Opel Astra: Buscando la eficiencia

El Opel Astra cambia un poco a partir de ahora, ya que recibe una pequeña actualización estética y una nueva gama de motores de gasolina y diésel de 3 cilindros. De esta manera se adapta a la normativa Euro 6d, que tanto lleva de cabeza a las marcas de automóvil.

El Opel Astra es el segundo modelo más vendido de Opel en Europa, por detrás del Corsa. Es un coche que lucha en un grupo difícil, el de los compactos del segmento C, aunque siempre ha contado con buenos argumentos para conseguir ser aceptado entre el público; especialmente el alemán, donde este modelo cuenta con un buen nivel de ventas. Y es que la tradición influye, ya que el Astra deriva del anterior Kadett, que inició su andadura comercial nada menos que en 1936. Desde entonces, se han presentado 11 generaciones de este modelo que fue diseñado para atraer al gran público.

El actual Astra, denominado internamente con el código K, data de 2015. Es una generación que ya tiene cuatro años de vida y que muy probablemente se encuentre en la fase final de su vida comercial. Por ese motivo, Opel ha considerado oportuno dar un nuevo impulso a sus características para actualizarlo frente a una competencia feroz; Y qué mejor forma de hacerlo aprovechando que era necesario renovar la gama de motores para actualizarla a la normativa Euro 6d.

Esta es la principal novedad del nuevo Astra: a partir de ahora ofrecerá versiones con motor de gasolina o diésel de tres cilindros turboalimentadas, con potencias que oscilan entre 110 y 145 CV.

A pesar de que se podría esperar que estos motores fuesen los mismos que montan otros modelos del grupo PSA, después de la reciente adquisición de la marca por el grupo francés, lo cierto es que son originales de General Motors. Concretamente, se fabrican en México para dar servicio al mercado sudamericano. Son motores muy eficientes, la mayoría de ellos con un consumo en torno a los 5 l/100 kms. y un nivel de CO2 por debajo de los 100 gr/km. En gasolina, encontramos un 1.2 Turbo con tres niveles de potencia: 110, 130 y 145 CV, unidos a un cambio manual de 6 velocidades. También hay un 1.4 con 145 CV asociado exclusivamente a un cambio de tipo CVT con 7 relaciones “virtuales”.

En diésel se vende un 1.5D con 105 o 122 CV de potencia. El de 105 CV se une a un cambio manual de 6 velocidades, mientras que el de 122CV puede también con esa caja manual o bien asociado a una nueva caja de cambios automática de 9 relaciones. Este diésel está construido en aleación ligera, tiene una baja fricción y se ayuda de un buen conjunto de elementos para reducir sus emisiones: catalizador de oxidación pasiva, inyección de AdBlue, catalizador SCR y un filtro de partículas diésel. En su versión menos potente gasta sólo 3,4 l/100 km. El de 122 CV registra 3,5 l/100 km. de media con caja manual y entre 4,1 y 4,2 l/100 km con la automática. Son cifras oficiales según ciclo WLTP, recordad. En un uso “real” del coche la cifra puede ser algo mayor, pero en cualquier caso, excelente.

Opel nos llevó a Frankfurt para probar el Astra con esta nueva gama de motores. Concretamente, conduje la versión de gasolina 1.2 de 130 CV, la 1.4 de 122 y la diésel 1.5d de 122 CV. De las tres, ninguna me convenció totalmente. Creo que limitan un tanto las buenas cualidades del chasis del Astra, al dar todas la sensación de tener una potencia algo justa, sobre todo para la versión familiar Sports Tourer, más propensa a utilizarse cargada de pasajeros o bultos. Hay que entender que es necesario adaptarse a las exigentes normativas medioambientales, y los motores de tres cilindros con turbo son ideales para reducir emisiones, gracias a su baja cilindrada y generalmente por su buen nivel de prestaciones y correcto refinamiento; Pero en el Astra estos dos últimos aspectos son mejorables.

En la versión con motor 1.2 de 130 CV se perciben algo de vibraciones y el típico traqueteo de los motores tricilíndricos, más disimulado en otros productos de la competencia; Y eso a pesar de que Opel ha instalado un eje de equilibrado contra rotante. La respuesta en bajos es correcta, pero las recuperaciones en cuarta, quinta y sexta marcha son muy lentas, muy probablemente por el largo desarrollo de la caja de cambios. Esto es lo que produce, en ocasiones, esa sensación de falta de empuje, que podría ser más evidente si viajásemos con el coche cargado. El contacto en Frankfurt se hizo, como es habitual, casi de vacío, sólo con otro compañero de la prensa de copiloto.

El 1.4 de gasolina mejora considerablemente esta sensación, ya que empuja muy bien desde bajas vueltas y resulta suficientemente elástico en todo el régimen de revoluciones. Pero tiene el inconveniente de montar un cambio CVT de tipo variador continuo, que en el momento en el que aceleramos a fondo genera la típica sensación de “resbalamiento”, que no es otra cosa que la falta de coordinación entre la aceleración real y el ruido mecánico que se produce durante la subida de régimen. Es algo típico de estos cambios, que prefieren una conducción suave y pausada. Sólo de esta manera dejan relucir un confort de marcha notable.

