¿Utilitario o crossover? Lo que sí es, seguro, es un Citroën
Actualización.- El nuevo Citroën C3 acaba de salir a la venta en España. Las primeras unidades todavía no han llegado a los concesionarios, pero lo harán muy pronto. De hecho, la marca ya admite pedidos para los más impacientes. Los precios parten desde 11.750 euros (descuento incluido); podéis repasar la lista completa al final de este artículo.
30/06/2016.- Citroën ha presentado hoy mismo en Lyon (Francia) a la prensa internacional la tercera generación de su utilitario C3. Desarrollado desde cero, el nuevo modelo se atreve a romper con la silueta que hizo popular al C3, pero que por otro lado ya no podía disimular los efectos del tiempo transcurrido.
Así, después de catorce años y con tres millones y medio de unidades vendidas, el Citroën C3 se atreve a romper con su línea (curva) y, reconvertido en una mezcla de utilitario y crossover, adaptarse a los vientos que corren. Vientos que vuelven a ser favorables a una marca que está demostrando ser capaz de recuperar la frescura, el sentido del diseño y el atrevimiento de los que históricamente ha hecho gala Citroën.
Como decía, aun sin dejar de ser un utilitario tradicional en cuanto a cualidades objetivas, el C3 se aproxima su estética a la de un crossover; y cuál mejor para inspirarse que su propio hermano mayor, el C4 Cactus. De aquél hereda sus rasgos más reconocibles, sobre todo en la vista lateral, como por ejemplo sus característicos airbumps (algo más finos en el C3 y a modo de equipamiento opcional), las protecciones de plástico que recorren la parte inferior de la carrocería y las ruedas de gran diámetro, aunque los voladizos más cortos, la mayor caída del techo y -ejem- las ventanillas traseras “convencionales” permiten diferenciar ambos modelos con facilidad.
El frontal adopta el lenguaje de diseño de la Citroën actual, con una estampa a medio camino entre la del utilitario C1 y la del monovolumen C4 Picasso. La línea del capó queda muy elevada, pero su escasa inclinación previene que la palabra “monovolumen” asome en la descripción del C3. La zaga, a la que por alguna razón busco cierto parecido a la del Renault Captur, luce unas ópticas redondeadas de dibujo concéntrico y efecto tridimensional como el que ya presentan otros automóviles de Citroën y DS.
Con este nuevo modelo, la marca gala pretende no sólo fidelizar a los actuales propietarios de C3, sino también atacar al mismo tiempo a un público más joven y más interesado por la estética, la moda y el diseño. Para lograrlo, la receta más segura y conocida es ofrecer amplias posibilidades de personalización; y así, el nuevo C3 ofrece 9 colores de carrocería con 3 tonalidades de contraste para el techo, además de diferentes vinilados exteriores y combinaciones de colores para el interior que nos permitirán individualizar más si cabe nuestro vehículo.
Siguiendo la tendencia actual, el C3 ha aumentado ligeramente en longitud y anchura, decreciendo en altura. El nuevo modelo, que toma como base una versión evolucionada de la plataforma anterior, mide 3,99 m de largo (5 cm más que el anterior) por 1,75 m de ancho (2 cm más) y 1,47 m de alto (5 cm menos), con una distancia entre ejes de 2,54 metros (7 cm más). Este importante aumento de batalla permite disfrutar de un habitáculo más amplio, sobre todo en las plazas traseras, que sin ser especialmente amplias sí ofrecen un mayor desahogo. Aun así, no me ha parecido que destaquen por espacio para las piernas; pero sí para la cabeza, en contra de lo que podría indicar la reducción de altura del vehículo.
Pasando a las plazas delanteras, nos encontramos con salpicadero de diseño moderno y atractivo, de diseño horizontal y -me invento este recurso- con escaso grosor visual. La calidad de acabados es aparentemente buena, y aunque todos los plásticos son duros, las piezas dan sensación de buen tacto y ajuste. Destaca la presencia de una vistosa pantalla táctil de 7”, similar a empleada por otros automóviles de PSA pero situada en una posición bastante baja; y que, por desgracia, repite el error de integrar el control de la climatización. En cambio, me han gustado los asientos, confortables y envolventes.
