El pilotaje al servicio de la conducción
Este fin de semana hemos tenido la suerte de participar en una nueva edición del evento itinerante BMW Driving Experience, que después de pasar por fantásticos circuitos como el Jarama (Madrid), Los Arcos (Navarra), Cheste (Valencia) y Ascari (Málaga), celebró su última cita del año en el Circuit de Barcelona-Catalunya (Montmeló).
Como su nombre sugiere, BMW Driving Experience viene a ser, más que un curso de pilotaje al uso, una “experiencia de conducción”. Su objetivo principal es el de dar a conocer a los propietarios de un BMW las cualidades dinámicas de su vehículo; especialmente en lo que concierne a seguridad activa. Una serie de ejercicios en pista, diseñados para demostrar la efectividad de estos vehículos en situaciones extremas, sirven para concienciar a los conductores de la importancia de conocer los límites de su propio automóvil; con la ventaja de realizar este aprendizaje en un entorno seguro y perfectamente controlado.
Así pues, contando con la amable invitación de BMW, un grupo de periodistas especializados nos mezclamos con los clientes inscritos en el programa para vivir igual que ellos este Driving Experience, aquirir nuevos conocimientos (o refrescar los ya aprendidos) y, de camino, para disfrutar conduciendo por el célebre trazado de los mundiales de F1 y Moto GP.
Una jornada emocionante y productiva
Como es costumbre en este tipo de eventos, la jornada comenzó con un briefing previo a los ejercicios en pista. En primer lugar, nos fue explicado el funcionamiento de los principales sistemas de seguridad activa incorporados por los BMW actuales: el control de estabilidad DSC (eliminando el subviraje y el sobreviraje para conservar la trayectoria por el volante), el sistema de frenada ABS y el control de frenada en curva CBC. Estas tecnologías han demostrado tal efectividad a la hora prevenir accidentes y han salvado tantas vidas, que en los últimos años han pasado de ser equipamiento opcional a obligatorio por ley en muchos casos.
También recibimos algunas nociones básicas sobre la posición ideal de conducción: para empezar, el asiento debe estar más bajo posible sin que afecte a nuestra visibilidad, y el volante ha de quedar lo bastante cerca para tener el máximo control de su giro. También es importante aprender a no tener las manos siempre fijas “a las dos menos diez”: cuando afrontemos una curva pronunciada, deberíamos llevar a la posición de “las doce” la mano que queda en el interior de la curva y después “a las seis” la contraria, de modo que si el trazado se cierra tendremos mayor capacidad de maniobra. Y un detalle muy importante: el cinturón
El objetivo: conocer y aprovechar las tecnologías de seguridad activa de nuestro coche.
de seguridad ha de quedar bien adherido al cuerpo si queremos que cumpla con su misión en caso de accidente. En caso contrario, si el cinturón queda holgado, nos exponemos a consecuencias bastante desagradables…
Seguidamente repasamos los conceptos básicos de la conducción deportiva: encontrar la referencia de frenada, girar buscando el vértice de la curva y salir de ella con la mayor tracción posible, haciendo que la curva sea “lo más recta posible”. Por último, nos fueron descritos los ejercicios de conducción que realizaríamos (primero siguiendo el ejemplo del piloto instructor, y después cada uno de nosotros al volante) y también qué modelos de BMW habían sido dispuestos. En esta ocasión, todos ellos automáticos y de gasóleo: Serie 1 120d, Serie 3 330d y Serie 4 Coupé 430d.
Una vez completada la teoría, pasamos a la práctica. El trazado de Gran Premio se dividió en dos sub-circuitos: el circuito escuela (que se inicia con las primeras dos enlazadas, punto al que regresa después de la ‘Curva Seat’) y el circuito nacional (que va desde subida de La Moreneta, pasa por el ‘Estadi’ y cierra el giro poco antes del final de la recta).
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En primer lugar, dimos tres vueltas al circuito escuela con un BMW 120d de 190 CV. En cada una de ellas, debíamos completar diferentes ejercicios de habilidad. El primero de ellos era superar a la mayor velocidad posible la chicane del final de recta, frenando con fuerza tras ganar velocidad, entrando con decisión en el giro a derechas para cambiar al de izquierdas de forma rápida como suave para subir con buena tracción a lo largo de la parabólica. En mitad de dicha curva, debíamos poner a prueba el control de estabilidad del vehículo, frenando al máximo en pleno apoyo; y ciertamente, me sorprendió lo poco que abandonamos la trazada después de realizar una maniobra tan desaconsejable como aquella.
