Mazda MX-5: El de siempre, pero más potente

Mazda ha lanzado la versión 2019 de su popular deportivo, el MX-5. El coche llega a los concesionarios con algunas mejoras de equipamiento y más potencia en su motor 2.0 Skyactiv-G.

El Mazda MX-5 es un modelo muy importante para la marca japonesa, de ahí que la nueva versión 2019 se haya presentado en un escenario perfecto para un coche de su estilo: la Transfagarasan Road, en Rumanía, considerada una de las más bellas carreteras del mundo. La Transfagarasan conecta las regiones de Transilvania y Wallachia, a lo largo de 151 kilómetros repletos de curvas de todo tipo, que conducen hasta una altitud de 2.042 metros, a los pies de un lago glacial, el Balea Lake.

Como os podéis imaginar, es una gozada circular con un pequeño deportivo como el MX-5 en un trazado de montaña así, enlazando paellas y paellas hasta aburrir, cruzando pequeños túneles y parándose a fotografiar las pequeñas cascadas de agua que se precipitan a un lado de la carretera.

La Transfagarasan parece estar hecha a medida para coches de este estilo, aunque también es cierto es que tiene un asfalto bastante roto que requiere ir corrigiendo la trayectoria de vez en cuando y que en ocasiones pone a prueba el chasis y sobre todo, la rigidez de la versión descapotable. En el MX-5 puedes llegar a notar las típicas y pequeñas vibraciones perceptibles en el retrovisor y en la luneta trasera fruto de su condición de roadster, pero qué duda cabe que el coche supera la prueba con excelente nota.

En Rumanía conduje la versión RF con techo duro, que me pareció la más interesante si sólo sueles descapotar de vez en cuando y prefieres un MX-5 más insonorizado y con un aspecto menos clásico, más convencional. No hay cambios en ese hard-top, que permite recoger el techo en sólo 13 segundos, sin restar espacio al maletero. Tampoco hay cambios en las dimensiones del coche, que sigue teniendo una capacidad de carga bastante justa. Caben dos maletas de viaje de tamaño cabina, y muy poco más.

Las condiciones meteorológicas (agua y niebla) no me dejaron circular a cielo abierto, excepto en momentos puntuales. Rodar sin techo en un escenario de montaña como el de la Transfagarasan o cualquier otra carretera similar, con un biplaza de tracción trasera, cambio manual y 184 CV bajo el capó roza lo perfecto para disfrutar de la conducción.

Precisamente esa cifra, 184 CV, es la novedad más importante que incorpora el MX-5 2019. Son 24 CV más de potencia (el anterior MX-5 2.0 ofrecía 160 CV), que vienen acompañados de una mejora del par máximo y una mejor entrega en toda la gama de revoluciones. Así, este motor atmosférico se nota más lleno y potente y permite que el coche acelere más rápido (hace el 0 a 100 km/h en 6,5 segundos, frente a los 7,5 del modelo vendido hasta ahora). Por lo tanto, este dos litros ofrece mejores prestaciones y permite exprimir mejor las bondades del chasis, ya conocidas, algo que será del agrado de los que busquen un MX-5 lo más deportivo posible.

Los ingenieros japoneses han mejorado en este motor básicamente la combustión y han retocado la admisión y el escape. El nuevo MX-5 de dos litros también suena algo diferente, más “lleno” que el anterior. Sube hasta las 7.500 vueltas (6.800 el modelo saliente) y el par máximo mejora en 5 Nm. Aún así, hay que reconocer que no se trata de uno de los biplaza con el sonido más excitante del mercado. Es más bien discreto.

La otra versión disponible monta el motor de 1.5 litros, que recibe parte de las mejoras en cuanto a combustión y reducción de la fricción que se han aplicado al propulsor de dos litros. Esto permite subir su potencia 1 CV ( de 131 pasa a 132) y 2 Nm de par máximo (de 150 Nm pasa a 152 Nm), algo que será apenas perceptible, la verdad.

Ambos motores permiten que el coche cumpla los requisitos de la normativa WLTP y la Euro6 D Temp y, por lo tanto, no sufren cambios en su tramo impositivo.

En el chasis no hay modificaciones, y el MX-5 se sigue notando como un deportivo muy ágil, ligero, muy divertido de conducir en carretera, cuanto más revirada mejor. Tiene una excelente relación peso/potencia, ahora mejorada en la versión 2.0 gracias al incremento de CV. También tiene un reparto de pesos ideal al 50% entre ejes y un motor de gasolina con una entrega progresiva, que hace muy fácil manejar el coche.

Como siempre os recalco en este y otros modelos de Mazda, la posición de conducción es perfecta para conducir a buen ritmo, con alegría. El volante ofrece un buen agarre, la dirección tiene una respuesta muy directa y suficientemente informativa y el cambio de marchas se sitúa en una posición ideal, elevada. Además, tiene un tacto excelente, es muy rápido y agradable de accionar.

Todo esto ya es conocido en este modelo (aquí tenéis una completa videoprueba que hicimos poco después del lanzamiento del modelo) pero ahora posición de conducción, de talante deportivo, puede ser ajustada ahora con mayor precisión ya que Mazda ha decidido incorporar, por fin, volante regulable en profundidad, no sólo en altura. Una novedad que se ha hecho esperar.