A falta de un análisis más detenido, y de poner el vehículo en movimiento (recordemos que se trata de una presentación estática a la prensa internacional y los vehículos estaban detenidos), la impresión general del puesto de conducción ha sido positiva.
Curiosamente, el maletero conserva la misma capacidad de 300 litros aunque en esta ocasión parecen mejor aprovechados al presentar unas formas bastante regulares. La boca de carga es suficientemente amplia e incluso más rectangular de lo acostumbrado, aunque el umbral queda un poco alto. Lo normal en un utilitario del segmento B, todo sea dicho.
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El equipamiento de seguridad y confort de serie u opcional puede llegar a ser bastante adecuado, contando con elementos como el asistente de cambio de carril, vigilancia de ángulo muerto, detección de fatiga, asistente de arranque en subida, cámara de visión trasera y el servicio Citroën Connect Box con servicio asistencia remota en carretera. Como novedad, el C3 incorpora el sistema ConnectedCam que permite grabar nuestra conducción a través de una cámara HD y compartirla en redes sociales; algo que no pasaría de ser una simple curiosidad si no fuese porque también puede servirnos como prueba a aportar en caso de incidente (si habéis visto en YouTube alguno de esos vídeos made in Russia, ya sabéis de lo que hablo).
La gama de motores de gasolina comprende tres opciones dentro de la familia de tricilíndricos PureTech: los atmosféricos 1.0 de 68 CV y 1.2 de 82 CV más el 1.2 turboalimentado de 110 CV. En diésel podremos elegir entre dos opciones sobre el bloque 1.6 HDi de cuatro cilindros, con potencias de 75 y 100 CV respectivamente. Al inicio de su comercialización, todos los motores vendrán acompañados de cajas de cambio manuales, estando prevista para poco más adelante la posibilidad de acceder a las cajas automáticas EAT6 de tipo convertidor de par.
Y hasta aquí todo lo que podemos contaros por ahora sobre el nuevo C3, que será presentado de manera oficial en el próximo Salón de París. Nosotros os lo mostraremos en vídeo desde el mismo stand de Citröen, a finales de septiembre; y poco después tendremos ocasión de probarlo y trasladaros nuestras primeras impresiones de conducción. Paso por paso…
Si os gusta e interesa, ya podéis encargarlo
La marca francesa ya admite pedidos para su nuevo utilitario, disponible con cuatro niveles de acabado: Live, Feel, Shine y Business. El equipamiento de serie incluye 6 airbags, volante regulable en altura y profundidad, asistente de arranque en pendiente (excepto para el PureTech 68), sensor de presión de neumáticos, alerta de fatiga del conductor, alerta de cambio involuntario de carril, reconocimiento del límite de velocidad y regulador/limitador de velocidad.
El listado oficial de precios (descuento promocional incluido) queda así:
Gasolina
Citroën C3 PureTech 68 Live 11.750 € Citroën C3 PureTech 68 Feel 12.850 € Citroën C3 PureTech 82 Feel 13.500 € Citroën C3 PureTech 82 Shine 15.950 € Citroën C3 PureTech 110 S&S Feel 14.900 € Citroën C3 PureTech 110 S&S Shine 17.350 €
Diésel
Citroën C3 BlueHDi 75 S&S Live 14.000 € Citroën C3 BlueHDi 75 S&S Feel 15.100 € Citroën C3 BlueHDi 75 S&S Shine 17.550 € Citroën C3 BlueHDi 100 S&S Feel 16.000 € Citroën C3 BlueHDi 100 S&S Shine 18.450 € Citroën C3 PureTech 82 105g Business 15.150 € Citroën C3 BlueHDi 75 S&S 83g Business 16.750 €
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