Así es: los nuevos Citroën C4 y ë-C4 se “apuntan” a las C-Series. Vaya por delante que, en realidad, no se trata ninguna competición automovilística sino de la edición especial de equipamiento ya adoptada anteriormente por los Citroën C3, Citroën C3 Aircross y Citroën C5 Aircross. Esta versión C-Series se sitúa en la gama a medio camino entre los niveles de acabado Feel Pack y Shine Pack, y aporta un toque de exclusividad con sus combinaciones de color y materiales.
En el caso de los compactos Citroën C4 -al que comparamos en este vídeo con el Renault Arkana- y Citroën ë-C4 -variante eléctrica de la que aquí tenéis nuestra videoprueba-, la edición C-Series ofrece el Pack Color con molduras de contraste para los faros antinieblas y las protecciones de las puertas y da a elegir entre cinco tonalidades de carrocería (entre ellas, el color Blanco Blanquise de la unidad mostrada en este artículo). Además, el distintivo del modelo aparece en las aletas delanteras, casi a la altura de los retrovisores.
Por su parte, el interior del vehículo recibe la discreta ambientación Urban Grey con tapizados en cuero sintético en gris claro, además de un retrovisor central fotosensible.
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