El restyling aplicado en el MX-5 también incluye la ampliación del grupo de sistemas de ayuda a la conducción. En total, son 5 los sistemas introducidos como novedad: el sistema de asistencia a la frenada en ciudad ; el de asistencia a la frenada en ciudad trasero, que detecta vehículos y obstáculos situados por detrás ; el detector de fatiga ; el sistema de reconocimiento de señales de tráfico y la cámara de visión trasera. A estos hay que añadir el sistema de alerta de cambio de carril, que viene de serie a partir del acabado Edition, el control de ángulo muerto y el detector de tráfico trasero (que se incluye en el acabado Zenith).

El acabado más básico del MX-5 es el Origin, sólo disponible en versión con capota de lona, que tiene un PVP de 25.320 euros, que se quedan en 21.729 euros con las promociones incluidas (2.000 euros de descuento aportado por la marca y 1.591 euros menos si se finanza la compra).

El precio de entrada de este biplaza sigue siendo, por lo tanto, muy competitivo frente a su competencia: BMW 220i Cabrio, Mercedes-Benz SLC 200 Roadster, Audi TT 1.8 Roadster, Mini Cooper Cabrio o Fiat 124 Spider.

Desde el acabado más básico se incluye el sistema de infoentretenimiento MZD Connect que a partir de ahora ofrece compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay, de serie. Esta novedad, largamente solicitada por los usuarios de la marca, no sólo se aplica al nuevo MX-5, sino también al resto de la gama de modelos del fabricante japonés. Aquellos clientes que ya son propietarios de un Mazda y disponen del MZD Connect instalado, podrán actualizarlo para tener tambien esa compatibilidad con los smartphones. El precio de la actualización se sitúa entre 250 y 300 euros.

Otros cambios en el equipamiento afectan a la versión Soft Top, la de capota de lona, que ahora viene con una pantalla TFT de 4,5 pulgadas entre los relojes del cuadro de instrumentos. Esta versión también incluye unas nuevas llantas Black Metallic en los acabados Origin y Evolution.

Mazda también lanza una versión especial Nappa Edition de esta carrocería Soft Top, que incluye cuero Nappa marrón en los asientos de cuero, el revestimiento interior de las puertas y la moldura del salpicadero. Para ir a juego, la capota de lona también es marrón.

Excepto el nuevo diseño de las llantas, no hay más cambios estéticos en un coche que sigue siendo muy bello, en mi opinión. El diseño Kodo aplicado por los japoneses en sus automóviles da muy buen resultado, y esto se traduce en un buen nivel de ventas. Según datos facilitados por la propia marca, el Mazda MX-5 fue el deportivo más vendido en España en 2017, con 589 unidades, justo por detrás del Ford Mustang y el Fiat 124 Spider. El 65% de los MX-5 matriculados son RF, con hard top y la gran mayoría (70%) se piden con el motor de dos litros, el más potente, y con el acabado tope de gama, Zenith. Esta versión sitúa su PVP en 32.820 euros, que con las promociones incluidas queda en 29.229 euros. Por encima de este acabado todavía se sitúa el Zenith Nappa Edition, que cuesta 33.720 euros (30.129 euros con promociones).

Superar los 30.000 euros en un coche « de capricho », que tiene un carácter claramente deportivo y una utilidad limitada (sólo pueden viajar dos personas y para largos desplazamientos hay coches mas confortables) puede parecer algo absurdo, pero nada más lejos de la realidad. Este siempre ha sido un coche diseñado para personas que saben lo que buscan, generalmente jóvenes con un estilo de vida acorde con las propiedades y el carácter del coche, que quieren experimentar sensaciones similares a las que ofrecían los deportivos europeos, mayoritariamente británicos, de los años 50 y 60. Y en este sentido, el Mazda MX-5 sigue siendo único.

PVP:

Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 1.5 (132CV) Origin Navi 6MT 25.720 € Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 1.5 (132CV) Evolution 6MT 26.920 € Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 1.5 (132CV) Evolution Navi 6MT 27.320 € Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 1.5 (132CV) Zenith 6MT 28.120 € Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 1.5 (132CV) Nappa Edition 143 6MT 28.720 € Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 1.5 (132CV) Zenith Sport 6MT 29.520 € Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith 156 6MT 30.320 € Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Nappa Edition 6MT 30.920 € Mazda MX-5 ST SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith Sport 6MT 32.120 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (132CV) Evolution 6MT 29.420 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (132CV) Evolution Navi 6MT 29.820 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (132CV) Zenith 143 6MT 30.620 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (132CV) Zenith Nappa 6MT 31.020 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (132CV) Zenith Nappa 6MT 31.520 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (132CV) Zenith Sport 6MT 32.520 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith 6MT 32.820 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith Nappa 6MT 33.220 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith Nappa Safety 6MT 33.720 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith Sport 6MT 35.120 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith 157 6AT 34.620 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith Nappa 6AT 35.020 € Mazda MX-5 RF SKYACTIV-G 2.0 (184CV) Zenith Sport 157 6AT 36.520 €