DS 3 Crossback E-Tense: Eléctrico de máximo refinamiento

Probamos el primer modelo 100% eléctrico de la marca francesa DS, el DS 3 Crossback E-Tense. Este compacto del segmento B viene para liderar la oferta de eléctricos con acabados de lujo. Sus 320 kilómetros de autonomía y 136 CV también son bazas interesantes si estáis buscando un eléctrico de buenas prestaciones.

DS es una marca que ha nacido con el objetivo transmitir el savoir faire del lujo francés al mundo del automóvil, como hizo en los años cincuenta el Citroen DS (en este enlace tenéis una noticia sobre el 60 aniversario del Citroen DS), todo un símbolo de elegancia y vanguardismo que ha servido de inspiración a la marca.

DS lleva sólo 4 años de vida como marca independiente, y el DS 3 Crossback es el segundo modelo que lanza al mercado, después del DS7 Crossback (en este enlace tenéis la videoprueba del DS7 Crossback). Y esta versión eléctrica, llamada E-Tense -, es su primer modelo movido por un motor eléctrico y baterías. Es una versión cero emisiones que acompañará a partir de ahora a las ya conocidas versiones de gasolina y diésel, presentadas hace poco.

Todas utilizan la misma plataforma del grupo PSA. La que emplean el Peugeot 208 (aqui tenéis el vídeo de la presentación internacional) y el Opel Corsa (en este enlace os presentamos el nuevo Opel Corsa en el Salón de Frankfurt), que justo ahora también acaban de lanzar versiones eléctricas.

El motor eléctrico del DS 3 Crossback E-Tense ofrece 136 CV y está conectado a una batería de iones de litio de 50 kWh. Su autonomía es buena: 320 kilómetros según el ciclo WLTP. Por lo tanto, estamos ante un coche eléctrico muy funcional. Un eléctrico enfocado para un uso urbano, por su tamaño compacto (mide 4,12 metros de largo) pero también capaz de transportar hasta cinco adultos por carretera con un nivel de confort elevado.

Ya os comentamos todo sobre el DS 3 Crossback en esta videoprueba, coincidiendo con el lanzamiento del modelo en España. El DS 3 Crossback E-Tense se basa en las versiones con motor de combustión, pero tiene algunos detalles que lo identifican como eléctrico. El primero, el logo E-Tense en el capó. Bajo la denominación E-Tense se agruparán todos los eléctricos de DS que se vayan lanzando al mercado a partir de ahora.

Es exclusivo de esta versión eléctrica el color Gris Antracita de la rejilla de la calandra, el color Cristal Pearl de la carrocería, las llantas Kyoto de 18 pulgadas o, en la parte trasera, las molduras cromadas en lugar de las salidas de escape que lucen las versiones gasolina o diésel.

En el interior no hay cambios respecto al resto de versiones de la gama DS3 Crossback, excepto la información que se muestra en el cuadro de instrumentos y la pantalla central.

El cuero perforado Gris Galet de todo el volante, de la parte superior del salpicadero, de la parte interior de las puertas y de los asientos da un toque de exclusividad y refinamiento muy alto, algo difícil de encontrar en este segmento, todavía más en un eléctrico.

No cambia la habitabilidad en las plazas traseras, como tampoco cambia la capacidad del maletero, que ofrece el mismo espacio que el resto de versiones: 350 litros. Aquí no molestan las baterías, ya que están en el piso. Es un maletero con formas muy regulares, muy aprovechable.

El comportamiento en carretera es similar al de un DS3 Crossback con motor de combustión, pero se nota un poco más aplomado. La ubicación de las baterías en el piso hace que su centro de gravedad sea más bajo.

Es un coche muy confortable, por el tarado suave de su suspensión y porque está muy bien insonorizado. En un coche eléctrico cualquier ruido proveniente del exterior se nota mucho, y DS ha creido oportuno trabajar el aislamiento en mayor medida que en las versiones con motor de combustión.

Hay más grosor las ventanillas y el parabrisas, y eso se nota en marcha, se percibe más confortable que las versiones gasolina o diésel.

También es un coche más pesado. Pesa unos 300 kilos más que una versión con motor de combustión. Pero ese lastre de las baterías lo compensa con una mayor potencia, y sobre todo, con un par máximo disponible al momento. Por lo que al volante, ese mayor peso se nota muy poco.

También es un eléctrico que aprovecha muy bien su energía y la recupera mientras va en movimiento.

Ofrece dos sistemas de recuperación de energía: en modo normal, recupera de forma que la fricción apenas se nota mientras conduces. Al dejar de acelerar, la retención es muy similar a la de un DS3 Crossback convencional; pero el cambio ofrece la posibilidad de incrementar esa retención y, por lo tanto, aumentar el volumen de energía recuperada. El programa se activa desde la propia palanca, no a través de levas.

Finalmente, destacar que dispone de tres modos de conducción: Normal, Eco (el coche responde de forma más pausada y progresiva a nuestras órdenes al acelerador) y Sport (el motor eléctrico responde con toda su potencia y par desde abajo y la dirección se endurece ligeramente).

En Francia hicimos una larga ruta por el norte de París, que nos permitió rodar durante un día, en un recorrido de unos 300 kilómetros, sin parar. Si hubiese sido necesario, podríamos haber recargado su batería hasta el 80% en sólo 30 minutos en un cargador de 100 Kw. Ojo, La mayoría de los que hay en España tienen menos potencia, así que tenéis que calcular que os llevará algo más de tiempo. En casa, en un cargador doméstico DS Wallbox de 11 Kw, que instala la marca por un precio entre 800 y 1500 euros, tarda 5 horas.

Son tiempos de recarga asumibles para la mayoría de clientes a los que se dirige este coche, que disponen de toma de corriente en su domicilio, circulan sobre todo por ciudad y hacen viajes largos de vez en cuando.

El DS 3 Crossback E-Tense se vende a partir de 31.000 euros con todos los descuentos aplicados, que es lo que cuesta el acabado So Chic. En realidad el precio de tarifa es de 38.300. Le sigue el Performance Line, con un PVP de 39.100 y el Grand Chic, 43.200. DS garantiza la batería durante 8 años o 160.000 kilómetros.

No es un eléctrico económico, es evidente, pero es que eléctricos asequibles para el gran público no existen todavía, y en este caso, hay que contar que DS ofrece un nivel de acabados y equipamiento muy cuidados, y eso incrementa la tarifa.

En cualquier caso, bienvenida sea esta versión eléctrica del Crossback, un compacto del segmento B que anima el mercado de los eléctricos que, poco a poco, va creciendo. A ritmo muy pausado, pero constante.