Lincoln MKC. Un Ford Kuga de lujo

Lincoln es la división de lujo de Ford en Estados Unidos donde asume un papel similar al de Cadillac en General Motors pero con una salvedad; mientras que algunos modelos de Cadillac disponen de chasis y motores propios, los Lincoln no son más que modelos de Ford a los que se modifica tanto la estética exterior como el equipamiento y el acabado del habitáculo.

La marca, orientada a un público conservador, necesitaba un relanzamiento y en ello está. Ha anunciado para los próximos años el lanzamiento de cuatro nuevos modelos de los cuales el MKC es el segundo después de la berlina MKZ que, en realidad, es una "lincolnización" del Ford Fusion (nuestro futuro Mondeo 2014).

El MKC, aunque no lo parezca es un Ford Kuga. Para dejarlo irreconocible, Lincoln ha recurrido a su habitual estética algo recargada, con un frontal con una peculiar parrilla que muchos han comparado con las barbas de una ballena. Este tipo de parrilla la utilizan todos los modelos de la marca y tiene la particularidad de ser activa de manera que se cierra cuando el coche circula a alta velocidad en autopista para mejorar la aerodinámica y reducir ligeramente el consumo.

Este nuevo modelo dispone de dos motores Ecoboost de gasolina, ambos acoplados a un cambio automático de seis velocidades. El primero es un viejo conocido ya que se trata del 2.0 de 240 CV que montan diferentes modelos de Ford en Europa, entre ellos el Focus ST. El otro es un 2.3 de 275 CV de la misma familia que sólo se monta en modelos del otro lado del Atlántico.

La marca vende el coche con tracción delantera y llantas de 18 pulgadas pero el cliente puede optar también por versiones de tracción integral (con el mismo sistema de tracción integral inteligente de nuestro Kuga). En este caso, las llantas pasan a ser de 19 pulgadas y el coche monta una suspensión adaptativa electrónica que permite elegir la dureza de la amortiguación.

El equipamiento es superior al del Ford Escape (el Kuga allí se llama así) y puede disponer de una sofisticada tapicería de cuero, de techo completo de cristal, un equipo de música con 14 altavoces o el sistema SYNC personalizado para la marca con servicios de conectividad además de navegación. A todo ello se añaden los habituales sistemas de seguridad de nuevo cuño (mantenimiento de carril, aviso de presencia de vehículos en el ángulo muerto y advertencia de colisión).

El coche se pondrá a la venta en Norteamérica a mediados de 2014 y no llegará a Europa donde Ford ha abandonado por completo la idea de lanzar Lincoln y cubrirá la demanda premium con la nueva linea Vignale que debutará en el Mondeo y el futuro S-Max para después pasar a los SUV Kuga y Edge.