Smart Fortwo y Forfour

Hace 15 años Smart presentó al mundo su revolucionaria visión del concepto de coche urbano. Durante todos estos años la marca ha ido renovando sus dos modelos Fortwo y Forfour, aunque este último dejó de fabricarse hace ya algunos años, mejorando en base a las reacciones de sus propietarios.

Más de una década después volvemos a centrar la atención en el pequeño biplaza y en su versión de mayor tamaño para cuatro ocupantes, que vuelve a estar disponible en el mercado. Como ya os hemos contado en alguna ocasión el nuevo Smart Forfour comparte plataforma y más del 60% de elementos con el nuevo Renault Twingo, una jugada de la que pueden salir beneficiadas ambas marcas.

Hace unos meses os trajimos un primer artículo sobre la nueva generación de Smart cuando nos desplazamos hasta Berlín con motivo de su presentación, donde pudimos verlos, tocarlos y donde se nos explicaron todas sus bondades. Ese artículo lo tenéis en el siguiente enlace: Smart Fortwo y Forfour y lo usaremos como complemento al que hoy os ofrecemos con motivo de esta primera toma de contacto.

Hoy por fin hemos podido conducirlos, y lo hemos hecho en todo tipo de condiciones y tipos de vía por la misma ciudad condal de Barcelona y sus cercanías, en unas bonitas rutas propuestas por la organización que nos han permitido comprobar cuánto han mejorado estos dos nuevos modelos.

Habíamos tenido la oportunidad de verlos expuestos en sitios cerrados (en el evento de Berlín y en el Salón del Automóvil de París) pero aún no habíamos comprobado qué tal lucen en su medio natural, el asfalto, y hay que reconocer que le sienta realmente bien.

El novedoso diseño de la carrocería, que sigue con el mismo concepto, reinterpreta las formas más clásicas de sus antecesores para apostar por unas formas más redondeadas y trabajadas. Ahora el Smart Fortwo parece más coche y el Forfour una atractiva alternativa a los pequeños modelos de 3,5 metros.

Rodando entre el tráfico son vistosos y simpáticos. También ayuda a esta impresión la extensa gama cromática que se ofrece para personalizar la carrocería en dos tonos o las llantas, más trabajadas que antes, que se pueden montar.

Ambos modelos comparten exactamente el mismo tipo de faros, la misma parrilla y hasta la célula de seguridad tridion tiene prácticamente la misma forma. En los dos casos destaca especialmente el concepto de voladizos extremadamente cortos, tanto en la parte delantera como en la trasera, y al incorporar el motor en la parte posterior se consigue también un frontal muy corto.

Estas características permiten a los Smart centrarse en lo que mejor saben hacer: callejear. El diámetro de giro del nuevo Fortwo establece un nuevo récord con unos increíbles 6,95 m, mientras que el Forfour se conforma también con unos extraordinarios 7,30 m. Estas cifras los convierten en las mejores opciones para moverse por calles estrechas con total normalidad.

Las cotas del Fortwo apenas varían. Conserva la misma longitud (2,69 m) y altura (1,55 m) que el modelo actual aunque crece 10 cm en anchura para ofrecer un interior más espacioso. El Forfour vuelve con 3,49 m de largo y la misma anchura y altura que el Fortwo.

La simplicidad que caracterizaba a las anteriores versiones de los modelos Smart ha pasado a mejor vida. Bueno, en parte, el estilo sigue siendo el mismo pero se ha remozado con un diseño más juvenil y nuevos equipamientos más atractivos.

El nuevo tablero de instrumentos está más trabajado y añade una pantalla LCD a color con toda la información relevante de un ordenador de a bordo. El volante multifunción con mandos integrados, disponible como opción, añade un nuevo toque de calidad.

En la consola central encontramos una radio mejor acabada que permite conectividad con nuestro Smartphone mediante una pieza opcional que sujeta el teléfono a modo de pantalla y facilita la utilización de nuestro navegador propio o de las funciones que ofrece la aplicación de Smart para Android e iOS. También como novedad se puede optar por una pantalla táctil con el sistema de infoentretenimiento R-Link de Renault.

Toda la zona del salpicadero y parte de las puertas se ha revestido en tela en las tres líneas de equipamiento disponibles. Esta superficie presenta un acabado de malla que recuerda ligeramente al que se emplea en la actualidad en el calzado deportivo (palabras de la propia marca).

