Jeep presentará en el Salón de Beijing el nuevo Grand Commander, un vehículo de tipo SUV de gran tamaño y tres filas de asientos destinado al mercado local y que no está previsto que llegue a Europa. Este coche concreta la vocación de fabricante mundial de Jeep, una marca que ha empezado el desarrollo de modelos adaptados a los diferentes mercados donde está presente.
El Grand Commander no es el esperado siete plazas de lujo que el mercado estadounidense lleva tiempo reclamando al fabricante y que se hará esperar hasta 2020 como pronto. El siete plazas para Estados Unidos -y, en consecuencia, posiblemente para Europa- se llamará Wagoneer y se lanzará sobre la base del pick-up RAM 1500, es decir, con un chasis de largueros y travesaños y carrocería añadida. Tendrá siete plazas y una variante más lujosa llamada Grand Wagoneer.
Volviendo al Grand Commander es un modelo construido sobre la plataforma del Cherokee convenientemente alargada y que, para el mercado chino, se ofrecerá con un motor de gasolina de cuatro cilindros turboalimentado. La marca no ha concretado datos aunque podría tratarse del mismo propulsor de 272 CV que animará a la nueva generación dle Wrangler que ya vimos en el Salón de Ginebra.
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Este modelo para China tiene una estética frontal con un cierto aire al Grand Cherokee y una trasera muy cuadrada que recuerda en ciertos rasgos al Mercedes GLS. Tiene tres filas de asientos en disposición 2+3+2 y un maletero enorme cuando sólo se utilizan las cinco plazas de las dos primeras filas. Tendrá diferentes acabados, entre ellos el lujoso Summit y estará a la venta antes del verano. La fabricación es local.