Porsche Exclusive Manufaktur es el departamento encargado de hacer realidad las peticiones más especiales de los clientes más exigentes. Hoy hemos visitado sus instalaciones, dentro de la factoría de Zuffenhausen, y ya de paso hemos conducido su última creación.
Hablamos del 911 Turbo S Exclusive Series. Una serie limitada a 500 unidades con un kit de potenciación de 607 CV, aerokit, pintura especial, llantas específicas y un interior igual de exquisito.
Estéticamente además de por las llantas específicas y por el color amarillo dorado de la carrocería y las franjas en carbono visto del capó delantero y del techo, el Turbo S Exclusive Series se distingue por el aerokit, un paquete aerodinámico de serie en esta serie limitada que ahora pasa a estar disponible como opción en los 911 Turbo y 911 Turbo S convencionales.
100% a medida
Sirva de ejemplo el proceso de pintado de las llantas para hacerse una idea del esfuerzo que los técnicos de Porsche Exclusive Manufaktur dedican a cada componente de sus creaciones. Parece más digno de la orfebreria que de la industria automovilística.
Primero las llantas son pintadas en color amarillo dorado, el mismo de la carrocería. Luego son pintadas en color negro. Tras 4 días de secado son introducidas en una cámara especial donde un láser se encarga de eliminar cuidadosamente la pintura negra sólo del contorno de las llantas para así sacar a relucir el dorado que hay debajo.
Las líneas de color amarillo dorado que se aprecian en los asientos también son fruto de un proceso de compleja ejecución. Bajo el cuero negro hay un tapizado de color amarillo dorado que aparece cuando se perfora.
Si lo tuyo no es el color dorado Golden Yellow Metallic mereces saber que también está disponible en blanco Carrara White Metallic, gris Agate Grey Metallic, rojo Guards Red, azul Graphite Blue Metallic y negro Black.
Allá donde mires de la carrocería encuentras carbono. Retrovisores, taloneras, entradas de aire de las aletas posteriores, alerón trasero, difusor… El nivel de ejecución de estas piezas es de primer nivel. Las tramas de la fibra compuesta siguen un mismo patrón y están ordenadas.
Porsche Design Timepieces ofrece un reloj creado expresamente para la ocasión. Está disponible en 24 combinaciones posibles, 4 para cada uno de los 6 colores que conforman la gama del coche. Una pieza diseñada en Austria y manufacturada en Suiza.
A través del reverso transparente podemos ver una reproducción a escala de la llanta del Turbo S Exclusive Series, se trata de la pieza que cuenta con un peso y que ayuda a dar cuerda de forma automática cada vez que movemos la muñeca. Se fabricarán 500 unidades que sólo los clientes del coche podrán comprar por 10.000 euros cada uno.
Para el maletero de 115 litros hay un juego de maletas a medida confeccionado en las mismas especificaciones cromáticas que el coche. Un extra muy chic que sale por la módica cifra de 6.000 euros.
Conducimos el coche de Goodwood
Cuatro fueron las unidades de prueba que Porsche Exclusive Manufaktur puso a nuestra disposición para probar. En la misma puerta del Museo Porsche nos tocó coger la llave del mismo coche que días antes había sido pilotado a fondo en el Festival of Speed de Goodwood con el dorsal número 341.
Nada más salir del número 1 de la Porscheplatz de Zuffenhausen nos dirijimos a la Autobahn A81 dirección Wurzburg. A finales del año pasado pude probar extensamente un 991.2 Turbo S en carretera con lo que tenía ganas de hincarle el diente en la autopista sin limitación alemana.
Lamentablemente lo de la Autobahn ya no es lo que era. Retenciones de tráfico, interminables tramos de obras, limitaciones horarias, conductores que van a 120 km/h por el carril izquierdo cuando no hay limitación y nadie a su derecha…
Si la fortuna te sonríe puedes dar con un tramo libre con poco tráfico de lo contrario es difícil disfrutar de la única red de autopistas sin limitación de velocidad de Europa. Una verdadera lástima cuando estás al volante de un 911 Turbo de 607 CV.
La punta teórica de este Turbo S Exclusive Series es de 330 km/h, lamentablemente debido un poco de todo lo que hemos citado en las líneas de arriba no pude pasar de 289 km/h. Lo más destacable es la estabilidad a estas velocidades. Tanto el grip mecánico como el aerodinámico hacen que se muestre noble e incluso cómodo.
La verdad es que llega a 250 km/h a un ritmo pasmoso, pero por encima de este punto no empuja con la misma virulencia. También hay que decir que las ventanas de poco tráfico fueron escasísimas y que sólo teníamos una hora para probarlo. Con más tiempo habríamos pasado de 300 km/h sin problemas.
Es precisamente en este tipo de circunstancias cuando puedes sacar partido al equipo de frenos carbono-cerámicos. En un abrir y cerrar de ojos pasas de 250 km/h a 140 km/h. Es casi tan impresionante su capacidad de deceleración como la de aceleración.
La dirección tiene un tacto exquisito. Guiar semejante avión a esas velocidades es como coser y cantar. Ofrece la dureza justa y un niel de precisión que sólo Porsche es capaz de lograr.
La caja de cambios PDK de 7 relaciones ofrece un modo manual 100% que te permite apurar las marchas hasta el corte. También deja bajar de velocidad de forma alegre, incluso en esos puntos en los que justo cuando reduces a tercera las revoluciones del motor llegan casi al máximo. El modo automático va bien pero el manual es una gozada.
En resumidas cuentas
Cada una de las 500 unidades del Exclusive Series tiene un precio en España de 298.115 euros. Un plus de 62.541 euros sobre lo que cuesta un 911 Turbo S sin ningún extra.
Una vez conoces el esmero y la pasión que se ha dedicado hasta el más mínimo detalle de esta serie limitada te das cuenta que no es tan caro como parecía al primer vistazo.
Se trata de un coche muy especial que posiblemente se terminará convirtiendo en una pieza de colección. Como ya lo son los 911 Sport Classic o 911 Speedster de la serie 997 que también fueron obra de Porsche Exclusive.
Ayer tuve la suerte de ver un 911 Turbo S en gris grafito, que no dejó indiferentes a todos los pudimos presenciamos. Que maravilla de coche sin duda alguna. Fuera de este contexto, una pena que un superdeportivo de esta características y de precio tan sumamente elevado, toque la fibra de los mas pudientes con asuntos tan banales como los que se citan, incluido el reloj edición especial que se atreven a cobrar a 10k como si fuese un Omega De Ville, que ya les gustaría. Está claro que el enfoque ya no son las prestaciones, la perfección y otras que caracterizaron a la firma. Ahora ofrecen envoltorios que nada tienen que ver con el mundo del motor. Cría fama y échate a dormir. Sinceramente que para asuntos de este calibre ya tenemos a Rolls Royce, Bentley, Bugatti, etc.. Para amantes del motor, los circuitos y la deportividad, donde esté un Nissan Gtr, aunque sea sin reloj de 10k y sin sportchrono, que se quiten estos señores con enfoque Puerto Banús.