Frescura eficiente
Con el Captur, los diseñadores de Renault han buscado unir las ventajas de un monovolumen, de un SUV y de un utilitario dando lugar a un crossover urbano de 4,12 metros de longitud práctico, polivalente y de atractivo diseño. Basado en la plataforma del Clio, logra una conducta dinámica bastante semejante, con un buen nivel de comodidad general y con la posibilidad añadida de que nos permite realizar alguna que otra escapada fuera de asfalto gracias a su mayor altura libre siempre y cuando nos limitemos a pistas sencillas.
El modelo del fabricante del rombo, que se produce en la factoría de la marca francesa de Valladolid, se distingue entre otros rasgos por ese toque diferencial que le puede aportar la carrocería bitono. En esta ocasión presentamos la novedad más reciente de la gama, que no es otra que la llegada de la transmisión automática EDC al motor 1.5 dCi de 90 CV (aquí tenéis la videoprueba de este mismo modelo pero con caja de cambios manual).
En general, el Captur tiene un nivel de precios muy razonable que incluso puede hacer dudar a más de un potencial comprador del Clio pues en la combinación diésel automática probada con el acabado tope de gama (20.850 euros de serie) la diferencia entre ambos es de 1.450 euros. Con esta ambiciosa política de precios lucha de frente con competidores como el Peugeot 2008, el Nissan Juke o el Opel Mokka.
Adopta la nueva línea de Renault
Lo primero que cabe reseñar del Captur es su apariencia atlética lograda gracias a unas formas algo musculosas. Cuenta con un expresivo frontal dominado por el logotipo del rombo de considerables dimensiones con fondo negro brillante, integrándose en la línea de diseño de los nuevos modelos de Renault. De la zona inferior hay que destacar la presencia de protectores cuyo objetivo es reforzar su “look” robusto y de aires aventureros.
En lo que se refiere a su silueta apreciamos una línea de cintura sutil que resalta sus volúmenes así como unos pasos de rueda muy definidos. No hay que pasar por alto la considerable inclinación del parabrisas ni las generosas llantas de 17 pulgadas de vistoso diseño que, opcionalmente, pueden ser de color negro como en nuestra unidad (100 euros). En la parte trasera el protagonismo se lo llevan las luces de orientación horizontal que quedan partidas en dos por el portón del maletero.
Si bien puede elegirse el mismo color para todo el exterior del vehículo, uno de los rasgos característicos de este modelo lo encontramos en las múltiples combinaciones bitono en contraste que están disponibles. En el caso de nuestra unidad, combinaba la carrocería de color Naranja Arizona con el techo, los montantes del parabrisas y los retrovisores de color Blanco Marfil (combinación que tiene un precio añadido de 395 euros).
Práctico y modulable
Una vez que nos acomodamos en el puesto de mando del Captur comprobamos que nos proporciona una posición más elevada de la que cabe esperar de un turismo, haciendo honor a su naturaleza crossover. Ello nos otorga un mayor dominio visual sobre las circunstancias del tráfico. El asiento es confortable, espacioso y nos permite adoptar la posición más cómoda al volante de forma sencilla. En cuanto a la calidad de acabados, debemos subrayar la buena terminación general y el uso de ciertos materiales agradables al tacto.
La habitual guantera da lugar en el Captur a un cajón portaobjetos denominado Easy Life que ofrece un volumen superior al que suelen ofrecer las guanteras convencionales así como un acceso más fácil. No obstante, será más práctico si el asiento del acompañante va desocupado. En caso contrario, la apertura del cajón obligará al ocupante a hacer ciertas contorsiones con las piernas.
Los pasajeros de la segunda fila de asientos se benefician de un buen espacio para las rodillas, que además se puede graduar gracias a la posibilidad de desplazamiento longitudinal de 12 cm del asiento. También disponen de una considerable altura al techo. En cualquier caso, y para lograr un mayor confort, es más recomendable que en estas plazas viajen sólo dos ocupantes. El carácter funcional del vehículo se observa en detalles como la gran cantidad de espacios portaobjetos distribuidos por el habitáculo o la tapicería desmontable que permite ser lavada.
Según la posición de los asientos traseros, la capacidad de carga del maletero podrá ir de los 377 a los 1.235 litros. Con el objetivo de hacer más modulable esta zona del vehículo, en el maletero contamos con una bandeja específica con la que podemos dividir el espacio según las necesidades de cada momento.
En el capítulo del equipamiento, cabe remarcar que hemos probado una unidad con el acabado máximo Zen que dispone de serie, entre otros elementos, de control de estabilidad, iluminación diurna de tipo LED, faros antiniebla con función de giro, tarjeta de apertura y arranque, asistente de arranque en pendiente, ordenador de a bordo, regulador de velocidad, tarjeta de apertura y arranque, volante de cuero, climatizador automático, sensor de lluvia y sistema multimedia MediaNav con pantalla táctil de 7 pulgadas y navegador.
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Eficiente diésel con cambio de doble embrague
Bajo el capó del Captur que hemos probado se encuentra la mecánica 1.5 dCi de 90 CV, la única alternativa diésel de la gama del todocamino francés. Este motor proporciona una capacidad de aceleración más que aceptable, si bien debemos tener en cuenta que su objetivo no es generar un nivel prestacional impresionante. En cualquier caso, cabe señalar que se comporta de forma muy equilibrada y tiene una buena entrega de fuerza en la zona baja del cuentarrevoluciones. Ello le permite al vehículo desenvolverse con bastante soltura.
