La forma de utilizar el automóvil para los desplazamientos diarios está cambiando y lo hará de forma más intensa en los próximos años. La movilidad urbana camina hacia la conducción autónoma, el uso flexible del vehículo y la propulsión eléctrica, aspectos que quedan unidos en este nuevo concept que Smart va a presentar en el próximo Salón de Frankfurt.
El Smart Vision EQ fortwo es un biplaza de conducción autónoma, que se mueve con un motor eléctrico y unas baterías de iones de litio de 30 kWh. Se ha diseñado como un vehículo para uso compartido o car-sharing, que el usuario alquila por un periodo corto de tiempo y que incluso puede compartir con otros usuarios. La idea de Smart con este Vision EQ fortwo es que el coche esté interconectado en red, de forma que en el momento en el que el usuario solicita el servicio, sea el propio coche el que acuda al lugar en el que se encuentra, de forma totalmente autónoma. Así, el usuario evita el desplazamiento hacia el lugar donde se encuentra aparcado el coche, como se realiza actualmente.
El usuario llama al coche a través del móvil, y puede reconocer que se trata de la unidad que ha pedido gracias a que el Smart se personaliza inmediatamente: una pantalla en la parrilla frontal muestra el nombre y la fotografía del usuario. Esta parrilla también sirve para comunicarse con el entorno y, por ejemplo, ofrecer información a los peatones que cruzan la calle sobre el tráfico, el tiempo o eventos locales. Esta información también puede verse en las superficies de proyección laterales del coche.
El Smart Vision EQ fortwo no tiene puertas convencionales, sino que utiliza puertas que giran por encima del eje trasero a modo de alas.
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En el interior no hay volante ni pedales. Tan sólo una gran pantalla de 24 pulgadas que previamente se ha personalizado con los gustos del usuario, o los usuarios. Porque el viaje puede compartirse con otros pasajeros que se proponen siempre que tanto el destino como sus perfiles coincidan.
Este Smart mide 2,69 metros de largo, 1,72 de ancho y 1,53 de alto. Su estética es inconfundiblemente Smart, con sus grandes pasos de rueda y las ruedas en las esquinas, sin apenas voladizos. Es uno de los pocos aspectos "convencionales" de un coche que pretende avanzarse en el tiempo.
Se podrá ver en directo en el próximo Salón del Automóvil de Frankfurt.
