La cita de Frankfurt será testigo del estreno mundial del renovado coupé, que aterriza con motores más potentes y eficientes. Su línea estética gana en agresividad pero mantiene el espíritu de una trayectoria de casi medio siglo.
A nivel de diseño, el modelo resalta por su silueta plana y alargada y unos rasgos que muestran su inconfundible carácter poderoso y elegante. A las líneas atléticas habituales del deportivo alemán se suma la posibilidad de montar llantas de hasta 20 pulgadas, que refuerzan su llamativa apariencia. Otro de los cambios estéticos se encuentra en los retrovisores exteriores, que abandonan el triángulo de la ventanilla y ahora se ubican en el borde superior de la puerta.
Una vez en el interior del 911 Carrera se observa que los diseñadores de la casa alemana se han inspirado en la distribución de su "hermano" Carrera GT. Esto se percibe en una consola central más elevada hacia delante y la posición más alta de la palanca de cambios, que queda así más próxima al volante. No faltan aspectos típicos en la marca de Stuttgart como el arranque a la izquierda del volante o el panel de mandos de cinco esferas.
Estrena mecánica
El 911 Carrera monta un nuevo motor bóxer de 3.4 litros y 350 CV que, engranado a la comentada transmisión de doble embrague PDK, registra un consumo de 8,2 litros cada 100 kilómetros. De esta manera, la rebaja con respecto a su antecesor es de 1,6 litros. Debe remarcarse que, en materia de emisiones, consigue 194 gramos de CO2 por kilómetro, convirtiéndose en el primer deportivo de la firma de Stuttgart en situarse por debajo de 200 g/km.
Un peldaño por encima aparece el Carrera S, al que da vida una mecánica bóxer de 3.8 litros y 400 CV. Junto con el cambio PDK, el consumo es de 8,7 litros cada 100 km, o lo que es lo mismo, 1,5 litros menos que el modelo actual pese a sus 15 caballos adicionales. Registra unas emisiones de 205 g/km de CO2. En lo que respecta a prestaciones, el 911 Carrera con cambio de doble embrague pasa de 0 a 100 Km/h en 4,6 segundos, que pueden quedarse en 4,4 si se equipa el paquete opcional Sport Chrono. En el caso del Carrera S, la cifra se recorta hasta los 4,3 segundos, o 4,1 si optamos por el mismo paquete.
En busca de la máxima eficiencia
Suscríbete a la newsletter
Si quieres estar al día de nuestras noticias, tienes que tener una cuenta en coches.net.
Para rebajar consumo y emisiones se utilizan sistemas como el Start/Stop, la gestión térmica, el sistema eléctrico de recuperación de energía y el cambio manual de siete velocidades. Además, si ambos vehículos se combinan con la transmisión opcional de doble embrague, la marcha engranada se desacopla para minimizar rozamientos al rodar por pendientes favorables sin pisar el acelerador. Tampoco hay que pasar por alto la nueva dirección electromecánica ya que, no sólo aporta una mayor sensación de control, sino que también contribuye al ahorro de combustible.
Derroche de agilidad
La nueva generación del mítico Porsche mejora en el capítulo dinámico gracias a numerosas aportaciones. El 911 Carrera ha estirado su batalla en 10 centímetros y ha reducido su altura. Asimismo, incorpora un nuevo eje trasero y la vía delantera es ligeramente más ancha, gracias a lo cual el vehículo se asienta aún mejor sobre el asfalto y aprovecha sus avances en aerodinámica. En este sentido, también se ha instalado un spoiler trasero de extensión variable más ancho que el anterior. La carrocería, que combina aluminio y acero, se ha renovado totalmente de forma que se ha rebajado el peso del vehículo en 45 kilos.
Los dos nuevos modelos, que estarán a la venta en diciembre, verán la luz en primicia mundial durante el Salón de Frankfurt. En lo que se refiere a precios en nuestro país, el 911 Carrera costará 99.393 euros mientras que el 911 Carrera S asciende a 115.456.
De relevancia
Destacamos: Para extraer el máximo partido
Entre los diversos sistemas de control activo concebidos para optimizar el rendimiento dinámico del modelo, destaca el Porsche Dynamic Chassis Control (PDCC), encargado de controlar el balanceo. Disponible por primera vez con el 911 Carrera S, este dispositivo se encarga de que las ruedas se encuentren siempre en la mejor posición con respecto al firme con tal de disminuir la inclinación lateral en curvas. De esta manera, la absorción de fuerzas laterales mejora considerablemente. Al contribuir directamente a la consecución de un paso por curva más rápido, este sistema supone una importante elección de cara a la conducción en circuito.
quien se acordara de gtr dentro de 10 años