Los asientos de nuevo estilo nos han resultado mucho más confortables que los anteriores. El nuevo diseño recoge mejor la espalda y presenta un mullido más suave. En el Forfour se ofrecen dos tipo de plazas traseras: por un lado está la opción de una banqueta longitudinal y por el otro la opción de montar dos asientos individuales con la parte de la banqueta plegable. En ambos casos el respaldo puede abatirse para mejorar el espacio de carga del maletero.

Y si hablamos de cargas aquí tenéis los datos que reflejan sus pertinentes fichas técnicas: el Fortwo homologa 350 litros de carga hasta el techo mientras que el Forfour propone 255 litros. Si plegamos la banqueta y los respaldos de este último la capacidad aumenta hasta unos interesantes 975 litros.

Otro dato interesante que nos llamó especialmente la atención es la apertura de las puertas traseras del modelo Forfour. Éstas abren hasta los 85º permitiendo así una entrada a las plazas traseras más cómoda o atar a un niño en su respectiva sillita de una forma más sencilla.

Durante la presentación también pudimos probar el nuevo sistema de audio premium opcional. Los seis altavoces que se montan de serie se sustituyen por otros de la marca JBL y se añade un pequeño subwoofer en el maletero para realzar los bajos. Este subwoofer puede extraerse fácilmente y dejarse en casa en caso de que necesitemos todo el espacio posible del maletero. Esta mejora tiene un sobrecoste cercano a los 600 euros.

Los dos Smart cuentan con el motor situado en la parte trasera que entrega la potencia a las ruedas posteriores. Los encargados de moverlos son tres motores de tres cilindros con cilindradas de 898 y 999 cc y potencias de 61 CV, 71 CV y 90 CV, aunque durante el lanzamiento solamente se ofrecerán los dos más potentes.

Otras novedad laa encontramos en las cajas de cambios. Por primera vez se equipa una transmisión manual convencional de cinco velocidades y para las versiones de 71 CV también está disponible el cambio automático de doble embrague de seis relaciones twinamic.

La versión de 71 CV está compuesta por un motor atmosférico de 999 cc que entrega 91 Nm de par máximo a 2.850 rpm, aunque gran parte del mismo está disponible a partir de sólo 1.000 rpm. En el Fortwo manual acelera de 0 a 100 km/h en 14,4 segundos y puede alcanzar los 151 km/h de velocidad punta. En este caso el consumo medio homologado es de 4,1 l/100 km. Si optamos por el cambio automático el consumo se reduce una décima y calca las mismas prestaciones. En el Forfour, lógicamente, los valores cambian un poco debido al mayor peso del modelo: 0 a 100 en 15,9 segundos, 151 km/h de punta y 4,2 l/100 km de consumo medio homologado.

La mecánica tope de gama equipa el motor turbo de 898 cc con 90 CV de potencia y 135 Nm de par a 2.500 rpm. Este motor equipa un turbocompresor completamente nuevo que mejora la entrega de potencia y reduce en unas décimas el consumo medio. En el Fortwo completa el 0 a 100 en 10,4 segundos y en el Forfour en 11,2, mientras que sus velocidades máximas son de 155 y 165 km/h respectivamente. En cuanto a los consumos, el biplaza homologa 4,2 l/100 km, mientras que no se han facilitado aún datos oficiales para el cuatro plazas.

La primera parte de una jornada de pruebas de dos días la realizamos íntegramente por las calles de la ciudad catalana. A bordo de los nuevos Smart Fortwo nos movimos por los diferentes barrios y lugares emblemáticos de la ciudad comprobando las bondades de circular por una gran urbe, plagada de coches, motos y calles estrechas por la zona del Born, con un coche pensado y fabricado especialmente para esto.

Empezamos subiéndonos a un modelo Fortwo equipado con el motor de 90 CV con cambio manual. Se nos hace un poco extraño el tacto del embrague, aunque excusado por un ingeniero de la marca al tratarse de modelos pre-serie. Nos lo creemos y seguimos con la toma de contacto.

