BMW 128 ti: Poco que envidiar al M135i xDrive

Entre el BMW 120i con 178 CV y el M135i xDrive con 306 CV había un hueco grande vacío. Esa distancia ahora queda cubierta con el nuevo BMW 128 ti con 265 CV. Su motor es el mismo que el tope de gama pero adaptado para desarrollar 41 CV menos y, a diferencia del M135i, su tracción es delantera en lugar de ser total. Aunque desde noviembre se pueden hacer pedidos es ahora cuando están llegando a los concesionarios las primeras unidades al precio de 43.700 euros.

He estado en la presentación de esta nueva versión deportiva del Serie 1 y a pesar de la lluvia intensa que caía en Madrid, no me ha defraudado. Aunque Gerard Farré ya nos adelantó las características principales del que podría ser el anti Golf, voy a resumirte los puntos destacados del 128 ti, cuyas siglas hacen referencia a ‘Turismo Internazionale’ y a los modelos 1800 ti y 2002 ti que competían en la década de los 60. (En este enlace puedes ver el vídeo del Volkswagen Golf GTI 2020).

Al igual que el M135i xDrive, incluye el paquete M para su exterior e interior, pero también se distingue por otros detalles, como por ejemplo la decoración en rojo en el frontal y faldones laterales o el anagrama ‘ti ‘en rojo, un color que destaca su deportividad sobre una carrocería en color blanco. Si te gusta más la carrocería en rojo, estos detalles irían en negro. Y en el caso de que prefieras disfrutar de las prestaciones del 128 ti sin tantos detalles estéticos, BMW te da la opción de hacer el pedido sin ellos.

Otro elemento que comparte con el tope de gama son las llantas de aleación ligera de 18 pulgadas pero con un nuevo diseño 553 M con radios en Y en acabado bicolor (en opción de 19 pulgadas) con posibilidad de equipar neumáticos deportivos Michelin Pilot Sport 4. Con el 128 ti BMW te da la opción de equipar estos neumáticos sin sobrecoste, eso sí, desde enero suponen un salto impositivo por emisiones que repercuten en el impuesto de matriculación.

También se aprecia el toque ‘sport’ que le da el pack M al interior del Serie 1. A esto se añaden los pespuntes en rojo en los asientos y en el volante, algo exclusivo del 128 ti (y que BMW también da la opción de eliminar a gusto del cliente) o el anagrama ‘ti’ en el reposabrazos central dependiendo del tipo de tapicería que se elija. En cuanto a espacio interior y maletero te remito a las impresiones de Juan Carlos Grande durante la presentación internacional del Serie 1.

Y llegamos a uno de los elementos claves de esta nueva versión deportiva intermedia, su motor. Ya te he comentado que es el mismo propulsor que el del M135i xDrive, un biturbo de dos litros de cilindrada, pero modificado para desarrollar 265 CV en lugar de 306 CV y para entregar un par de 400 Nm en lugar de 450 Nm -en ambos casos a partir de 1.750 rpm-. La aceleración de 0 a 100 la consigue en 6,1 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h.

Otra característica que comparte con la versión pata negra de la gama Serie 1, y que influye mucho en su comportamiento, es que incorpora un diferencial mecánico Torsen, aunque también se le ha dado un ajuste específico para esta variante de 265 CV. Este tipo de diferencial mecánico -a diferencia de los que son electrónicos- está reservado para los coches más deportivos y supone una mejora importante en adherencia y en estabilidad en curva.

En el comportamiento de este nuevo BMW 128 ti otro factor a tener en cuenta es que, al ser tracción delantera en lugar de total, pesa menos que el M135i xDrive, concretamente 80 kilos menos que se notan cuando se conduce. De serie, cuenta con la caja de cambios Steptronic Sport de ocho velocidades que se puede manejar de forma manual con las levas que hay detrás del volante, sin duda muy recomendable hacer uso de estas levas porque los cambios los hace con mayor rapidez y cuando tú quieres.

Mis sensaciones han sido realmente buenas, acelera mucho y de forma rápida cuando le pisas al acelerador, el sonido procedente del motor es música para tus oídos y muestra un gran aplomo sobre el asfalto. Sin duda a esto contribuye la suspensión M Sport que monta de serie y que rebaja la altura libre al suelo en 10 mm. Se añaden también muelles y amortiguadores más duros, aunque debo decir que la suspensión es cómoda y poco agresiva para tu cuerpo cuando pasas por un badén.

Me ha gustado mucho el tacto de la dirección, bastante durita y directa. El conjunto se completa con un acorde sistema de frenos M Sport y sus llamativas pinzas en color rojo.

Como otros BMW, puedes elegir entre tres modos de conducción, el Sport, Confort y EcoPro, en los que se modifica la dirección, suspensión y comportamiento del motor (incluido el sonido). Estos ajustes se pueden también configurar en el modo Individual. En cualquiera de los tres modos se disfruta de la respuesta deportiva de esa versión con 265 CV pero es en el modo Sport donde lo vas a disfrutar al máximo. En el modo Confort la respuesta es más equilibrada y en el EcoPro se aprecia que la respuesta es un pelín más lenta porque da prioridad a la eficiencia, en este modo también se ajusta el funcionamiento del climatizador para reducir el consumo. Su consumo medio homologado oscila entre 6,1 y 6,4 l/100 km.

Se me ha quedado corta esta prueba de presentación y más con la lluvia, sin duda está pidiendo a gritos una prueba más a fondo. Como conclusión decirte que con este Serie 1 con 265 CV no te faltará diversión en tu día a día.

Y ahora lo que más puede doler, su precio. El BMW 128 ti (265 CV) cuesta 43.700 euros frente a los 54.000 euros del M135i xDrive (306 CV) y los 36.400 euros del 120 i (178 CV).