Casi un STI con carrocería break
Ya sabemos cómo funcionan los constructores japoneses en el mundo del automóvil. Suelen evolucionar su gama de productos de forma más lenta que los europeos, pero cuando lo hacen lo hacen dando un paso muy seguro. Esto es algo que también caracteriza a Subaru. No es una marca demasiado pródiga en novedades, pero cuando lanzan un nuevo modelo demuestran haber realizado un profundo trabajo sobre el mismo y un esfuerzo por ofrecer un coche lo más redondo posible, siempre por encima de las modas y acorde con la particular filosofía de la marca. Subaru es una marca bastante conservadora, no se arriesga a presentar un nuevo coche que no cuente con las características estéticas y mecánicas esperadas en la marca. No puede defraudar al importante número de incondicionales que tiene en todo el mundo.
El nuevo Subaru Levorg, que ahora lanzan al mercado español, responde a esta forma de hacer de la firma japonesa. Es un familiar de tamaño medio (4,69 metros de longitud) que mezcla el estilo deportivo característico Subaru con la practicidad de un Station Wagon, como la que ofrecía la versión familiar. Su diseño no es nada vanguardista, sino que resulta muy familiar, al derivar el frontal claramente del Subaru WRX STI. Podeís ver, por ejemplo, la parrilla hexagonal pintada en negro metalizado, con acabado cromado en su contorno, los agresivos faros y la típica toma de aire del capó, marca de la casa. La carrocería se viste con taloneras, un spoiler trasero y un difusor acabado en negro que incluye una doble salida de escape cromada. El aspecto del Levorg es aerodinámico, atlético y deportivo, curiosamente y según reconocieron responsables de la marca, más cercano a la propuesta estética que hacía el Legacy de cuarta generación que al de la quinta.
El Levorg tampoco incorpora una tecnología novedosa, ya que su mecánica se basa en el tradicional bóxer de cuatro cilindros de la marca, unido a un cambio Lineartronic de tipo CVT y montado en un chasis con tracción integral: lo habitual en Subaru. Pero esa mezcla de estética deportiva y funcional junto con la contrastada eficacia de su cadena cinemática hacen de él un break francamente interesante. Es, como todo Subaru, un coche diferente, con mucha personalidad, una elección segura para aquellos que busquen un familiar al margen de las modas y muy equilibrado en todos los sentidos.
Se posiciona a medio camino entre los dos SUV familiares de la marca: el Subaru Outback, que mide 12 centímetros más de longitud, y el Subaru Forester, que mide 10 centímetros menos de largo. Por medidas, características y precio es una alternativa al Volvo V60, el BMW Serie 3 Touring - aquí tienes una comparativa entre los dos- o el Audi A4 Avant, entre otros.
Boxer 1.6 DIT
El nuevo Subaru Levorg monta el conocido motor bóxer de 4 cilindros colocado en posición longitudinal, el mismo que podemos ver montado en el Subaru Outback, el VRX o el Forester, pero con una cilindrada inferior: 1,6 litros. El downsizing también ha llegado al bóxer de Subaru, en parte debido a las normativas sobre emisiones que presionan cada día más a los fabricantes.
Para conseguir los 170 CV que atesora, utiliza la inyección directa de gasolina asociada a un turbocompresor Honeywell de tipo Twin Scroll. Este motor, además de tener una cilindrada más pequeña, también ha sido sometido a mejoras en su gestión térmica, utiliza nuevos materiales antifricción, una cadena de distribución de nuevo diseño con eslabones más silenciosos, distribución variable y un diseño específico de las cabezas de los cilindros que le da una elevada relación de compresión: 11,0 a 1.
Con este bóxer, el Subaru Levorg eroga 170 CV entre 4.800 y 5.600 r.p.m. y un par máximo de 250 Nm entre 1.800 y 4,800 r.p.m. Tiene sistema Stop&Start para reducir su consumo, que oficialmente se sitúa en 6,9 l/100km, una cifra que considero muy optimista. En la presentación que Subaru organizó por carreteras de Tarragona, difícilmente bajó de los 10 litros, eso sí, yendo a un ritmo bastante vivo.
El Levorg viene de serie con el conocido cambio automático Lineartronic, de tipo CVT, con seis marchas prefijadas que simulan las seis relaciones de un cambio automático convencional, con sus saltos entre marcha y marcha. Es un cambio que, como todos los de tipo variador, funciona de forma extremadamente suave y silenciosa. Pero por otro lado, peca de un exceso de resbalamiento y una respuesta un tanto tardía a nuestra solicitud al acelerador, sobre todo saliendo desde parado.
Una vez suben las revoluciones y accionamos las marchas “virtuales” mediante las levas detrás del volante la cosa mejora. La transición entre relación y relación se percibe bastante rápida, y aunque el coche corre, se encuentra a faltar empuje. Hay un exceso de linealidad en la respuesta.
El Levorg nos permite escoger entre dos perfiles de conducción: , que se seleccionan mediante dos pulsadores en el volante. Cada uno de estos programas modifica la respuesta del cambio y la del motor. En el modo Intelligent se prioriza el confort y la suavidad de reacciones. En el modo Sport se agiliza la respuesta del motor y la velocidad del cambio, pero no se consigue disimular el efecto antes comentado de cierta pereza y ligera descoordinación entre el empuje que nosotros esperamos del motor y el real.
Por lo tanto, desde mi punto de vista la asociación motor/cambio es un punto a mejorar en este coche. Es una lástima, porque las prestaciones del motor bóxer son excelentes, y con toda seguridad se aprovecharían al completo con un cambio automático de tipo convertidor de par o de doble embrague o simplemente con un cambio manual. Ninguna de estas opciones está disponible.
