Mercedes Clase S Coupé y Cabrio: nuevos detalles

Después de que Mercedes-Benz renovara considerablemente la Clase S, y más en concreto, la versión berlina de este modelo de alto lujo, ahora le llega el turno a las variante cupé y cabrio. Ambas incorporan los nuevos sistemas de asistencia a la conducción ya vistos en el Clase S berlina, las mejoras introducidas en el puesto de conducción (entre ellas, nuevos volantes), el control de confort Energizing y la última generación de sistemas de infoentrenimiento.

La actualización también afecta al exterior del coche, y destacan las luces traseras con tecnología OLED(Organic Light Emitting Diode), que brillan con mayor o menor intensidad en función del movimiento del coche o la claridad del entorno, y cuyos 66 pequeños elementos parecen flotar en el piloto trasero (ver foto).

Los diseñadores alemanes han introducido pequeños cambios en el frontal, que ahora incluye un splitter cromado y unas tomas de aire un poco diferentes. También se ha modificado ligeramente el diseño de los faldones laterales, así como el de la salida doble de escape. Estos cambios también afectan al acabado AMG Line, que incorpora nuevos faldones delante y detrás y dos nuevas llantas de 20” y 10 radios, que pueden ser de color gris titanio o negro brillante, pulidas a alto brillo.

El interior también recibe algunos cambios. El cliente puede escoger ahora entre tres nuevos tipos de madera de adorno y entre tres nuevos tapizados de cuero. El cuadro de instrumentos cuenta con las dos pantalla de 12,3” que se unen mediante un cristal cobertor. Muestra relojes digitales y los gráficos pueden personalizarse según tres programas: Clásico, deportivo y avanzado. El volante tiene nuevos mandos de control táctil, que reaccionan a los movimientos de los dedos como en la pantalla de un smartphone. Se amplían los comandos de voz, y ahora se puede controlar la climatización, la calefacción, la ventilación de los asientos, el alumbrado interior o el ambientador mediante órdenes vocales.

Estas nuevas versiones cupé y cabrio del Clase S pueden equiparse opcionalmente con el control Energizing, que combina las funciones del aire acondicionado, los asientos y los efectos de luz y musicales para crear diferentes ambientes dentro del coche que el conductor puede elegir en función de su estado de ánimo.

Por supuesto, esta renovación del Clase S cupé y cabrio introduce todos los sistemas de asistencia y ayuda a la conducción vistos en el Clase S berlina, entre ellos el asistente activo de distancia Distronic con asistente de dirección.

Opcionalmente puede pedirse el Magic Body Control con función de inclinación activa en curvas, que hace que la carrocería se incline 2,65º hacia el interior de la curva para reducir las fuerzas transversales que afectan al coche y a sus ocupantes.

La gama de motores se renueva con un nuevo V8 biturbo con sistema de desconexión de cilindros que ofrece 469 CV, y que se monta en las versiones S 560 Coupé y S 560 Cabrio. El segundo motor disponible es un V8 biturbo de 4.0 litros que entrega 612 CV, y que se monta en la versión Mercedes-AMG S63 4Matic. Se asocia a un cambio AMG Speedshift de 9 velocidades. Finalmente, la gama se completa con un motor AMG V12 biturbo de 6 litros y 630 CV, que monta la versión tope de gama Mercedes-AMG S65, tanto en carrocería cupé como cabrio.

Estas versiones de la Clase S de AMG se identifican por la nueva parrilla Panamericana, con barras cromadas verticales. El frontal de estas versiones Mercedes-AMG tiene sus entradas de aire enmarcadas en negro de alto brillo y un splitter frontal. Las llantas de aleación son de 19 pulgadas de serie en el S63 4Matic Coupé y Cabrio y de 20 pulgadas en el S65 Coupé y Cabrio. Estas llantas montan unas pequeñas cubiertas que simulan un cierre central de competición, así como un logo AMG integrado.

También por primera vez estas versiones más potentes montan el nuevo cambio automático AMG Speedshift MCT de 9 velociades. La variante S65, no obstante, transmite su potencia a través de un cambio AMG Speedshift TCT de 7 relaciones.

Equipan de serie el tren de rodaje AMG Ride Control con amortiguación adaptativa regulable, que en el caso del S65 Coupé incluye además amortiguadores de ajuste progresivo que se sirven de una cámara estereoscópica que detectan con antelación las irregularidades de la calzada.

Finalmente, destacar que el S63 4Matic Coupé y Cabrio pueden equiparse con la función launch control (denominada Race Start) o el sistema de escape AMG Performance.

Mercedes-Benz no ha comunicado precios, ya que todavía falta por celebrarse la presentación oficial de estos modelos en el Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt.