Grand Cherokee 3.0 V6 Diesel 75 Aniversario

Desde el nacimiento del mítico Willys en 1941, Jeep lleva tres cuartos de siglo forjando su leyenda. Un periodo que merece, sin duda, ser reconocido. Para celebrarlo, se creaba una gama específica -series limitadas- que ofrecen a sus clientes la posibilidad de disfrutar de toda la gama Jeep en exclusivas versiones. Al mercado español le ha correspondido una reducida cantidad de 500 unidades.

El Grand Cherokee es un modelo relativamente joven en la gama de Jeep. Fue lanzado al mercado en 1999 para cubrir el segmento SUV Premium del mercado, rivalizando con modelos de la talla de BMW X5, Volkswagen Touareg o Land Rover Discovery. En cualquier caso, ha sido un rotundo éxito comercial, acumulando ya más de cinco millones de unidades vendidas. Se caracteriza por ser un automóvil confortable y muy equipado, que no renuncia -ni mucho menos- a las capacidades fuera del asfalto, que siempre se presuponen a un Jeep.

La edición 75 aniversario incorpora algunos elementos específicos que la diferencian del resto de gama. Incluye un parachoques delantero específico, faros y antinieblas con encendido automático, faros bi-xenón, techo solar panorámico y barras del techo de color bronce. Detalles que se complementan con la habitual parrilla de siete franjas verticales y que otorga fuerte personalidad a su imagen frontal.

Otro factor identificativo de este modelo 75 Aniversario es la disponibilidad de un color denominado Verde Recon, una tonalidad con matiz “militar” también exclusiva, que se combina con acabados y detalles en color bronce. El conjunto está rematado con unas llantas de 20 pulgadas. Con sus 4,87 metros de longitud, 1,94 metros de anchura y 1,79 metros de altura, el aspecto del Grand Cherokee es imponente, aunque por sus formas, el factor aerodinámico no es su punto fuerte.

Al acceder a su interior -cómodamente mediante sistema sin llave-, Jeep muestra sus notables avances en calidad de materiales y en optimización ergonómica. Cierto es que algunos de sus rivales están un escalón por encima en estos apartados, pero no lo es menos que el precio de estos adversarios es superior al ofrecido por la firma perteneciente al grupo Fiat. Los asientos delanteros son muy confortables e incluyen regulaciones para lograr la postura deseada ya que tanto el conductor como el acompañante disponen de hasta ocho reglajes para lograr este objetivo así como memoria de posición y calefacción. Las plazas traseras se benefician de una notable distancia para las piernas, pero no destacan por su anchura. El maletero, que cuenta con un portón de cómodo acceso, dispone de una capacidad inicial de 457 litros, una cifra discreta en su segmento. Este espacio es ampliable a un máximo de 1.554 litros, con los asientos traseros abatidos .

Jeep ofrece una dotación de equipamiento a la altura de los mejores modelos de su segmento. El listado es largo y destacan elementos como el sistema Uconnect con pantalla táctil de 8,4 pulgadas, que muestra toda la información del vehículo y del navegador, control del ángulo muerto, techo solar panorámico CommandView con doble panel, cristales traseros tintados, retrovisores exteriores con sistema de memoria, sensor de lluvia o la disponibilidad de volante calefactable y con regulación eléctrica de posición. Asimismo, esta versión 75 Aniversario ofrece una atractiva tapicería de cuero Nappa con logos en relieve y costuras en color perla mandarina. Las opciones se reducen a un reproductor DVD BluRay y dos pantallas en respaldos de asientos delanteros, que tiene un coste de 2.484 € y la pintura metalizada que cuesta 1.294 €.

A diferencia de algunos competidores, el Grand Cherokee es un auténtico 4x4, dotado de la mejor tecnología para ser efectivo fuera del asfalto. Su motor diésel se combina con un completo y eficaz sistema de tracción 4x4, denominado Quadra-Drive II, con un sistema de gestión de la tracción (Selec-Terrain) y la suspensión neumática Quadra Lift. Un cocktel efectivo. Pero vayamos por partes. El motor del Grand Cherokee es un bloque diésel de 6 cilindros en V, de tres litros de cubicaje, capaz de desarrollar una potencia máxima de 250 cv, logrados a 4.000 rpm.

No se trata de cifras espectaculares, pero los 570 Nm de par máximo le permiten ofrecer una buena respuesta a bajo régimen, permitiéndole ser eficaz en toda la gama, aunque su banda óptima de utilización se sitúa entre 2.000 y 4.000 rpm, la zona del cuentavueltas donde este propulsor se encuentra más cómodo. Las cifras de rendimiento son notables, superando los 200 km/h de velocidad máxima y obteniendo un registro de aceleración 0-100 km/h de 8,2”.