Impecable estabilidad
Lo que sí queda fuera de toda duda en este coche, y en todos los Subaru, es el comportamiento del chasis. Es un chasis que tiene todos sus elementos colocados de forma que se consigue una excelente distribución de masas y un bajo centro de gravedad gracias, entre otras cosas, a que el motor bóxer y todos sus elementos adyacentes están situados en una posición muy inferior a la habitual.
Este chasis se construye con aceros de ultra alta resistencia que han incrementado, según la marca, un 50 por ciento la rigidez estructural respecto a la del Subaru Legacy. La suspensión, de tipo Mc Pherson delante y multilink detrás, deriva directamente de la del WRX STI, aunque tiene un tarado de los amortiguadores y unas barras estabilizadoras diferentes. Esta suspensión ofrece un buen nivel de confort y a la vez consigue limitar los balanceos de la carrocería en los cambios de apoyo. Doy buena fe de ello.
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El coche se nota muy ágil y rápido en los cambios de trayectoria y responde de forma muy directa a nuestras órdenes al volante. La dirección tiene un tacto preciso, incisivo y muy informativo. El coche traza las curvas con tiralíneas, apoyado por una transmisión total de contrastada eficacia. Esta transmisión reparte el par motriz en un 60% en el tren delantero y un 40% en el trasero, y puede hacerlo al 50% entre ejes si es necesario para garantizar la motricidad. Además, se combina con un sistema de control activo de par, que a la hora de abordar un viraje da más fuerza de impulsión a las ruedas exteriores que a las interiores para meter el coche en la curva con mayor rapidez. Todo esto suma, suma y suma para hacer del Subaru Levorg uno de los familiares más ágiles en carreteras sinuosas, y a la vez, más seguros.
Interior conocido
Este tacto deportivo de conducción, muy típico de Subaru, también se transmite a través de un volante de tres radios de reducido diámetro, que tiene el aro achatado en su parte inferior, buen grosor y un apoyo para las manos muy ergonómico. Es un detalle importante. El cuadro de relojes tiene una pantalla de 3,5 pulgadas que muestra los datos del ordenador de viaje.
Otra pantalla de 4,4 pulgadas está situada en la parte superior del salpicadero, y muestra el registro de consumo y gráficos relacionados con el funcionamiento de la tracción integral, entre otros. Finalmente, una tercera pantalla de 7 pulgadas, en posición central inferior, ofrece el menú del sistema de infoentretenimiento, incluido el navegador, de serie. Por cierto, el navegador es algo impreciso.
La sensación de espacio es correcta en cualquiera de las plazas aunque en las traseras molesta el túnel de transmisión. Son aptas, más bien, para dos personas en lugar de tres. Los respaldos son ajustables en inclinación y abatibles para ampliar la capacidad del maletero.
En un familiar como éste, la aptitud para la carga es un aspecto a tener en cuenta, y en este sentido, el Levorg ofrece 522 litros ampliables a 1446. Es algo más de lo que ofrecía el Subaru Legacy, y se sitúa entre lo mejor de su segmento. El plano de carga es bajo, lo que facilita la entrada de bultos, y hay un doble fondo para colocar pequeños objetos.
Dos acabados, muy completos
La posición de conducción es bastante elevada, quizás para favorecer una buena visibilidad hacia todo el entorno del vehículo, que es buena. El coche equipa cámara de marcha atrás, sistema de detección de tráfico posterior cruzado, sensor de ángulo muerto y alerta de cambio de carril en cualquiera de las dos versiones disponibles: Sport Plus o Executive Plus.
El climatizador bizona, la entrada y arranque sin llave, el navegador, los asientos eléctricos y calefactables, el asistente de luz de carretera o el sistema Si Drive de modos de conducción vienen de serie en los dos acabados.
El más completo, el Executive Plus, monta llantas de aleación de 18” en lugar de 17”, asientos de cuero deportivos, techo solar eléctrico, pedales de aluminio, parrilla frontal en color negro, ópticas frontales oscurecidas y costuras azules, entre otros.
Este acabado tope de gama es el que se va a vender de forma natural en nuestro país, a un precio de tarifa de 36.000€, que con la campaña de promoción se queda en 31.900€. El Sport Plus se suministrará bajo pedido, a un PVP de 32.900€, que se quedan en 29.900€ con la campaña de promoción incluida.
Subaru España tiene previsto vender en nuestro país unas 500 unidades anuales de las 8.000 destinadas al mercado europeo, más o menos la demanda que suele tener un Subaru Outback.
El Subaru Levorg no es, quizás, el familiar más bello del mercado, aunque yo personalmente lo veo muy atractivo. Tampoco es el más equipado, aunque todo lo que ofrece de serie para lo que cuesta entra dentro de la lógica. Y tampoco es el que ofrece las mayores prestaciones, aunque los 170 CV de su motor bóxer son suficientes para una amplia mayoría. Por lo tanto, es un Station Wagon que ofrece un gran equilibrio en sus características y, aunque quizás para algunos no sea el más guapo y espectacular de la fiesta, sí que es el con toda seguridad el más interesante una vez empiezas a conocerlo.
Uno cambia de parecer a medida que se hace mayor y jamás antes me había fijado en una marca como Subaru. Sin embargo, cada día me gustan más. Diseño simple pero inconfundible, interiores toscos, pero prácticos y hechos para durar. Motor de gasolina y CVT, o lo tomas o lo dejas. No será un éxito de ventas en España, pero sí tiene su mercado en países montañosos o nieve abundante.