Finalmente, pude montarme en una versión con el motor diésel, una rareza mecánica al tener 3 cilindros. No hay muchos motores así en el mercado, y en este sentido hay que reconocer que Opel ha sido atrevida. Es quizás el motor más agradable de la gama, gracias a su asociación con la nueva caja automática de 9 velocidades, que funciona de forma rápida y precisa. Sólo cabe criticar algo de ruidos mecánicos procedentes del propulsor cuando aceleramos desde parado, que una vez a medio régimen o a velocidad de crucero desaparecen.

En Frankfurt no estaba disponible ni la versión de gasolina de 110 CV ni la de 145 CV. Esta última quizás sea la más adecuada para los que busquéis un Astra de gasolina, ya que, en teoría, esos CV de más deberían mejorar las prestaciones. Pero es algo que deberemos comprobar en una prueba más adelante y más a fondo.

El nuevo Opel Astra monta unos nuevos amortiguadores que mejoran el confort, según la marca. Y ciertamente, este es uno de los aspectos más destacados de este compacto, cuyas suspensiones muestran un perfecto equilibrio entre absorción y eficiencia en conducción deportiva. El chasis Sport, opcional, viene ahora con amortiguadores más firmes, una dirección más directa y una suspensión trasera de tipo Timonería de Watt, que permite una mejor oscilación de la suspensión frente a las irregularidades.

Por lo que pude experimentar en la toma de contacto de Frankfurt, en cualquiera de las versiones el comportamiento del coche es sobresaliente: noble, intuitivo, ágil y preciso. En el diésel se nota algo más el peso del motor en el eje delantero, pero en cualquier versión la conducción se percibe fácil y segura. Tiene un buen tacto de dirección y la suspensión es confortable y suficientemente firme para filtrar los posibles balanceos de la carrocería. Vamos, nada nuevo que no conozcamos en el Opel Astra de última generación.

Viene bien equipado con sistemas de asistencia como el lector de señales de tráfico, asistente de mantenimiento de carril con advertencia de salida de vía, indicador de distancia con el vehículo que nos precede y alerta de colisión frontal con frenado automático. Estos sistemas funcionan gracias a una nueva cámara frontal, más pequeña, que también apoya a la iluminación adaptativa matricial IntelliLux LED, una opción disponible.

Opel también ha mejorado la cámara de visión trasera, que ofrece una imagen más nítida. Viene con el nuevo sistema de infoentretenimiento Multimedia Navi Pro, con pantalla táctil de 8 pulgadas, gráficos mejorados y posibilidad de ser utilizado mediante órdenes de voz. La digitalización también llega al cuadro de instrumentos, aunque parcialmente. Una pantalla central de gran tamaño se acompaña de dos relojes analógicos a los lados.

El equipamiento se ha revisado y ahora se incluye un sistema de carga inalámbrica para el móvil, que queda sujeto en la consola central mediante un sistema de gomas. Opcionalmente puede pedirse un sistema de sonido Bose con 7 altavoces, incluido un subwoofer Richbass, que ocupa espacio en la base del maletero.

Otro aspecto destacado en el nuevo Astra es que viene con parabrisas calefactable.

Reconoceréis al nuevo Opel Astra por sus pequeños cambios en el frontal, cuya parrilla enlaza con el nuevo grafismo de los faros LED. Esta parrilla ahora es activa, es decir, abre y cierra sus patas superior e inferior según interese refrigerar o reducir la resistencia aerodinámica. Opel ha trabajado mucho este aspecto, y el nuevo Astra logra un coeficiente aerodinámico de 0,26 en cualquier de sus dos carrocerías, 5 puertas o familiar. Es el coeficiente de penetración aerodinámica del añorado Opel Calibra, para que os hagáis una idea. Se ha mejorado también el flujo del aire por debajo de la carrocería y se ha reducido la altura de la carrocería hasta 1 centímetro dependiendo de la versión. Todo esto, según la marca, permite ahorrar 4,5 gr/km de CO2 en el ciclo WLTP.

Como véis, optimizar la eficiencia del Opel Astra ha sido el principal objetivo de este restyling, obligado para cumplir la normativa y dar un nuevo impulso comercial al coche.

Los PVP de las primeras versiones que llegan al mercado ya se han comunicado y quedan de la siguiente manera:

Versión 5P OPEL Astra 1.2T Manual 110 CV 21.800 € OPEL Astra 1.5D Manual 105 CV 23.500 € OPEL Astra 1.2T Manual 110 CV GS Line 23.400 € OPEL Astra 1.2T Manual 130 CV GS Line 24.100 € OPEL Astra 1.5D Manual 105 CV GS Line 25.100 € OPEL Astra 1.5D Manual 122 CV GS Line 25.200 € OPEL Astra 1.2T Manual 145 CV Elegance 28.600 € OPEL Astra 1.4T CVT 145 CV Elegance 30.100 € OPEL Astra 1.5D Manual 122 CV Elegance 28.900 € OPEL Astra 1.5D Auto 122 CV Elegance 30.600 €

Versión ST OPEL Astra 1.2T Manual 110 CV 22.700 € OPEL Astra 1.5D Manual 105 CV 24.400 € OPEL Astra 1.2T Manual 110 CV GS Line 24.300 € OPEL Astra 1.2T Manual 130 CV GS Line 25.000 € OPEL Astra 1.5D Manual 105 CV GS Line 26.000 € OPEL Astra 1.5D Manual 122 CV GS Line 26.100 € OPEL Astra 1.2T Manual 145 CV Elegance 29.500 € OPEL Astra 1.4T CVT 145 CV Elegance 31.000 € OPEL Astra 1.5D Manual 122 CV Elegance 29.800 €