El propulsor incorpora tecnología Start/Stop para obtener unos consumos más competitivos. Un automóvil que supera las 2,4 toneladas cuenta con un lógico hándicap que se refleja en este apartado, pero el Grand Cherokee 75 Aniversario tiene una cifra homologada de consumo medio de 7,5/100 km. Yo no conseguí bajar de los 9,5 litros y superé los 10,0 litros en cidudad. Con todo, esta versión consume -según la marca- un 10% menos que la anterior.

Por su parte, el depósito de combustible cuenta con una capacidad de 94 litros, lo que le proporciona una buena autonomía. El motor va asociado a un cambio automático ZF de ocho velocidades mediante convertidor de par, capaz de extraer el máximo partido y de ofrecer unas relaciones de cambio óptimas en todo el rango de velocidades. Asimismo dispone de tres modos de conducción, Normal, Eco y Sport para adaptar su respuesta mecánica a las necesidades y deseos del conductor.

La leyenda de los Jeep se ha escrito lejos del asfalto. Los modelos de esta mítica firma han destacado siempre por sus enormes cualidades off-road, marcando así diferencias frente a sus rivales. Los tiempos han cambiado y los 4x4 puros y duros han dejado paso a los modernos y tecnológicos SUV, que mantienen la imagen todoterreno pero que, en su mayoría, han dejado de lado las posibilidades off road, al menos para en zonas complicadas, para centrarse en el comportamiento sobre asfalto.

El Grand Cherokee está preparado para afrontar las aventuras off-road que su conductor desee experimentar al volante. En primer lugar, ofrece unos ángulos característicos de carrocería considerables: el de entrada es de 35,8 grados, facilitando el acceso a los obstáculos. Con 29,5 grados, el de salida permite finalizar las maniobras con éxito. Finalmente, el ventral, con sus 23,5 grados, le permiten superar crestas y cambios de inclinación en las siempre complicadas zonas de franqueo de obstáculos.

Por supuesto, el Grand Cherokee dispone de reductoras que ofrecen un enorme potencial cuando se trata de superar rampas de mucha inclinación y generan gran retención para descensos muy pronunciados. También incorpora la función Selec-Speed que se encarga de controlar la velocidad de subida y bajada del vehículo desde el volante, sin necesidad de utilizar el pedal de freno. Las reductoras forman parte de la sofisticada tracción Quadra-Drive II de Jeep, basada en un diferencial central equipado de embrague multidisco y bomba hidráulica que recibe órdenes de una centralita para aumentar o disminuir la presión y, con ella, el acoplamiento entre los discos de embrague. En condiciones normales de uso, disponemos de un 48% de la tracción en las ruedas delanteras y un 52% en las traseras, porcentajes que varían en función de las necesidades.

La extraordinaria eficacia off-road de este Grand Cherokee se completa con la presencia de diferenciales autoblocantes delanteros y traseros que le convierten en un vehículo muy eficaz fuera del asfalto. Aunque los recorridos de la suspensión del vehículo son limitados y no es complicado que alguna rueda pierda contacto con el suelo, su capacidad de avance es sobresaliente. La suspensión neumática Quadra-Lift de Jeep proporciona la posibilidad de escoger entre cinco alturas. Este dispositivo cuenta con modos de utilización off-road que permiten alcanzar una altura libre al suelo extraordinaria, un máximo de 255 mm, permitiendo así acceder a zonas de dificultad y y evitar roces en los bajos del vehículo.

Dispone de 250 cv pero su respuesta no es “bestial” -aunque es cierto que empuja siempre- el cambio tampoco es rapidísimo y la suspensión es blanda, así que, sobre asfalto, donde mejor se encuentra es en autopistas o carreteras rápidas, en las que disfrutaremos de su buen rodar, su confort y aplomo. Es un coche pesado -más de dos toneladas- y aunque la frenada es efectiva, el tacto de pedal es demasiado esponjoso.

La dirección está muy desmultiplicada y la carrocería balancea considerablemente, así que es más que evidente que no será en carreteras de montaña y zonas muy reviradas donde el Grand Cherokee quiera celebrar su 75 Aniversario… Sus dimensiones y sus discretos 11,3 metros de diámetro de giro no son puntos positivos para callejear en ciudad, donde tan sólo podremos aprovecharnos de la altura de la posición de conducción. Por el contrario, la visibilidad trasera escasa y no ayuda a la hora de maniobrar. Afortunadamente, equipa de serie una cámara de visión trasera y un sistema de detección de objetos para cuando debemos maniobrar.

Con un precio de 63 900 €, todo el equipamiento y personalización de esta versión, y el confort que le caracteriza, el Grand Cherokee sigue siendo un coche muy atractivo, que sigue manteniendo ese plus de efectividad fuera del asfalto que lo diferencia de la competencia.