de conducir durante más tiempo el Continental GT Speed. Un coche que había podido probar apenas unas vueltas en el circuito de Vallelunga y que donde realmente se siente en su terreno es en autopista. Lástima que en España no tengamos Autobahn como en Alemania, porqué estoy seguro que a alta velocidad el Speed hará honor a su nombre. Es de esos coches que sientes que ofrece una estabilidad como pocos, en gran medida, gracias al considerable peso que declara en vacío.
Lo que sí pude probar extensamente, junto a los numerosos programas de masaje del asiento es su equipo de audio Naim. Bentley ofrece tres equipos de audio en el Continental GT, uno base que viene de serie con 10 altavoces y 650 vatios. Un intermedio Bang & Olufsen con 16 altavoces y 1.500 vatios y por último el Naim que pude probar en el Speed.
Naim, la firma británica fundada en 1973, se convirtió en suministrador de equipos de audio para Bentley en 2008. Desde entonces se ha encargado de dar lugar al que para mi es el equipo de audio que mejor suena del mercado.
En el caso del Continental GT Speed está formado por 18 altavoces, dos transductores de graves activos, amplificador de 20 canales, ocho modos de DSP (Digital Signal Processing) y la friolera de 2.200 vatios de potencia.
Las cifras están ahí, son una auténtica locura pero son ciertas. Aunque lo más salvaje de todo es la calidad con la que sientes en todo momento la música que escuchas. Por muchos graves que tenga la canción nunca distorsiona, en todo momento eres capaz de sentir con total nitidez y claridad las voces, los distintos instrumentos. Todo con una harmonía y una finura que ningún otro equipo de audio es capaz de brindar dentro de un coche.
A mi personalmente me gustan un sinfín de estilos de música de lo más dispares. Pasé un buen rato probando pistas de todo tipo y con todas ellas no hice más que quedarme boquiabierto con la calidad del sonido. Siempre entrega un sonido claro, limpio, como ningún otro. A veces se usan tópicos en plan: “es como si estuvieras en una sala de conciertos”. En este caso es de verdad de la buena.
En resumidas cuentas
La experiencia con Bentley fue de sorpresa en sorpresa. Para nada esperas que un SUV de casi 2,5 toneladas sea ágil como un deportivo en una carretera de montaña. Tampoco imaginas lo bien que lo puedes pasar con un cabrio de un peso similar al de aquel SUV con la capota bajada en pleno invierno. Y la sorpresa total fue poder disfrutar de la música a través del equipo de audio Naim del Continental GT Speed. Jamás antes había sentido la música en formato digital tan limpia tan clara. Como si estuvieses en la platea de un auditorio escuchando un concierto de música clásica o bien como en medio de una sala en plena sesión de un DJ de primer nivel.
El Continental GT no debería medir más de 4,60 metros...