Marzo de 2019. Esa es la fecha elegida por BMW para iniciar la comercialización de su séptimo modelo de la línea X de todocaminos. Bautizado como X7, se trata de un automóvil de grandes dimensiones (mide 5,15 metros de largo) y de siete plazas que tendrá, como principal misión, competir contra el Mercedes GLS y con los grandes SUV estadounidenses en el mercado americano. Por este motivo, su producción, como la de su hermano menor, el X5, se concentrará en la planta de Spartanburg, en Estados Unidos.
Las dimensiones de este X7 son colosales. Mide 5,15 metros de largo, 2 metros de ancho y 1,80 de alto y tiene una distancia entre ejes de 3,10 metros. Estéticamente destaca por las líneas cuadradas de la parte trasera, pensadas para aumentar al máximo la capacidad interior, proporcionar espacio suficiente para adultos en la tercera fila y mofrecer una gran capacidad de carga cuando no se usen las tres filas.
En el frontal destaca la parrilla más grande de la historia montada en un BMW (con apertura y cierre activo de la rejilla interior dependiendo de las necesidades de refrigeración, los faros de laser que multiplican por dos el alcance del haz de luz (hasta 600 metros según la marca en lugar de los 300 metros de unos faros de LED) y el radar en la parte inferior que permite ofrecer elementos de seguridad como el asistente de atascos, el mantenimiento de carril, el asistente de dirección y la adaptación a los límites de velocidad de la carretera.
En la parte trasera se mantiene el nuevo estilo de diseño de la marca, con unos pilotos de LED unidos por un perfil cromado. La marca mantiene el portón de doble apertura (luneta hacia arriba y el resto hacia abajo) ya visto en el X5 y que, en nuestra opinión resulta poco práctico ya que aleja al usuario del fondo del maletero. Éste tiene una capacidad de 326 litros con las siete plazas ocupadas, 750 si sólo se utilizan 5 y un máximo de 2.120 litros con los asientos de la segunda y la tercera fila abatidos. La suspensión neumática permitirá rebajar la altura libre en 4 cm para facilitar la carga.
Como es habitual, la marca ofrecerá un acabado exterior más lujoso y otro más deportivo con la firma de M Sport. Llantas, diseño de los parachoques y presencia de cromados en el primero sustituidos por superficies negras en el segundo diferenciarán a ambas variantes. Las versiones M dispondrán de suspensión deportiva y de frenos M mientras que las llantas serán de entre 20 y 22 pulgadas.
El X7 ofrecerá siete plazas de serie. En la fila central se podrá elegir entre una banqueta de tres plazas o dos asientos individuales de confort con regulación eléctrica. La tercera fila, con reposabrazos y climatización, debe poder acoger a personas adultas gracias a la posibilidad de regular longitudinalmente la segunda fila. La tapicería de cuero será de serie en todas las versiones así como el climatizador automático de cuatro zonas, la luz ambiental y el techo panorámico de cristal con tres secciones. Opcionalmente, podrá añadirse un climatizador automático de cinco zonas, el techo de cristal panorámico Sky Lounge, mandos interiores con inserciones de cristal, equipo de sonido Bowers & Wilkins y sistema de entretenimiento en las plazas traseras.
La citada suspensión con muelles neumáticos en ambos ejes y suspensión adaptativa con control electrónico de la amortiguación será de serie en todas las versiones lo que facilitará, además, su uso como todocamino al poderse modificar la altura libre al suelo. En opción podrá montar dirección activa, barras estabilizadoras activas y diferencial deportivo, elemento que será de serie en la versión más potente X7 M50d. También será opcional el sistema de modos de conducción off-road con los programas Arena, Tierra, Rocas y Nieve.
Como la mayoría de BMW de gama alta, entre las ayudas a la conducción y además de las citadas anteriormente figuran el control de crucero activo, asistencia contra colisiones laterales y para maniobras de esquiva, alerta de tráfico cruzado trasero, alerta de prioridad y de dirección contraria, un nuevo head up display y el sistema de aparcamiento asistido con cámara perimetral y la posibilidad de aparcarlo desde fuera del coche.
La instrumentación es completamente digital y cuenta con una pantalla de 12,3 pulgadas (31 cm), mismas dimensiones que la que ocupa la parte superior del salpicadero. Puede manejarse mediante un mando en la consola, mediante la pantalla táctil, los botones en el volante, el control por voz y el control por gestos. La llave digital, por su parte, permite usar el smartphone para acceder al vehículo y arrancar el motor.
La gama de lanzamiento incluye una versión de gasolina xDrive40i con un seis cilindros en línea de 3 litros y 340 CV de potencia y 450 Nm de par combinado con una caja de cambios de ocho velocidades Steptronic y tracción integral. Acelera de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos, alcanza una velocidad máxima de 245 km/h y tiene un consumo medio de entre 8,7 y 9 litros/100 km dependiendo del equipamiento y los neumáticos.
La gama diésel estará integrada por dos versiones, el Drive30d (6 cilindros, 3 litros, 265 CV, 620 Nm, 7 segundos en el 0-100 km/h., 227 km/h. y 6,5 a 6,8 litros/100 km) y el tope de gama M50d (6 cilindros, 3 litros, 400 CV, 760 Nm, 5,4 segundos en el 0-100 km/h., 250 km/h. y 7 a 7,4 litros/100 km). Este nuevo super-SUV de la marca bávara estará a la venta durante el primer trimestre de 2019 como complemento al X5 del que, en este enlace encontraréis nuestra primera toma de contacto en video.