Hace apenas unos meses Renault incorporó la posibilidad de escoger una variante automática con la transmisión EDC de doble embrague de seis velocidades (cuyo sobreprecio con respecto a la versión manual es de 1.400 euros) y que ya estaba disponible junto al motor de gasolina de 120 CV. Este cambio funciona de forma rápida y suave, lo que hace que el salto de marcha se produzca con una notable efectividad. Cuenta con un modo secuencial que se gestiona únicamente desde la palanca (no tiene levas en el volante). Si escogemos este modo tendremos más libertad a la hora de escoger marcha pero los cambios se producirán de forma algo menos rápida ya que se nota en exceso el "parón" en la entrega de potencia del motor.
El cambio no acaba de funcionar excesivamente bien en las retenciones y, sobre todo, en las aceleraciones fuertes. Al pisar el gas para una recuperación rápida, el cambio baja todas las marchas necesarias -incluso más de lo que debería- para buscar la máxima aceleración pero luego, el control de tracción interviene y para de golpe al entrega de potencia. La sensación es muy extraña ya que parece que el coche va a salir lanzado -el motor se revoluciona mucho al entrar la marcha más baja posible- pero luego, apenas se mueve de sitio hasta que el control de tracción se ha hecho con las riendas de la entrega del par y autoriza que el coche avance. El resultado es que hay que dar gas con suavidad para evitar que el coche meta marchas bajas que condicionen la adherencia.
El consumo es una de las ventajas de esta versión que, si bien es algo superior al de la variante manual, no registra unas diferencias demasiado significativas. Y es que, mientras que el dCi de 90 CV con cambio manual de cinco velocidades marca una media de 3,7 l/100 km, esta alternativa automática registra un valor de 3,9 litros, a lo que contribuye el modo Eco de serie.
La media extraída tras nuestra prueba fue de 5,0 litros, una cifra buena si tenemos en cuenta que alternamos tramos urbanos con autovía, carreteras reviradas y pistas forestales. En cuanto a prestaciones, las cifras no son tan destacables, pues para pasar de 0 a 100 km/h necesita 13,5 segundos y dispone de una velocidad punta de 170 km/h. Los que quieran un vehículo dinámico de corte ligeramente deportivo deberán orientar su elección hacia otros modelos.
Comodidad inspirada en el Clio
Dinámicamente, el Captur demuestra desde el primer momento que se encuentra muy cercano al Clio, pues ambos están basados en la misma plataforma. A pesar de que el crossover cuenta con una altura libre mayor apenas se aprecian variaciones ya que el automóvil se caracteriza por una gran estabilidad y un comportamiento muy noble en líneas generales. Los balanceos de la carrocería son reducidos, lo que se consigue gracias a un chasis bastante efectivo.
Cabe comentar que la suspensión en ocasiones tiene una reacción algo seca al superar ciertas irregularidades como por ejemplo las juntas de dilatación de las autopistas. De todas formas, el buen grado de confort de marcha general se hace evidente al movernos tanto por carreteras de montaña como por grandes rectas, por las que pone de manifiesto un importante aplomo. Al no tratarse de un vehículo concebido para la conducción deportiva, el control de estabilidad se deja ver a menudo si aumentamos demasiado el ritmo cuanto llega la hora de enlazar curvas, circunstancia en la que también demuestra cierta tendencia subviradora.
Por otra parte, el modelo se beneficia de un muy buen tacto de dirección, cuya suavidad y precisión ponen su granito de arena para dar una sensación de comodidad y control sobre la conducción. El Captur tiene una altura libre de 20 cm, lo que no está nada mal para su segmento, pero no nos engañemos. Pese a que nos permitirá alguna que otra excursión por pistas muy sencillas, no posee las cualidades necesarias para mayores exigencias fuera de asfalto. Y es que además de que no estamos ante un todoterreno, la marca del rombo ni siquiera ofrece la posibilidad de escogerlo con tracción a las cuatro ruedas.
Conclusión
La incorporación del cambio automático de doble embrague EDC a la variante mecánica 1.5 dCi de 90 CV supone un paso adelante en cuanto a facilidad de conducción y a confort de marcha. Además, el nivel de eficiencia es más que destacable teniendo en cuenta que su diferencia con respecto a la alternativa manual es muy baja. El modelo brinda una dinámica muy similar a la del Clio, pues está basado en la misma plataforma. Asimismo, se distingue por un habitáculo funcional, modulable y bastante espacioso. A ello hay que añadir las numerosas posibilidades de personalización estética tanto interiores como exteriores que proporciona el modelo francés.
LLevo tres años con el 1,5 dci de 90 cv y estoy encantado ....de consumo 4.7 de media desde que le compre ...y en los 70-000 km que tiene de momento ningún problema ....le hubiese quitado el start stop que de hecho se lo desconecto nda más subir y la tarjeta de aproximación .Pero la verdad es que a fecha de hoy estoy encantado con mi Captur ...lo volvería a comprar ....