Pasados los primeros kilómetros empezamos a cogerle el feeling al coche. La dirección tiene muchísima asistencia y al principio se nos hace un poco extraña aunque al poco uno se acostumbra y permite realizar maniobras con un mínimo esfuerzo. El motor empuja bien y los 90 CV mueven con tremenda soltura al Fortwo. Sin ir a por una referencia exacta en cuanto al consumo, durante este mini-test el ordenador de a bordo reflejaba 6,6 l/100 km, una cifra un poco elevada, aunque no tan descabellada si pensamos que la prueba la realizamos íntegramente en ciudad.

Tocaba ahora probar la versión de 71 CV y para ello escogimos una unidad con el nuevo cambio automático de doble embrague. Con un botón situado junto a la palanca del cambio podemos elegir entre dos gestiones distintas: S (Estándar) y E (Eco). Empezamos en el modo ecológico y comprobamos como, si la incidencia del pie en el acelerador no es muy fuerte, el cambio sube a la marcha superior en torno a las 2.000 vueltas. Su gestión es muy suave y apenas se percibe su funcionamiento. Sólo al arrancar y al pasar de primera a segunda se nota un pequeño tirón. También nos ofrece la posibilidad de gestionar los cambios de forma manual con pequeño toques a la palanca en modo secuencial.

Cambiamos al modo estándar y vemos como las marchas se estiran un poco más, aunque con el pedal del acelerador se puede ir jugando con ellas. La caja automática lee perfectamente las intenciones del conductor y anticipa o retrasa el cambio según la presión en el pedal del acelerador. Con esta configuración de motor y cambio logramos reducir el consumo hasta los 6,2 l/100 km.

También nos hemos dado cuenta de la revisión que han sufrido las suspensiones. La configuración McPherson del eje delantero tiene ahora un recorrido mayor que mejora el confort y ya no se muestra tan seca como en el modelo anterior. En el eje trasero monta amortiguadores de doble tubo y muelles helicoidales individuales que también ayudan a mejorar la conducción. Opcionalmente se puede equipar un paquete de suspensiones más deportivas que rebaja la altura en 10 centímetros y se muestran más rígidas.

La prueba del Forfour transcurrió la realizamos por los alrededores de Barcelona, en una ruta que salía desde la misma ciudad hasta la localidad de Sitges, pasando por la zona del Penedés y terminando en Castelldefels. La autopista y las carreteras secundarias de la zona fueron nuestro escenario para este segundo test.

Solamente había unidades de 90 CV con cambio manual así que no tuvimos la oportunidad de probar otras configuraciones. Cargamos las dos maletas de tipo cabina de avión en el maletero (tuvimos que mover los respaldos de los asientos traseros a la posición más vertical) y nos pusimos en marcha.

En este modelo se nota un poco el ligero aumento de peso y el coche no acelera de forma tan clara como en el Fortwo de igual potencia, aunque nos siguen pareciendo unas prestaciones más que buenas. En carretera sorprende su estabilidad al tomar las curvas, sin extraños ni acusados balanceos de la carrocería. Se nos antoja un coche muy noble al que sólo la lluvia intermitente que cayó y mojo el piso hizo que perdiera tracción en alguna ocasión al forzar el ritmo.

En autopista pudimos seguir con total normalidad los ritmos de la vía sin notar falta de potencia ni en las rampas más acusadas. Tampoco echamos en falta una sexta velocidad ya que monta una relación de cambio bastante larga y la quinta se encarga del desahogo. Lógicamente al salir de la ciudad los consumos bajan y en este caso comprobamos como el ordenador de a bordo marcaba unos aceptables 5,6 l/100 km.

El próximo 20 de noviembre es la fecha elegida para el lanzamiento de los nuevos Smart. Los precios arrancarán en 11.800 euros en el caso del Fortwo y de 12.500 euros para el Forfour, ambos casos en sus versiones básicas.

A partir de ahí contaremos con tres niveles de equipamiento: Passion (430 euros), Prime (1.490 €) y Proxy (2.210 €), lógicamente cuanto más caro más equipado. En el caso de no adecuarse lo que ofrecerán estos equipamientos a nuestros gustos personales siempre tendremos la opción de personalizar nuestros Smart al antojo de cada uno.

Algunos elementos no vienen de serie con ningún paquete, como el cambio automático, la cámara de marcha atrás, el sistema de sonido JBL o el techo practicable para el Forfour, entre otros, así que habrá que desembolsar unos euros extra si queremos tener un Smart Fortwo o Forfour "full equip".