A continuación debíamos competir contra otro conductor en una “drag race” desde parado y en línea recta. El ejercicio consistía en acelerar a fondo hasta encontrar el punto ideal donde frenar con todas nuestras fuerzas, pero sin sobrepasar la línea de conos dispuesta transversalmente. Ganaría quien dejase el coche lo más cerca posible de dicha línea. Y, rarísimo en mi caso, esta vez me tocó ganar. El siguiente objetivo era superar a alta
Nunca nos cansaremos de aconsejaros que participéis en cursos de conducción.
velocidad un slalom de conos a derecha a izquierda, pasando por la puerta establecida y sin tirar ninguno de los conos. Aquí ya no anduve tan fino, y uno o dos sí que me llevé por delante…
Finalizada esta primera fase pasamos al circuito nacional, donde por fin tendríamos ocasión de conducir libremente por el trazado, al que daríamos cuatro vueltas bajo la supervisión del piloto instructor, quien nos aconsejaría en todo momento sobre cómo afrontar cada curva con la máxima velocidad posible. Todo estaba dispuesto para pasar exprimir los 258 CV del BMW 330d; pero como suele suceder en ocasiones como ésta, el cielo hizo todo lo posible con arruinarla a base de lluvia. En cuestión de dos minutos la pista se convirtió en un auténtico lago; y aun así la prueba no fue suspendida, de modo que reemplazamos la emoción de la velocidad por la de los derrapes y el aquaplaning. Sorprendentemente, y gracias a las maravillas de la electrónica, ninguno de los participantes se vio involucrado en incidentes de importancia. En mi caso, el único problema fue el empañamiento del parabrisas, lo que dice mucho de la capacidad de control sobre mojado de los coches actuales en general y de la de nuestro BMW en particular.
Pero al fin y al cabo, de esto se trataba precisamente. Las jornadas BMW Driving Experience están diseñadas para descubrir la verdadera capacidad de nuestro coche, y para que nosotros, como conductores, aprendamos a sacar partido de su tecnología mecánica y electrónica. Especialmente cuando más debemos recurrir a ella: en situaciones de riesgo.
Ya nos conocéis: en coches.net nunca nos cansaremos de aconsejaros que participéis en cualquier curso que tengáis a vuestro alcance. En algunos casos, la inscripción es gratuita para clientes de la marca; y en otros tantos, el coste de participar se ve ampliamente compensado por todo lo que aprenderemos en apenas unas horas. Muchas de las técnicas descritas tendrán aplicación en nuestro día a día; y cuanto más las practiquemos (con toda la seguridad de una pista de pruebas) más probable es que nos saquen de un embrollo en el “mundo real”.
...Todo esto sin contar con que rodando en circuito os lo pasaréis como críos. Eso, seguro.
Con que aprendieran en estos cursos a poner el intermitente muchos ya podrian darse por satisfechos. Lo de la posición de las manos en plena curva a las doce y a las seis, pues será que estos BMW llevan direcciones antíguas, volante de camión y el asiento a un metro de distancia, porque con los minúsculos volantes actuales, asistencias eléctricas variables, y direcciones con 2.5 vueltas entre topes, me parece un poco raro. Y finalmente un consejo a los propietarios de un BMW de tracción trasera, en mojado despacito y déjense de inventos que estos coches tienen muy mal comportamiento en condiciones difíciles, mejor no hagan el curso y ahorren para un tracción delantera o integral.
#19 Me parece que no has probado ningún bmw actual con tracción trasera.
#19 Si me dieran un centimo por cada personaje que me he encontrado por ahi como tu seria rico, pero inmensamente rico. La cosa es si no tienes dinero para comprarte un BMW o SI NO TE HAN INVITADO A PROBARLOS no llores, puedes quedarte con tu molticultor delantera y dejar que los que sabemos lo que es bueno sigamos usando la trasera. Por cierto, deberias hablar con Bernie Ecclestone y con sus amigos de los grandes campeonatos mundiales (practicamente todos usan trasera, por si no te habias fijado) y comentarles el tema por que se deben de estar equivocando. Igual hacen un F1 delantera y todo! jajaja ;D