238 CV/litro. Esta es la relación potencia/cilindrada del nuevo Mercedes-AMG C63 S E Performance, que se situa como el coche con motor de gasolina de 4 cilindros más potente del mundo.
Su motor de dos litros ofrece nada menos que 476 CV, a los que se suman otros tantos que obtiene con la ayuda de un motor eléctrico situado en el eje trasero, que proporciona una potencia conjunta de 680 CV y un par máximo de 1020 Nm.
Sí, el nuevo Mercedes-AMG C 63 S E Performance es un híbrido, y se sirve de la tecnología derivada de la F1 para obtener unas prestaciones de infarto: hace el 0 a 100 km/h en 3,4 segundos y alcanza los 280 km/h si se opta por la deslimitación que viene de fábrica.
El Mercedes-AMG C63 S E Performance trasmite la potencia de su motor eléctrico y su motor térmico a las 4 ruedas (tecnología 4Matic) y lo hace de forma instantánea, según señala la marca alemana. Por un lado, el motor de gasolina cuenta con un turbo asistido de forma eléctrica que elimina el lag en la respuesta. Por otro, el motor eléctrico, situado en el eje trasero, actúa sobre este de forma directa, y en el caso de que el sistema detecte una pérdida de tracción, traspasa el par motriz al eje delantero. Este motor eléctrico se acompaña de una pequeña caja de cambios de 2 velocidades, que adapta la relación según la velocidad del coche.
Chasis muy prestacional
La suspensión también adapta su tarado de forma automática e instantánea. Todo esto pronostica una dinámica de conducción con mucha motricidad y efectividad en carretera.
El chasis de este compacto deportivo incorpora otra novedad: el eje trasero con dirección. Además, esto facilita la acción de uno de los modos de conducción más divertidos, el modo Drift, que permite el deslizamiento del eje trasero a voluntad y de forma extrema.
Pequeña batería muy eficiente
Mercedes-AMG utiliza una batería de tamaño reducido y 6,1 kwh de capacidad, suficiente para ofrecer el apoyo necesario al motor de combustión, y a la vez, permitir una autonomía en modo eléctrico de 13 kilómetros. El propósito de este Mercedes-AMG no es ser un híbrido convencional, sino más bien comportarse como un híbrido en momentos puntuales, pero sobre todo, aprovechar esta tecnología para ofrecer las máximas prestaciones.
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Esta batería está situada en la parte posterior del coche, y se sirve de un sistema de refrigeración innovador que refrigera celda por celda a través de un liquido no conductivo eléctricamente.
Mercedes-AMG ha estudiado especialmente el sonido que debe emitir este híbrido, tanto en el exterior como en el interior. Un sonido artificial avisa de la presencia del coche cuando se acerca en modo eléctrico, y por otro lado, cuando funciona el motor de combustión, el sonido de escape se amplifica en el interior del habitáculo en función del programa de conducción escogido.
Este compacto también ofrece hasta 5 programas diferentes de actuación en el sistema regenerativo. Dos de ellos permite eliminar prácticamente el nivel de resistencia del sistema para obtener sensaciones de conducción “convencionales”. Uno de ellos está pensado para un uso del coche en la vía pública y el otro para un uso en circuito.
Cambian las dimensiones
El Mercedes-AMG C63 S E Performance acompañará en la gama a su hermano pequeño, el Mercedes-AMG C43 4 Matic, aunque exteriormente se diferencia de este y del resto de la Clase C por su mayor anchura entre ejes, mayor longitud y batalla más larga.
Es 7,6 cms más ancho en el eje delantero, 5 centímetros más largo y tiene una batalla 1 centímetro superior, por lo que las proporciones son más deportivas. Por primera vez, Mercedes-AMG ha optado por colocar el logo de la marca en el capó, no en la parrilla. Equipa de serie llantas de 19 pulgadas, de 20 en opción. Se vende en carrocería cupé o Estate, a un precio todavía no comunicado.
Simplemente perfecto para mi gusto. Cuanto vale